De Zhuhai para el mundo
Por MICHAEL ZÁRATE
Durante las dinastías Han (206 a.e.c.-220) y Tang (618-907), la ciudad de Zhuhai, en la provincia de Guangdong, fue una línea de comunicación vital de la antigua Ruta Marítima de la Seda. Fue un punto desde el cual China exportaba productos como la porcelana y el té hacia diversos puertos del Sudeste Asiático, del Medio Oriente y de Europa. Más de dos milenios después, Zhuhai busca mantener ese espíritu de apertura en una nueva época en la que China comienza a profundizar la denominada Iniciativa de la Franja y la Ruta.
Dentro de los planes del Gobierno chino de potenciar su comercio exterior, Zhuhai es una ciudad estratégica por donde se la mire: limita por el este con la pujante ciudad de Shenzhen y por el sur con la región administrativa especial de Macao, además de estar muy cerca de Hong Kong. Tanto la profundización de una estrategia liderada por la innovación como el desarrollo de la Zona Piloto de Libre Comercio de Hengqin contribuirán a que Zhuhai acelere su nivel de apertura. Para discutir todo ello, la ciudad organizó del 28 al 30 de noviembre el Foro de la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI, enfocado en la comunicación internacional y el proceso de globalización de las empresas chinas.
La Franja y la Ruta En un contexto internacional en el que el proteccionismo sigue siendo una amenaza latente, Zhuhai aspira a convertirse en un motor dentro de la proyectada Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI. A favor de estos planes resalta, por ejemplo, el acuerdo firmado el año pasado para el desarrollo de la Gran Área de la Bahía de Guangdong-Hong Kong-Macao (ubicada dentro del próspero delta del río de la Perla), la cual no solo potenciará la economía china, sino que impulsará también el desarrollo del sur del país y su conectividad con otras naciones y mercados.
Precisamente, en lo que respecta a la conectividad, Song Lihong, consejero del Departamento de Asuntos Generales del Ministerio de Comercio de China, explicó en el foro que la Iniciativa de la Franja y la Ruta busca “tres conectividades”: una conectividad en el comercio (la eliminación, por ejemplo, de barreras comerciales), una conectividad en la infraestructura (la construcción de mayores líneas férreas, carreteras y rutas aéreas internacionales) y una conectividad en la industrialización (la aceleración en el desarrollo de los países ubicados a lo largo de la Franja y la Ruta). “Así como el turismo chino ha alcanzado hoy una gran importancia para el mundo, estimamos que en un corto plazo China obtendrá notables avances en software y comercio electrónico. Más compañías chinas se volverán globales”, apuntó Song al referirse a la “nueva época” a la que el país se dirige luego del XIX Congreso Nacional del PCCh.
Zhang Guangnan, profesor del Instituto de Estudios de Desarrollo de Guangdong, Hong Kong y Macao de la Universidad Sun Yat-sen, señaló que el desarrollo compartido al cual apunta la Iniciativa de la Franja y la Ruta tiene “cuatro rostros”: puertos, industria-manufactura, servicios e innovación. En ese sentido, el profesor Zhang destacó el papel que cumplirá el Puente Hong Kong-Zhuhai-Macao como enlace entre la parte continental de China y los mercados del extranjero. En efecto, durante los días del foro, China Hoy tuvo la oportunidad de recorrer este puente, una obra faraónica de 55 km de longitud total, cuya construcción está por terminar después de 18 años de trabajo. Se trata del proyecto de autopista que atraviesa un mar más largo de China, el cual será abierto al transporte público este año.
Como señaláramos líneas atrás, la Zona Piloto de Libre Comercio de Hengqin, en Zhuhai, aspira también a cumplir un rol de conexión directa entre la provincia china de Guangdong y el mundo. De hecho, se valdrá de su gran cercanía con Macao para potenciar, a su vez, la cooperación económica y comercial con los países latinoamericanos y lusoparlantes. Desde 2009 hasta la fecha, la economía de Hengqin ha ido creciendo sostenida y considerablemente. Su PIB, por ejemplo, se ha incrementado unas 55 veces: de 285 millones de yuanes en 2009 a 15.745 millones en 2016. “El comercio global no solo aumentará el desarrollo económico, sino también la cultura y las condiciones de vida de la población”, declaró Wang Zuo, vicepresidente y alto investigador de la Sociedad de Gestión Logística de China.
En lo concerniente a la cultura, Julie Patterson, copresidenta del Comité del Festival de las Artes de China en la Unión Europea (UE), acotó que no hay mejor motor para un sólido desarrollo que los diálogos persona a persona, en los que el intercambio cultural es una pieza fundamental. En ese sentido, destacó que el Festival de las Artes de China en la UE –que acaba de celebrar su tercera edición– se haya extendido ya de Bélgica a Francia, Hungría y el Reino Unido. “La comunicación y el diálogo son un mensaje de paz de China que busca también el desarrollo y la prosperidad”, aseveró.
Interés de diversas partes del mundo En el foro realizado en Zhuhai sobresalió la presencia de una nutrida delegación de Bélgica, cuya capital, Bruselas, es también la principal sede administrativa de la Unión Europea. Bernard Dewit, presidente de la Cámara de Comercio Belga-China, enfatizó la urgencia de que la UE trabaje más al lado de China ante el proteccionismo de Estados Unidos y su salida de una serie de acuerdos internacionales (el TPP, el Acuerdo de París y, ahora último, el pacto de la ONU sobre migración). “China y la UE son dos jugadores que buscan la paz mundial y la prosperidad global”, manifestó Dewit, quien recordó los importantes proyectos trazados por la Franja y la Ruta en puertos de Grecia, Holanda, Italia, Portugal, Croacia, entre otros países europeos.
Dewit destacó, además, el tren que une a China con el puerto belga de Zeebrugge, el cual recibió en julio pasado su primera carga con autos Volvo fabricados en el país asiático. “Necesitamos energía e inventiva”, dijo Bernard Dewit, quien al referirse al futuro parafraseó una conocida frase del dramaturgo irlandés George Bernard Shaw: “Los optimistas inventaron el aeroplano y los pesimistas, el paracaídas. Necesitamos ser optimistas”.
A su turno, Jean-Paul Peuskens, vicegobernador de Limburgo, resaltó las ventajas de esta provincia belga, la cual no solo se ubica “en el corazón de Europa”, sino que cuenta con servicios de alta tecnología, una gran capacidad de innovación y un PIB de 26.000 millones de euros. Además, Peuskens recordó que Limburgo y Guangdong se declararon provincias hermanas en 2015. “Ambas no solo comparten el buen sabor de su comida, sino también su gran cantidad de emprendedores”, expresó. Más aún, en Limburgo –uno de los importantes centros de distribución de Europa– están ya situadas numerosas empresas chinas, como Sunward, ICBC, AirChina, ZTE, Haier, entre otras.
En otra parte del mundo, en África, también se sigue con atención la Iniciativa de la Franja y la Ruta. Solomon Rutega, cónsul general de Uganda en Guangzhou y líder del cuerpo consular en dicha ciudad china, sostuvo que la iniciativa no solo está logrando una transformación económica y social de África, sino que está cambiando la agenda de este continente. “Hoy estamos hablando ya de una África integrada, con inversiones, energía, educación, turismo y agroindustria”, manifestó Rutega, quien valoró el proyecto que China viene llevando a cabo en el puerto de Mombasa (Kenia), que permitirá su conexión con Uganda y otros países. “El transporte es el comienzo de la prosperidad”, declaró Rutega.
Otros de los ponentes en el foro de Zhuhai fue Ron Hoffmann, alto representante para la región del Asia-Pacífico de la provincia de Alberta (Canadá), quien recordó haber sido un testigo de excepción del proceso de desarrollo alcanzado por China, pues fue durante muchos años embajador de Canadá en países asiáticos como Afganistán y Tailandia, y ha desempeñado también funciones en legaciones diplomáticas en Myanmar, Laos y Camboya, tres países participantes de la Franja y la Ruta.
Durante su presentación, Hoffmann enfatizó que solo la provincia de Alberta recibe dos terceras partes de toda la inversión china en Canadá. Más aún, señaló que la Universidad de Alberta es la que cuenta con más doctores (PhD) chinos que reciben apoyo por parte del Gobierno del país asiático. “Queremos ver una Franja y una Ruta exitosas”, dijo Hoffmann. “Queremos ver un crecimiento de la clase media, mejores condiciones de vida para los pueblos, y una gobernanza más sana y más fuerte”. Asimismo, un dato a tomar en cuenta es que cinco de las más grandes oficinas representativas de la provincia de Alberta en el mundo se encuentran en China.
Así como Bélgica, Uganda y Canadá, son muchos otros los países que observan con atención la Franja y la Ruta. El foro realizado en Zhuhai fue un eslabón más en la construcción de un camino que una el destino de la población mundial.