La CNEEC da una mano en la reconstrucción de Irak

DESPUÉS del retiro de las tropas estadounidenses en 2012, el Gobierno Central de Irak ratificó más de 10 mociones en cuanto a la construcción de infraestructura en cooperación con empresas extranjeras, a fin de renovar lo más pronto posible sus viejas y abandonadas instalaciones e impulsar entre la población el retorno a la vida normal y a la producción. El Gobierno iraquí busca que estos proyectos no sean solo de gran relevancia, sino que puedan también contribuir a una acelerada recuperación del país y a la formación de personal cualificado iraquí en el sector de la construcción.

Bajo este contexto, el Ministerio de Administraciones Públicas de Irak firmó con China National Electric Engineering Co., Ltd. (CNEEC) el contrato EPC para el tratamiento de aguas residuales en Hilla, capital de la provincia de Babilonia, con una inversión total de 500 millones de yuanes. La obra, que estará lista en diciembre de este año, aliviará los efectos negativos provocados por el mal sistema de recolección y tratamiento de aguas residuales en Hilla.

Sitio de la obra.

Mejor capacidad de ejecución

El Municipio de Hilla, el Ministerio de Administraciones Públicas y la Oficina de Aguas Residuales de Babilonia han encargado a la parte iraquí la construcción de la obra, mientras que la parte china es responsable del diseño de la red de alcantarillado urbano y la CNEEC es un consultor en materia de ingeniería. De esta manera, se acelerará la tropicalización de ejecución del mercado de ingeniería iraquí y se aumentará la capacidad de ejecución de las empresas locales del sector.

El proyecto se encuentra ahora en la última etapa de instalación y ensayo en el montaje de parte de los equipos. La tecnología de la parte medular del proyecto es la más avanzada en el sector de tratamiento de aguas residuales: zanja de oxidación Carrousel, mientras que los equipos aplicados son también de modelo STAR Carrousel de DHV, creador holandés de la tecnología de aireación en la zanja de oxidación. Este modelo es el más avanzado y el de mayor grado de automatización del mundo, diseñado especialmente para garantizar el funcionamiento de una zanja de oxidación de gran envergadura, como la de este proyecto.

Además de ello, los equipos complementarios son también de primer nivel mundial. Como contratista general del proyecto, la CNEEC no solo garantiza que los equipos suministrados cumplan con las necesidades del diseño, sino que también puedan ser controlados mediante un programa automatizado; de este modo, el operador, cómodamente sentado en la oficina, vigilará y controlará el funcionamiento de los equipos en los diferentes eslabones del tratamiento de aguas residuales. El trabajo de depuración que está haciendo ahora es aún parcial y el paso siguiente será el ensayo del control automatizado. El contratista no podrá solicitar el inicio del procedimiento de traspaso de la obra, a menos que culmine exitosamente el periodo de ensayos.

Superación de dificultades

La realización del proyecto ha afrontado muchas dificultades debido a diversos factores, sobre todo en relación con el tema de la seguridad.

En junio de 2014, cuando el grupo terrorista Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) comenzó su accionar en Irak, muchas personas huyeron de la provincia norteña de Mosul rumbo a Bagdad y Babilonia. Es muy difícil saber si entre ellos había miembros terroristas, pero sí hubo quienes llegaron a saquear las tiendas de la calle principal de Hilla y a afectar la seguridad pública. Aunque estos casos no han sido tan terribles como las explosiones de coches bomba, sí generaron preocupación en la CNEEC. Con la ayuda de la Embajada de China en Bagdad y de los asesores de seguridad dentro del país, la CNEEC adoptó nuevas medidas de protección que implicaban el retiro y resguardo de todos los recursos. Al término de la jornada laboral, por ejemplo, se dispuso que los empleados y obreros realizasen simulacros de evacuación ante la eventualidad de cualquier problema.

La segunda dificultad tiene que ver con los fondos de la obra, lo cual también está relacionado con ISIS. Debido al súbito descenso de los precios internacionales del petróleo y a los gigantescos gastos en la lucha contra el terrorismo, Irak, importante país exportador de crudo e importador de productos petroleros, se encontró con un apretado tesoro público y se vio obligado a emplear el presupuesto del próximo año y el del año siguiente. En los primeros meses de este 2015, muchos funcionarios gubernamentales iraquíes no llegaron a recibir sus salarios. La gente no tuvo más remedio que vivir de sus ahorros. El Ministerio de Administraciones Públicas, departamento relacionado con el proyecto, tampoco escapó a este apuro: no pudo cumplir con los pagos a los contratistas desde diciembre de 2014. El proyecto, que necesita un gran fondo para la mano de obra y los materiales, afrontó un problema que no había surgido en los años anteriores. Como el proyecto no cuenta con ningún eslabón de financiación, sino que depende totalmente de las asignaciones del Gobierno Central de Irak, nosotros, como parte ejecutiva, no tuvimos más alternativa que resolver con premura el imprevisto problema.

Como gerente del Departamento de Proyectos Comerciales, llevo ya tres años al frente del proyecto. Después de consultar las leyes y los reglamentos vigentes en cuanto a la contratación en el campo de la ingeniería en Irak, me percaté de que las entidades ejecutivas de las obras estatales de este país aún aplican los estándares del Reino Unido de la década de 1980. Sin embargo, como sus leyes y reglamentos aplicados toman como referencia los artículos de la FIDIC (Federación Internacional de Ingenieros Consultores), pensé que los responsables iraquíes de este proyecto serían personas conocedoras de las normas internacionales y que, por ello, no tendríamos grandes problemas de comunicación respecto a cualquier problema tecnológico.

No obstante, la realidad superó lo previsto. Las normas y especificaciones aplicadas en China y el Reino Unido son muy diferentes, y son muy pocos los chinos que conocen bien los métodos de diseño y construcción del país europeo. Durante nuestras discusiones con los ingenieros iraquíes sobre la ratificación del diseño, nosotros les describimos pacientemente los detalles del trazado y les explicamos los fundamentos de nuestro diseño y su sustento científico.

El responsable del diseño de la parte iraquí, Murad, manifestó: “Los 10 años de guerra no solo dejaron un Irak devastado y se llevaron la sana atmósfera que reinaba en el país, sino que también hicieron perder a Irak mucho personal cualificado en diferentes sectores, entre ellos ingenieros y profesores, por lo que el nivel académico actual de los jóvenes ingenieros en Irak no puede compararse con el de la anterior generación. Nuestros jóvenes desean aprender verdaderos conocimientos y las técnicas de sus colegas chinos”.

China viene participando con denuedo en la reconstrucción de Irak. Más aún, toda empresa que quiere ir a Irak es fiscalizada minuciosamente por el Gobierno chino.

Asimismo, el Gobierno chino mantiene una actitud de apoyo y presta mucha atención al proyecto de tratamiento de aguas residuales en la ciudad de Hilla. La Oficina de Administración de dicho proyecto mantiene además un vínculo muy estrecho con la Embajada de China en Irak. Al ser una de las primeras firmas en conquistar el mercado iraquí, la CNEEC brinda también apoyo a las empresas chinas que van llegando a este país asiático.

La CNEEC ha concedido una especial atención y apoyo al proyecto en Hilla. Al enterarse de la falta de fondos económicos, adelantó el monto de dinero necesario para que lo diseñado fuera culminado en la fecha establecida. Sin el apoyo del Grupo CNEEC, el proyecto no habría podido avanzar exitosamente.

Al momento de la publicación de este artículo, solo faltaban algunos trabajos de acabado. El proyecto de tratamiento de aguas residuales en Hilla, gracias a la ayuda de los chinos, contribuirá a mejorar la vida del pueblo iraquí.