China y América Latina
necesitan estudiarse y
conocerse más
Wu Guoping.
EN el número anterior de nuestra revista, publicamos la entrevista exclusiva que concedió a China Hoy Wu Guoping, especialista chino en temas latinoamericanos, investigador del Instituto de América Latina de la Academia China de Ciencias Sociales y director del Centro de Investigación sobre América Latina y el Caribe de la Universidad de Ciencias y Tecnologías del Suroeste (centro de formación e investigación sobre naciones y regiones del Ministerio de Educación). En dicha entrevista, el profesor Wu habló de asuntos candentes en las relaciones entre China y América Latina y, en este número, desvela su preocupación por los peligros que acechan la relación sino-latinoamericana: todavía falta más estudio y conocimiento mutuo para una profundización en la relación bilateral.
Cada vez más
instituciones que
investigan sobre
Latinoamérica
Según el profesor Wu Guoping, antes, las instituciones chinas de estudios latinoamericanos se caracterizaban por su concentración y por su escaso número. A pesar de los cambios de los últimos años, todavía no hay suficientes estudios sobre América Latina, en comparación con el rápido desarrollo sino-latinoamericano.
Las investigaciones sobre América Latina se realizaban, principalmente, en dos instituciones: el Instituto de América Latina de la Academia China de Ciencias Sociales, un think tank pionero, en China, en el estudio de esa región. La otra, era el relativamente pequeño Instituto de Estudios de América Latina del Instituto de Relaciones Internacionales Contemporáneas. Las universidades de Beijing, Nankai y Fudan tenían sus propias instituciones de investigación sobre la región, aunque se centraban en la historia.
En los últimos años, el Ministerio de Educación ha empezado a prestar atención a los estudios sobre América Latina y el Caribe, y a la formación de especialistas en la región. Además de los ya mencionados, ahora existen dos nuevos centros de estudio: el Centro de Investigación sobre América Latina y el Caribe de la Universidad de Ciencias y Tecnologías del Suroeste y el Centro de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Estudios Extranjeros de Tianjin. Al mismo tiempo, algunas de las universidades subordinadas al Ministerio de Educación, como la Universidad de Estudios Internacionales de Zhejiang y la Universidad de Estudios Internacionales de Sichuan, han abierto instituciones de investigación. Las universidades Tsinghua, de Economía y Comercio Internacional y la de Estudios Extranjeros de Beijing han creado centros similares, como el Centro de Estudios Mexicanos o el Centro de Estudios Brasileños.
Como director del Centro de Investigación sobre América Latina y el Caribe de la Universidad de Ciencias y Tecnologías del Suroeste, el profesor Wu, al comparar su centro con la Academia China de Ciencias Sociales, cree que posee relativas limitaciones en lo referente al personal y a que ambas instituciones ponen el énfasis en diferentes terrenos. El centro que dirige puede combinar las ventajas de la universidad. Por ejemplo, en términos de economía circular, en el Instituto de Administración Económica, se pueden estudiar las características de ese modelo de desarrollo en América Latina y buscar la cooperación sino-latinoamericana en ese terreno. Otro ejemplo se encuentra en el aspecto legal. A medida que la relación bilateral es más estrecha, las empresas chinas entran en América Latina y viceversa, por lo que necesitan apoyo legal. Eso es lo que intenta hacer la Universidad de Ciencias y Tecnologías del Suroeste. La otra diferencia está en la formación de personal especializado de alto nivel, como doctores y postgraduados, principal objetivo de dicha universidad.
Falta conocimiento y
estudio mutuo
Wu Guoping ha visitado muchas veces América Latina y conoce a muchos estudiosos y amigos en esa región. “Según mi experiencia, el mayor problema subyacente en la relación bilateral es la escasez de conocimientos e investigaciones profundas entre ambas partes. En Latinoamérica, los estudiosos, las instituciones y las empresas con las que tengo contacto tienen un conocimiento limitado de China, igual que nosotros sobre ellos.”
El segundo problema es la falta de profundización en las investigaciones. “Personalmente, creo que América Latina necesita mayor profundización en los estudios sobre China. La mayor parte de los investigadores latinoamericanos que estudian China no saben chino y dependen demasiado del inglés. Así es difícil establecer una comunicación directa. En China, existe el mismo problema en los estudios latinoamericanos, pues son relativamente pocos los que hablan español. En ambos casos, la profundización de los estudios requiere de conocimientos culturales y el punto de partida es el dominio del idioma, que es el instrumento y la base para las investigaciones.”
El tercer problema es que, basándose en los estudios, se deben fortalecer los intercambios entre ambas partes, insuficientes en la actualidad. Hay que sentarse juntos para discutir los frutos de las investigaciones de cada uno. “El Instituto de América Latina de la Academia China de Ciencias Sociales celebra, anualmente, dos foros internacionales”, dijo el profesor Wu. Uno es la conferencia anual que realizan, de manera conjunta, el Instituto de América Latina de la Academia China de Ciencias Sociales y el CAF-Banco de Desarrollo de América Latina. En esa conferencia, se discuten temas de interés común y se comparten los resultados de estudios chinos y latinoamericanos, tales como informes anuales del CAF, de la CEPAL y del Instituto de América Latina de la Academia China de Ciencias Sociales. El otro es el foro internacional celebrado con el IOA (Institute of the Americas), que sirve de plataforma para la comunicación entre estudiosos chinos, latinoamericanos y estadounidenses. “Pero, eso no basta. Creo que los estudiosos chinos debemos salir del país, viajar más, con el objetivo de mostrar la situación política y económica de China e intercambiar con los colegas latinoamericanos”, comentó Wu Guoping.
El profesor Wu, que viaja frecuentemente, fue a México en 2012. Sus amigos mexicanos le hablaron de las exportaciones chinas a la nación azteca. “Estoy preocupado por las exportaciones chinas de productos con bajo valor agregado a América Latina, porque perjudican la distribución y el aprovechamiento eficiente de los recursos chinos. Es decir, elevar el valor agregado es un tema de interés, tanto para nosotros, como para los estudiosos latinoamericanos”.
En 2012, el Centro de Investigación sobre América Latina y el Caribe de la Universidad de Ciencias y Tecnologías del Suroeste y el Centro de Estudios Latinoamericanos sobre China celebraron, de manera conjunta, un simposio audiovisual, en el que debatieron asuntos comunes, como la influencia de la clase media en la política, la economía y el desarrollo social, y compararon Chile y China en ese aspecto. Fue un simposio exitoso y por eso quieren hacer el segundo este año, explica el profesor Wu.
Contactos no gubernamentales
insuficientes
“Los intercambios entre los pueblos son insuficientes”, aseguró Wu Guoping. “Tras mis observaciones, me parece que hay dos problemas. Uno es el visado. Ahora, los chinos deben realizar muchos trámites complicados para conseguir el visado de los países latinoamericanos. Eso afecta, en cierto grado, el intercambio entre los pueblos. El otro es el turismo. Ambas partes deben fortalecer la promoción en ese terreno. Afortunadamente, China y América Latina están tratando de cambiar la situación”. Muchas vías, como los proyectos de estudio o el turismo, pueden propiciar contactos extraoficiales, asegura Wu.
Cada día, más estudiantes chinos van a estudiar español a países de América Latina, como México y Chile, al tiempo que vienen más estudiantes latinoamericanos a China. En enero pasado, 44 jóvenes peruanos llegaron a China y estudiantes y empresarios chilenos vienen periódicamente al país. Para Wu, ese intercambio fortalece el vínculo entre los jóvenes.
Sin embargo, el intercambio entre los empresarios de ambas partes es insuficiente, opina Wu. Las empresas chinas todavía no han investigado lo suficiente sobre América Latina, por lo que sus inversiones en esa región se realizan, de algún modo, a ciegas. Las empresas latinoamericanas también necesitan investigar para aumentar su conocimiento del mercado chino. Es un problema común, concluye el profesor Wu.
El 28 de junio de 2012, el Instituto de América Latina celebró el Seminario sobre la Economía Brasileña y la Trampa de los Ingresos Medios, así como el debut de “La Trampa de los Ingresos Medios: Análisis de los Casos Latinoamericanos”.
El director del Instituto de América Latina, Zheng Bingwen, y Patricia Rodríguez, catedrática de la Universidad de Costa Rica y ex ministra consejera de la Embajada de Costa Rica en China en el seminario sobre el libro de la misma titulado “Sistema político chino: más allá de los estereotipos”. Fotos de Dong Ning
- Islas disputadas con China no pertenecen a Japón, dice experto japonés
- Relaciones China-México deben llevarse a nivel más alto, dice embajador chino
- ENTREVISTA: Visita de presidente Xi promoverá relaciones con Trinidad y Tobago, dice embajador chino
China y América Latina
necesitan estudiarse y
conocerse más