El electro pop de la chilena Javiera Mena llega a China
Por MICHAEL ZÁRATE
Es la cantante de pop indie chileno más reconocida a nivel internacional. Ni bien se supo que emprendería su primera gira por Asia, los diarios de su país calificaron la travesía como un paso más en la ascendente y vertiginosa carrera de esta cantautora de 34 años. Su aparición en el circuito musical, allá por 2006 con el disco “Esquemas juveniles”, fue una bocanada de aire fresco en un mundo en el que es difícil salir a flote con una propuesta tan personal.
Después de presentarse en las ciudades de Fukuoka y Tokio (Japón) y Seúl (Corea del Sur), la chilena Javiera Mena aterrizó por primera vez en China para mostrar su último disco, titulado “Otra era”, en Beijing y Shanghai. “La idea es que este sea un primer paso para poder volver a China”, mencionó Mena en una entrevista con China Hoy, minutos después de su concierto en el club Yugong Yishan de la capital china.
“La verdad es que siento que es muy difícil entrar en el mercado chino, y no tengo una ambición tan grande más que venir y poder tocar de nuevo. Quisiera venir de vacaciones y conocer realmente más a China”, declaró Mena, quien se llevó una gran impresión del avance tecnológico en el país, sobre todo al apreciar la facilidad con la que la gente puede pagar y hacer sus compras con el teléfono celular. “Ha sido impresionante. China es realmente otro planeta. La siento mucho más futurista que Latinoamérica. Me gusta y me llevo muchas enseñanzas de aquí”.
Javiera Mena no dejó pasar la oportunidad de visitar la Gran Muralla y se dirigió al sector de Huanghuacheng. Luego de publicar las fotografías en su cuenta de Instagram, escribió: “Experiencia inenarrable”. Sin embargo, en diálogo con nuestra revista, se animó a definir la sensación de estar allá. “Estar en la Gran Muralla, sentir ese espacio tan vasto en un lugar tan lejos de mi casa, me hizo sentir el infinito, como si saliera un poco de la mente estrecha en la que estaba por mi trabajo en Latinoamérica, en la que tengo que hacer esto y terminar lo otro”.
Mena, quien practica la religión budista y es vegetariana, pudo ir también al templo de Yonghe, o Yonghegong, uno de los monumentos más importantes del budismo tibetano en China. La barrera idiomática fue también algo que sintió. Cuando llegó de casualidad a un restaurante vegetariano cerca del templo Yonghegong, Mena pidió el menú y le trajeron un cargador de teléfono móvil.
A pesar de su apretada agenda, Mena se tomó el tiempo de escuchar música pop china. “Siento que acá son muy baladistas. Lo que rescato de la música china, más que la japonesa o la coreana, es que acá se toman su tiempo”, consideró. “Las canciones no son solo de 3 minutos y medio. Una canción puede durar 5 minutos, con finales largos y eso es algo que me ha movido mucho. La música china tiene esa mezcla de suavidad y fortaleza, como de yin y yang. La quiero explorar más”.
La cantautora chilena se sorprendió al apreciar que la música tradicional china se parece mucho a la música latinoamericana, en especial, a la música andina. “Me gustan esos sonidos iguales. He estado escuchando canciones y esa escala pentatónica que ambas comparten la quiero también explorar más”.
Mena nació en 1983, el año del cerdo para el horóscopo chino. Entre las características de los nacidos bajo ese signo están el ser honorables, filantrópicos, decididos, optimistas, sinceros y sociables. “¿De estas seis, cuántas características ha acertado en usted el horóscopo chino?”, le preguntó China Hoy. “Todas me gustan, pero me cuesta creer que soy decidida. Ahí sí me sale el géminis y mi indecisión”, señaló. “Me encantaría cultivar la decisión y rendirle así culto a mi signo zodiacal chino”, finalizó.