30 años de fructífera relación sino-boliviana

19 de diciembre de 2013. El presidente, Xi Jinping, da la bienvenida al presidente de Bolivia, Evo Morales, en el Gran Palacio del Pueblo en Beijing. CNSPHOTO
DESDE que China y Bolivia establecieron vínculos diplomáticos hace 30 años, las relaciones bilaterales se han venido desarrollando sin contratiempos. Los líderes de ambos países han mantenido frecuentes contactos y la confianza mutua sigue creciendo.
El presidente Constitucional de Bolivia, Evo Morales Ayma, visitó China en tres oportunidades: la primera antes de la toma de posesión de su cargo en 2006, cuando sostuvo conversaciones con el entonces presidente chino Hu Jintao. Los dos jefes de Estado se reunieron nuevamente en 2009, en paralelo a la conferencia de las Naciones Unidas, en Nueva York. El hermano presidente Evo volvió a visitar China el 10 de agosto de 2011 y en diciembre de 2013, en ocasión del lanzamiento del satélite Túpac Katari. Además, se entrevistó con el actual presidente, Xi Jinping, en Brasilia, en ocasión de la Cumbre de los BRICS en la gestión 2014.
Bolivia reconoce que el Gobierno de la República Popular China es el único gobierno legal en China y que Taiwan es una parte inalienable de su territorio, y así lo expresa en el comunicado sobre el establecimiento de relaciones diplomáticas firmado en Nueva York el 9 de julio de 1985, en el que el Gobierno chino expresa su simpatía por la posición de Bolivia para lograr una solución a la cuestión de una salida al Océano Pacífico.
Los dos gobiernos han convenido en desarrollar las relaciones de amistad y cooperación entre ambos países sobre la base de los principios de respeto mutuo a la soberanía e integridad. Producto de ese interés y deseo de incrementar las relaciones de amistad y cooperación económica y técnica, Bolivia invitó a una comisión económica a visitar el país. La misión china estuvo encabezada por Liu Helin, quien visitó el país entre el 4 de diciembre de 1985 y el 7 de enero de 1986, día en el que se firmó un acuerdo de cooperación.
La Primera Reunión de la Comisión Mixta Económica y Comercial Boliviana China, establecida por lo estipulado en el Convenio de Cooperación Económica y Técnica suscrito entre ambos países el 5 de mayo de 1986, tuvo lugar en la ciudad de La Paz, Bolivia, del 7 al 9 de noviembre de 1988.
La delegación boliviana estuvo presidida por Pedro Martínez Martínez, subsecretario a.i. de Política Bilateral del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, mientras que la Delegación Económica y Comercial del Gobierno chino estuvo presidida por Yan Yiwu, subdirector del Departamento de Asistencia al Exterior del Ministerio de Relaciones Económico-Comerciales con el Exterior.
Desde esa época hasta hoy se han llevado a cabo doce reuniones de la Comisión Mixta Económica Comercial Boliviana China, la última llevada a efecto en Beijing entre el 4 y 5 de mayo de 2015, donde se llegó a importantes acuerdos.
Las negociaciones se han desarrollado siempre en un ambiente amistoso y de mutua compresión. Ambas partes podemos recordar con satisfacción los logros obtenidos en la cooperación económico-comercial y de beneficio recíproco desde el establecimiento de las relaciones diplomáticas entre los dos países, así como los intercambios de comisiones de alto nivel, opiniones positivas y pragmáticas, que son las que articulan el ulterior desarrollo de las relaciones económicas y comerciales entre ambos países. Además, se puede constatar que existen posibilidades objetivas para su profundización.
Bolivia y China han mantenido un permanente intercambio de misiones oficiales y técnicas en diversas áreas de cooperación.
Adicionalmente, ambas partes han expandido la cooperación bilateral en nuevas áreas, como lo demuestra el hecho de que China lanzó el primer satélite de telecomunicaciones para Bolivia.
Al menos diez empresas de China ejecutan proyectos públicos clave para el Estado boliviano en áreas como el transporte, los hidrocarburos, las telecomunicaciones, la infraestructura y la producción por un monto de inversión que supera los 1000 millones de dólares.
Los proyectos son la construcción del ingenio azucarero de San Buenaventura, la planta piloto de baterías de litio, el ferrocarril Bulo Bulo-Montero, la carretera Trinidad-San Ignacio de Moxos, Papelbol y próximamente la construcción del complejo Siderúrgico del Mutún, así como la carretera Rurrenabaque-Santa Rosa-Australia-El Choro-Riberalta. Otros proyectos operan en el área de hidrocarburos y energías limpias.

Bolivia es un país que tiene ingentes cantidades de recursos naturales, con una ubicación geográfica importante y estratégica —situada en el corazón de Sudamérica— y está siempre dispuesta a trabajar con China para lograr una cooperación integral y de beneficio recíproco, con el fin de que los pueblos, las instituciones y los empresarios de ambos países se vean beneficiados.
Al cumplirse 30 años de relación, los dos países debemos vigorizar los vínculos políticos sinceros y amistosos. Es por eso que hoy Bolivia está dispuesta a mantener un contacto de alto nivel con China, incrementar el diálogo y los intercambios entre los gobiernos, partidos políticos y legislaturas de ambos países, y brindar apoyo y entendimiento mutuo en los asuntos de importancia que sean del interés de ambos países, particularmente los referidos al tema de la Madre Tierra y el cambio climático, así como en lo referido a la autosuficiencia de alimentos.
Ambos Estados deben impulsar una cooperación pragmática y de beneficio mutuo de manera integral, desde el ámbito cultural, académico, agrícola, minero, siderúrgico, transporte, hidrocarburos, litio y minerales, buscando siempre la innovación tecnológica, el desarrollo de infraestructura y la transferencia de ciencia y tecnología. Deben utilizar al máximo su potencial, así como innovar las vías de interdependencia, expandir los terrenos y elevar los estándares de cooperación.
Actualmente, los intercambios culturales y personales, a través de la expansión de la cooperación en áreas como la cultura, la educación, los servicios médicos, la salud pública, el deporte, el turismo, entre otras, se encuentran en franca expansión y son beneficiosos para ambos Estados.
Bolivia y China son aliados en los asuntos multilaterales, donde la cooperación, las consultas y la coordinación con las organizaciones regionales e internacionales pertinentes han sido necesarias, así como en los asuntos globales de seguridad alimentaria, cambio climático y desarrollo sostenible.
Nuestro presidente, Evo Morales, en reiteradas oportunidades, ha agradecido a China por su contribución activa y a largo plazo en el desarrollo social y económico de Bolivia. También da prioridad a sus relaciones con China y trabajará con ella para reforzar los lazos políticos, fortalecer la cooperación en materia de economía, comercio, agricultura, ciencia y tecnología, infraestructura y cultura, y cooperar en los asuntos regionales e internacionales.
Actualmente, Bolivia vive un proceso de cambio bajo la dirección del presidente Morales. El pueblo boliviano ha tenido en los últimos años un progreso considerable en la exploración de un camino de desarrollo que se adapte a sus condiciones plurinacionales, con respeto a la diversidad.
La tierra tiene suficientes recursos para satisfacer las necesidades de los hombres. Sin embargo, no está preparada para su codicia, además que esa codicia malsana no ayuda a que progrese la vida, sino que lucha por hacerla desaparecer. Las culturas tradicionales, como la boliviana, vivimos sin considerarnos superiores a nadie, ni nadie es más que nosotros. Todos somos iguales y por eso proclamamos que la paz permanente y perdurable es el único camino para la vida, y que el “vivir bien” y en armonía debe ser un objetivo perdurable.
Tengamos fe en nuestros Estados, en nuestros líderes, en nuestro futuro promisorio y, al cumplirse 30 años de relaciones diplomáticas, hagamos votos para que reine la paz, la dicha y la prosperidad en todos los bolivianos y chinos sin exclusiones de ninguna naturaleza, que la Pachamama (Madre Tierra) nos proteja y que el tata Inti (Padre Sol) nos dé buenaventura.
A medida que ganan espacio los intercambios, China y Bolivia amplían el abanico de su histórica cooperación, amparados en la absoluta confianza de una amistad recíproca y en una hermandad cada vez más fuerte.
Ambos pueblos tenemos una cultura milenaria. En Bolivia festejamos el año nuevo aymara, tenemos 36 naciones, así como una diversidad cultural. China cuenta igualmente con una cultura milenaria, 56 etnias y muchos dialectos. Ambas culturas son pacientes y en la paciencia está la clave.
Ambas se desarrollan y se necesitan para alcanzar metas comunes, como el vivir en armonía con la Madre Tierra. ¡Felicidades Bolivia y China!
*Embajador del Estado Plurinacional de Bolivia.