El poeta chileno Gonzalo Rojas es traducido al chino
Por MICHAEL ZÁRATE
El 28 de junio se presentó en Beijing la obra El sol es la única semilla, una selección de 88 poemas escritos por el chileno Gonzalo Rojas, los cuales han sido traducidos al chino con motivo del centenario del nacimiento del destacado poeta, quien fue premio Cervantes en 2003. La publicación ha sido hecha por la editorial china The Commercial Press.
La ceremonia, realizada en la sede de la Embajada de Chile en China, contó con la presencia especial de Catalina Rojas, la nieta del poeta Gonzalo Rojas y quien llegó desde Alemania, donde trabaja como traductora.
Durante el lanzamiento, el embajador chileno en China, Jorge Heine, resaltó los estrechos vínculos entre Gonzalo Rojas y China, país que visitó por primera vez en 1959, cuando tuvo la oportunidad de reunirse con el líder chino Mao Zedong, con quien compartió una larga conversación sobre poesía.
De hecho, Rojas fue también el primer agregado cultural que tuvo Chile en China, cargo al que fue nombrado por el ex presidente chileno Salvador Allende y que desempeñó en 1971 y 1972.
El embajador Heine destacó la prolífica producción de Gonzalo Rojas, quien terminó publicando medio centenar de libros, a pesar de que a los 60 años tenía apenas tres libros editados. Durante la ceremonia, Heine leyó el poema “Un bárbaro en el Asia”, fechado en 1971 y escrito por Rojas en la plaza Tian’anmen, en Beijing.
A su turno, el reconocido hispanista Zhao Zhenjiang, quien estuvo a cargo de la traducción al chino de los poemas de Rojas, reconoció el arduo trabajo que fue mantener el sentido de la obra del poeta chileno en el idioma chino.
“Gonzalo Rojas es un poeta surrealista. Estuve siempre dudando de si mi interpretación era correcta o no. Mi pobre cerebro oriental no alcanza a interpretarlo”, señaló el profesor Zhao, quien bromeó diciendo: “Prefiero traducir cinco poemas de Gabriela Mistral que uno de Gonzalo Rojas”.
Mientras tanto, Catalina Rojas, la nieta del poeta chileno, compartió con los invitados un poema que le escribió su abuelo en marzo de 1972, cuando ella tenía apenas 3 meses de edad y el poeta vivía en Beijing. “Desde temprano en mi vida aprendí a apreciar la vibración de su palabra”, dijo Catalina Rojas.
Catalina Rojas recordó que el poeta fue director del Departamento de Español de la Universidad de Concepción (Chile) en 1966, cuando llegaron los tres primeros estudiantes chinos a esa casa de estudios, los cuales a la hora del té solían visitar la vivienda de Gonzalo Rojas. “Como ha mencionado Julio Cortázar, la obra de Gonzalo Rojas le devuelve a la poesía tantas cosas que le habían quitado”, mencionó su nieta.