La cultura de la piedad filial en China
LA “piedad filial” es un concepto originario y parte muy importante de la cultura oriental, especialmente de la cultura tradicional china. Tanto, que mucha gente fuera de Asia lo desconoce y ni siquiera entiende las películas orientales que tratan sobre la ética familiar.
Los caracteres chinos se dividen en seis categorías, y el carácter “孝”, que significa piedad filial, pertenece a la categoría de aquellos que se forman combinando dos o más elementos, cada uno de ellos con su propio significado. “孝” es la combinación de dos elementos: el de arriba significa “viejo”, y el de abajo, “hijo”. Esta combinación simboliza tres cosas. La primera se refiere al orden natural de las generaciones, la más vieja arriba y la más joven abajo. La segunda explica que la generación más vieja, que está encima, debe proteger del viento y la lluvia a la generación más joven, que está debajo. Y la tercera se refiere a quienes están debajo, los descendientes, deben proporcionar apoyo y soporte a los ancianos, que están encima.
Estatua de Confucio.
La piedad filial, base de la moral
El concepto de “piedad filial” apareció en China hace mucho tiempo. Según la leyenda china, el hecho de que Shun, un simple civil, llegase a convertirse en emperador se debió exclusivamente a su piedad filial. Dice la leyenda que hace 4000 años un campesino perdió prematuramente a su madre. Él se dedicaba a cultivar la tierra y sufría el temperamento violento y feroz de su madrastra. Su medio hermano también lo trataba de manera grosera y poco razonable. Pero el joven agricultor, nunca se quejó de nada y mantuvo el respeto y la obediencia debida a sus padres, además de redoblar los cuidados a su hermano menor. La extraordinaria piedad filial que mostró conmovió al cielo. A partir de entonces contó con la ayuda de un elefante para labrar la tierra y con la de los pájaros para escardarla.
Este joven agricultor era Shun, y su historia está recogida en el primer cuento de la Colección de 24 Ejemplos de Piedad Filial de la China antigua. El emperador Yao se enteró del asunto y casó a sus dos hijas con Shun, en quien abdicó el trono imperial.
El pensamiento central de Confucio reside en el principio universal de la “benevolencia”. Implementar este principio requiere de un punto de partida, y éste es la piedad filial. Sólo cuando una persona ama a sus padres podrá amar a los demás. Para Confucio “el mundo se vuelve benévolo” si cada persona respeta y ama a sus padres y trata fraternalmente a sus hermanos.
Zeng Zi, discípulo de Confucio, desarrolló después el pensamiento de su maestro en cuanto a la piedad filial y fundó una facción del confucionismo dedicada a la piedad filial.
8 de mayo de 2015. Estudiantes de una escuela primaria en Hefei, Anhui, vestidos al estilo antiguo, ofrecen té a sus madres como una muestra de piedad filial. CFP
Piedad filial, el fundamento moral más importante
¿En qué consiste exactamente la piedad filial? Según el confucianismo, la esencia del fundamento moral de la “piedad filial”, considerada un acto de bondad y una virtud, radica en tratar bien a los padres.
En la antigüedad, se tenía en muy alta consideración el fundamento moral de la “piedad filial”, y los emperadores feudales la utilizaban para gobernar el país. La piedad filial acabó derivando en una serie de normas sociales que regían el comportamiento tanto del emperador como el de la gente común.
Confucio dice en Analectas Libro I Xue Er (aprender) que si un hombre trata bien a sus padres en casa difícilmente se portará mal con sus jefes en el trabajo, ni peleará con sus colegas, ni participará tampoco en actividades antisociales. Según el Libro de la Piedad Filial, la persona que interioriza este principio moral comienza por respetar a sus padres y acaba siendo leal al país y al monarca, para finalmente alcanzar éxito profesional y prestigio social.
Dos milenios después de la muerte de Confucio, un popular libro de la dinastía Qing, titulado Dizigui (Reglas para discípulos), considera que la piedad filial es lo primero que deben aprender los niños para, sobre esta base, empezar a estudiar todo lo demás.
¿En qué consiste la piedad filial?
En primer lugar, los hijos tienen que cuidar bien de sí mismos y hacerse cargo de sus propios asuntos para evitar preocupaciones y desvelos a sus padres. El Libro de la Piedad Filial cuenta que en una ocasión Confucio le dijo a Zeng Can: “Tanto el cuerpo como el cabello o la piel son regalos que recibimos de los padres, por lo que no debemos dañarlos. Esta es la primera regla de la piedad filial”. Lo que más preocupa a los padres es la seguridad de sus hijos. Desatender la propia seguridad implica preocupaciones para los padres. Por eso, hacer que “quienes tienen canas entierren a los de cabello negro” es, sin duda, la mayor falta de piedad filial.
Hacerse cargo de sus propios asuntos incluye vestir suficiente, limpia y decentemente, levantarse y acostarse a la hora debida, estudiar mucho, trabajar con firmeza, casarse en el momento adecuado, tener descendencia cuando toca, hacer amistades con gente decente, no hacer nada ilegal, etc. Evitar preocupaciones a los padres por causa de estos asuntos también es una muestra de piedad filial.
En segundo lugar, y según las condiciones materiales existentes, los hijos deben satisfacer las necesidades vitales de sus padres, asumir su manutención y asegurarse de que estén bien alimentados, protegidos del frío, tratados cuando estén enfermos y bien atendidos en su vida cotidiana.
China ha sido tradicionalmente una sociedad agrícola en la que la manutención de las personas mayores corría a cargo de sus hijos. En la Colección de 24 Ejemplares de Piedad Filial se incluyen varios casos de cómo los hijos mantienen a sus padres a pesar de las limitaciones económicas.
Zilu, discípulo de Confucio, se alimentaba de verduras silvestres cuando era pequeño. Su vida mejoró después de que Confucio lo tomase como discípulo y lo educase. Desde entonces, Zilu caminaba más de cincuenta kilómetros hasta la casa de sus padres cargado con arroz para ellos.
La piedad filial también es un sentimiento y una actitud. En chino existen las palabras “孝顺”(obediente) y “孝敬” (respetuoso). Dizigui establece que cuando los padres enseñan o regañan, los hijos tienen que escuchar y obedecer con mucho respeto.
En Analectas Libro II Wei Zheng (gobernar), Confucio dijo: “Cuando se habla de piedad filial se piensa que se trata de la capacidad de mantener materialmente a los padres. Pero sin respeto, ¿cuál es la diferencia entre mantener a los padres y dar de comer a las mascotas?”
10 de mayo de 2015, en Hangzhou. Con motivo del Día de la Madre, 24 nueras lavan los pies de sus suegras. CFP
Aunque se ha reconocido que las exigencias de la piedad filial antigua iban a veces más allá del sentido común, en general, sus valores morales son positivos, razón por la cual se han ido transmitiendo hasta la actualidad.
Hoy en día algunas escuelas enseñan a los estudiantes a servir té a sus padres, a lavarles los pies por la noche y a ayudar en los quehaceres domésticos con el fin de cultivar en los niños el sentido de piedad filial. En algunos lugares se seleccionan anualmente ejemplos del cuidado de los ancianos como modelos de piedad filial, y en otros incluso se tiene en cuenta en la verificación y valoración de los funcionarios públicos.
La cultura tradicional requiere que las personas amen a sus padres a fin de promover el amor a los padres de los demás, y luego extender este amor a todos los que están alrededor. Así se logra un tipo de amor que va más allá del parentesco.
En cuanto al sentido de la piedad filial, siempre ha existido un ma-lentendido, que considera que “孝” consiste en una obediencia total a los padres. En realidad, se trata de una comprensión parcial de la piedad filial establecida desde la antigüedad. Si los padres actúan mal, los hijos deben señalarles. En caso contrario, comenten el error de “atrapar a los padres en la injusticia”, una falta de “孝”. Y si los hijos hacen cosas malas so pretexto de la piedad filial, cometen el mismo error, un acto contrario a lo que requiere la piedad filial.
*Escritor independiente.