EL Museo de Carros Antiguos de China tiene una característica propia entre tantos museos de nuestro país: se encuentra debajo de la autopista que va desde Jinan, capital de la provincia de Shandong, hasta la ciudad de Qingdao. No hace falta salir de la vía. Basta con aparcar en el estacionamiento que está al lado de la autopista e ir a la entrada del museo, donde uno podrá encontrar una gran variedad de antiguos medios de transporte. Será un viaje por más de 2600 años de historia.

El Museo de Carros Antiguos de China fue construido en una zona de vestigios de la cultura Houli, en el pueblo de Qiling, provincia de Shandong. Los vehículos antiguos fueron descubiertos cuando se construía la referida autopista. El gobierno decidió protegerlos sobre el terreno, así que levantó el museo debajo de dicha ruta. La autopista Jinan-Qingdao cruza de oeste a este de la provincia. Los automóviles modernos pasan veloces como un rayo, mientras, debajo del terreno, los carros antiguos de 2600 años de historia permanecen en silencio. Movimiento y tranquilidad, dos estados diferentes, conforman un fuerte contraste. El viaje por miles de años conecta a ambos.

El museo fue concluido en 1994. De maderaje tradicional chino, se compone de dos partes: el pabellón de carros de caballos del Período de Primavera y Otoño (770 a.e.c.-476 a.e.c.) y el pabellón de vehículos antiguos de China, gracias a los cuales es el museo mejor sistematizado y equipado. No solo exhibe vestigios de los carros de caballo, sino también reliquias culturales.

Carros de caballos de la dinastía Qin (221-206 a.e.c. )restaurados.

 

Se exhiben carros conducidos por camellos de la dinastía Liao (907-1125) restaurados.

El pabellón de carros de caballo funerarios está debajo de la tierra, pues su construcción tuvo como base los vestigios hallados de los carros de caballo funerarios del Período de Primavera y Otoño. Fue considerado “uno de los diez descubrimientos arqueológicos de 1990” por su gran valor arqueológico y su presentación: dispone de una gran cantidad de carros de caballo funerarios, incluidos todos los accesorios y adornos concernientes, muy bien conservados. Esta sala de exposición tiene un vano de 15 metros y cuenta con dos filas de hoyos. El primer hoyo tiene 30 metros de longitud y 5 metros de ancho, en el que se encuentran 10 carros funerarios y 32 caballos. En el segundo hoyo, de 8 metros de longitud y 3 metros de ancho, se han colocado 3 carros y 6 caballos. La madera de los carros se ha podrido ya, pero los adornos de cobre dejados en estos se encuentran bien preservados. Los esqueletos de los caballos se conservan bien, así como los objetos decorativos que cuelgan de los cráneos y cuellos.

El pabellón de vehículos antiguos se compone de tres salas, de acuerdo con el paso del tiempo. Una gran cantidad de reliquias históricas, modelos, carros antiguos remodelados y fotografías muestra el surgimiento, desarrollo y perfeccionamiento de los vehículos, las sillas de mano y las carrozas imperiales. A su vez, explica el uso de los carros de caballo en las guerras, en la producción y en la vida cotidiana. Se exhiben 19 carros reconstruidos de diversas épocas y diferente funcionamiento, más de cien modelos, además de numerosos adornos y reliquias. Todos son tesoros nacionales.

Entre la gran cantidad de carros antiguos que se exhiben figuran tanto los grandes, en los que cabían decenas de cabezas de ganado, como los pequeños, que eran empujados por una sola persona. Los carros se usaban en la agricultura, la caza, la guerra, entre otras finalidades. Los caballos, bueyes, asnos, mulos, ciervos, perros, e incluso el hombre y el viento, servían como fuerza motriz. Ello significa que, durante miles de años, la fabricación y la técnica de conducción se renovaron y mejoraron, lo que nos da señales de su gran significado en la historia del transporte y de la humanidad.

El Museo de Carros Antiguos de China ha sido calificado como un lugar turístico de cuatro estrellas. Está situado a 126 kilómetros de la autopista Jinan-Qingdao y se necesita una hora para visitarlo. Dos grandes estacionamientos, a ambos lados de dicha autopista, facilitan el transporte.