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2016-December-15 09:19

Un año de amistad y cultura

 

El Año de Intercambio Cultural China-América Latina y el Caribe no solo promovió los intercambios culturales, sino que sirvió además como un espacio para que los pueblos de ambas partes materializaran sus sueños. CFP

 

Por WANG XIUQIN y DANG XIAOFEI

 

Este 2016 fue declarado como el Año de Intercambio Cultural China-América Latina y el Caribe, una celebración que se convirtió en el mayor evento de participación multilateral entre las dos regiones, con cerca de 30 naciones latinoamericanas participantes, muchas de las cuales, incluso, no han establecido aún relaciones diplomáticas con la República Popular China.

 

Esta fue una iniciativa propuesta en julio de 2014 por el presidente chino, Xi Jinping, durante la reunión con los líderes de los países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), y fue inaugurada este año con una gran gala. Ha tenido una gran respuesta por parte de todos los participantes.

 

Históricamente, dada la amplia distancia a través del océano, China ha sido vista por los latinoamericanos como un país lejano y desconocido. De hecho, en América aún suele utilizarse el término “historias chinas” para referirse a asuntos inimaginables y difíciles de comprender. A pesar de que en los últimos años se ha dado un desarrollo vigoroso del comercio, de los intercambios bilaterales y de la comprensión mutua, todavía falta una mayor interacción, lo cual ha hecho del Año de Intercambio Cultural China-América Latina y el Caribe una oportuna y necesaria ocasión para estrechar lazos.

 

Gala para el público chino

 

Mientras la cultura china es amplia y profunda, con una larga historia que ha visto surgir una gran variedad de artes, la cultura latinoamericana es grandiosa, abierta e inclusiva, y contiene características artísticas muy distintas a las de nuestro país. Con el fin de profundizar el conocimiento mutuo, durante el Año de Intercambio Cultural China-América Latina y el Caribe se organizaron diversas actividades, como representaciones artísticas, exposiciones, foros, proyecciones de películas, ferias de libros, entre otras. Estos eventos han tenido lugar tanto en China como en América Latina.

 

El Año de Intercambio Cultural China-América Latina y el Caribe se inauguró en Beijing a finales de marzo, con el objetivo de mostrar la esencia artística de los países latinoamericanos. En dicha ocasión, excelentes conjuntos artísticos provenientes de Colombia, Cuba, México, Brasil, Argentina, entre otros países, fascinaron a los espectadores chinos con muestras de la variada cultura del continente americano. Destacaron, por ejemplo, la danza de las tijeras de Perú, en la cual los artistas llevan tijeras en la mano mientras bailan, y el mariachi de México, cuya interpretación de la guitarra y el violín tiene un estilo único.

 

Pero los artistas latinoamericanos también sorprendieron al público local con temas tradicionales chinos. Jóvenes mexicanos, portando los típicos sombreros de su país, cantaron ¿Por qué las flores son tan rojas?, un tema folclórico chino, mientras que la actriz brasileña Sara Sarres interpretó también una canción popular de China. Las excelentes interpretaciones se llevaron los aplausos prolongados de los espectadores locales. Los chinos han podido disfrutar de una gran variedad de demostraciones de alto nivel de artistas latinoamericanos.

 

A lo largo del año se han celebrado también el Festival de Música de América Latina y el Caribe, el Festival de Gastronomía del Caribe, el Festival de Cine del Caribe, y el Festival de Artes de América Latina y el Caribe, eventos que generaron una ola cultural en nuestro país. Cabe destacar que las actividades presentadas por los países caribeños raramente han sido vistas en China.

 

Durante este Año de Intercambio Cultural también se organizaron eventos como el Foro de Músicos Profesionales de América Latina y el Caribe, el Festival de la Cultura Ibérica de la Universidad de Estudios Extranjeros de Beijing y el Festival de Música de Verano de Guiyang, así como varias visitas de medios de comunicación y entidades artísticas latinoamericanas a China. También se programaron giras por el país, como las de la compañía Tango Desire de Argentina, y cooperaciones musicales, como fue el caso del marimbista mexicano Saúl Medina, quien tocó junto con la Orquesta Sinfónica de Qingdao.

 

Qin Wenhuan, subdirector general de China Performing Arts Agency, explica que, además de llevar a cabo programas de alto nivel, “las actividades de intercambio dirigidas a la gente común y corriente han sido un hilo conductor en todo el año”. Por ejemplo, el conjunto de danza colombiano Pasión del Caribe entró en la calle Sanlitun de Beijing y bailó con los residentes de la comunidad. La compañía de danza cubana Lizt Alfonso y el Grupo TangoDesire de Argentina ofrecieron excelentes representaciones en el distrito de Yanqing (Beijing), mientras que diversas bandas latinoamericanas y caribeñas sorprendieron con sus presentaciones en las universidades chinas. Estas actividades permitieron que los ciudadanos disfrutaran de cerca el apasionado arte de América Latina.

 

Fiesta cultural china

 

A principios de este año, un gran número de conjuntos artísticos de China realizaron casi 50 presentaciones en cerca de 20 países latinoamericanos, bajo el tema de “Una feliz Fiesta de la Primavera”. Su objetivo era mostrar el encanto de la cultura china. En el XV Festival Iberoamericano de Teatro, celebrado en Colombia, China expuso linternas maravillosas de los guerreros de terracota. En la “Semana Cultural China-Un encuentro con la Ruta de la Seda” se presentaron una serie de programas culturales sobre China. El joven músico Zhao Cong ofreció en México cinco recitales fantásticos de pipa (tradicional instrumento de cuerda chino) y un gran concierto junto con la orquesta sinfónica local. Estos eventos han logrado enriquecer la asociación de cooperación integral entre China y América Latina.

 

Como embajador de China para el Año de Intercambio Cultural China-América Latina y el Caribe, Lang Lang, el famoso pianista chino, viajó en agosto a Sudamérica para realizar una gira por Argentina y Chile. Ofreció conciertos en el Teatro Colón de Buenos Aires y en el Teatro Municipal de Santiago. La exquisita y serena interpretación de Lang Lang, así como el incomparable efecto sonoro de los famosos teatros, hicieron que los espectadores disfrutaran de un romántico viaje musical. Sus conciertos no solo le dieron un mayor realce al Año de Intercambio Cultural, sino que fueron también una puerta de ingreso para otros grupos artísticos de China en América Latina en el segundo semestre del año.

 

Después de Lang Lang, Ma Xiaohui, la famosa intérprete de erhu (violín chino de dos cuerdas), arribó a la Ciudad de México para ofrecer dos conciertos y tres conferencias sobre la cultura china, lo cual representó un paso importante para la difusión de la música tradicional china en el exterior. Ma también se presentó con la orquesta sinfónica IPN de México, de 50 años de trayectoria, y cautivó al público con excelentes presentaciones.

 

“Me he dado cuenta de que la música es un puente, y el erhu y yo también lo somos”, expresó Ma sobre su viaje a América Latina. “Voy a dar a conocer a todo el mundo la antigua cultura y arte de China a través de la interpretación del erhu, y levantaré las fronteras para que todos se comprendan mediante la música”.

 

El 40° Festival Internacional Cervantino se celebró en la ciudad mexicana de Guanajuato en octubre pasado. Durante tres días consecutivos se realizó “La noche de China”, en la que se presentaron DJ de música electrónica, funciones artísticas visuales y exhibiciones del patrimonio no material cultural de China y de artesanía tradicional que mostraron la tradición y la cultura contemporáneas del país.

 

La Orquesta Sinfónica de Qingdao, una estrella en ascenso, llevó a cabo una gira por Argentina y Chile. Por su parte, la Orquesta Central de Nacionalidades de China estuvo en Colombia y México, donde ofreció el concierto “Redescubrimiento de la música china”, el cual tuvo una gran acogida entre las autoridades políticas, el público y los principales medios locales.

 

La Compañía Nacional de Ópera de Beijing presentó en México la Leyenda de la Serpiente Blanca y la Historia de Hongniang. El Museo del Palacio Imperial organizó la exposición “La Ciudad Prohibida, China Imperial” en Chile. Además, el Conjunto Musical Nacional de Shanghai se presentó en Guatemala, Antigua y Barbuda, Venezuela y Trinidad y Tobago, donde exhibió la cultura china.

 

Precisamente, como indica la directora de Programación del Festival Internacional Cervantino de México, Marcela Diez, China se presentó ante los espectadores mexicanos a través de una amalgama de tradición y modernidad, lo que no solo permitió conocer su larga historia, sino que también logró presentar una China moderna a las nuevas generaciones.

 

Intercambio entre diferentes culturas

 

Los intercambios académicos y culturales fueron una parte importante del Año de Intercambio Cultural China-América Latina y el Caribe. Además de las exposiciones y representaciones, en cooperación con los Gobiernos, entidades competentes e instituciones académicas de muchos países latinoamericanos, se organizaron foros, conferencias, seminarios, talleres y concursos de traducción.

 

Las visitas mutuas entre think tanks, jóvenes, artistas invitados y protectores del patrimonio cultural inmaterial también fueron claves este año. El 3, 4 y 6 de septiembre, Wang Fujian, profesor del Conservatorio Central de China, realizó tres conferencias en el Centro Cultural Palacio La Moneda. Se trató de la primera actividad en América Latina organizada por la Sala de Conferencias sobre la Cultura China. Wang explicó la relación de la música clásica china con la armonía entre el ser humano y la naturaleza.

 

Además, el Ministerio de Cultura de China lanzó el “Proyecto de traducción mutua de las obras clásicas sobre la ideología y cultura de China y América Latina”, que estará dedicado a la traducción y edición de las obras literarias más representativas de ambas partes, así como de la formación de traductores profesionales, con el fin de promover los intercambios académicos y culturales, fomentar el aprendizaje mutuo e impulsar el interés por compartir las diferentes culturas.

 

En materia de comercio cultural, China participó por primera vez en la II Feria del Mercado de Industrias Culturales del Sur (MICSUR), celebrada en Bogotá (Colombia), donde tuvo negociaciones con 400 compradores y 700 proveedores de todo el mundo, y organizó el evento “La noche de China”.

 

Zhang Yu, presidente y gerente general de China Arts and Entertainment Group, el principal patrocinador del Año de Intercambio Cultural China-América Latina y el Caribe, sostiene que los intercambios culturales entre las dos partes fueron por mucho tiempo muy superficiales. Sin embargo, la celebración del Año de Intercambio Cultural no solo ha ayudado a generar intercambios más amplios, específicos y cercanos, sino que ha logrado también un mayor alcance a través de los principales canales de difusión.

 

El embajador de Uruguay en China, Fernando Lugris, concluye que el Año de Intercambio Cultural China-América Latina y el Caribe no solo promovió los intercambios culturales, sino que sirvió además como un espacio para que los pueblos de ambas partes materializaran sus sueños. A través de su gran diversidad cultural, China y América Latina vienen colaborando también en la construcción de un mundo seguro, equitativo y justo.

 

25 de septiembre de 2016. Noche de La Habana, una representación para el Año de Intercambio Cultural China-América Latina y el Caribe, realizada en el Gran Teatro de La Habana, Cuba. Cnsphoto

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