“No hemos venido a hablar de minería”
EL director de Proinversión Perú, Carlos A. Herrera, visitó Beijing para promover proyectos de carreteras, generación eléctrica y nuevas líneas de metro en Perú. En una entrevista con China Hoy comentó que su objetivo es diversificar el destino de las inversiones chinas en el país inca que hoy se concentran, principalmente, en el sector minero.

Carlos A. Herrera concedió una entrevista a China Hoy. Rafael Valdez
China Hoy (CH): ¿Cuál es el objetivo de su visita a Beijing?
Carlos A. Herrera (CA): Sentimos la necesidad de que el inversionista chino conozca cómo funciona el mercado peruano, un mercado distinto al ecuatoriano, venezolano, colombiano, etc. Si estamos hablando de inversiones, no solo de venta de productos, la clave es generar confianza. Y, ¿cómo generas confianza? Haciendo que el inversionista conozca tu realidad. Perú es distinto por las propias características de su sociedad, de la idiosincrasia del peruano, pero también por sus políticas económicas. Es un país que se abrió al mundo en los años 90 y que ha sabido mantener una línea económica que es independiente de los vaivenes políticos. La apertura a la inversión extranjera se ha consolidado con los Tratados de Libre Comercio y lo que estamos tratando de hacer es que se abra por completo el abanico de fuentes de inversión hacia el Perú. Si vemos la estructura de la inversión de capital hace 20 años, Estados Unidos cubría el 40 % de las inversiones. Hoy día, la situación es totalmente distinta. Estados Unidos ya no es el principal inversionista, los inversionistas vienen de Europa, de Latinoamérica y lo que quisiéramos es que también haya participación importante de inversionistas asiáticos. Los chinos están invirtiendo en el Perú, pero lo están haciendo principalmente en minería. Es importante enseñarles qué otras oportunidades de inversión hay, por eso estamos acá. No hemos venido a hablar de minería.
CH: Entonces la meta es diversificar la oferta…
CA: Así es. Nuestra mayor necesidad en este momento es la inversión en infraestructura. Y como el capital privado nacional no es suficiente y, además, no tiene la experiencia tecnológica que se necesita, entonces invitamos al capital extranjero a participar en estos procesos. Nos referimos a carreteras, puertos, aeropuertos, telecomunicaciones, energía, ferrovía, etc. Estamos promoviendo dos tramos de la carretera longitudinal de la Sierra del Perú, un tramo de la carretera Panamericana, estamos promoviendo dos líneas del sistema de metro de Lima (la línea 3 y la 4), tenemos varias líneas de transmisión eléctrica. Además, tenemos un proyecto que consiste en la compra de energía, el Estado peruano va a salir a buscar generadores de energía hidráulica.
CH: En el mes de febrero, en Guangzhou, se realizó el Foro “Yendo a Latinoamérica” donde participaron autoridades y empresarios chinos junto a su contraparte latinoamericana. A los empresarios chinos se les preguntó cuáles son los tres mejores países para invertir en América Latina. Todos, sin excepción, mencionaron a Perú. ¿A qué acredita usted esa buena imagen?
CA: Yo diría que es, básicamente, el comportamiento económico peruano de los últimos 15 años, es decir, el buen manejo de la deuda pública, inflación, tasa de cambio, la política fiscal es muy sólida y esto va de la mano con una gran apertura a la inversión extranjera que se ha consolidado con cerca de una veintena de Tratados de Libre Comercio que permiten que el Perú sea una plataforma de exportaciones porque tenemos mercado abierto en una serie de países. Podemos decir que tenemos un mercado de 4000 millones de personas si sumamos la población de todos estos países, entonces cualquier inversionista de uno de esos países puede establecerse en el Perú y desde ahí expandirse.
En el Perú hay grandes oportunidades de inversión no solo en lo relacionado a materias primas, sino también a las propias carencias del país como, por ejemplo, en infraestructura. Entonces, si tenemos una brecha de 88.000 millones de dólares de inversión en infraestructura que tenemos que cubrir, esa es una oportunidad de inversión.
Respecto a lo que usted menciona, el hecho de que el Perú haya estado en la mente de los empresarios chinos puede deberse también a que es una economía más joven, con más posibilidades de expansión.
9 de abril de 2013. El presidente del Perú, Ollanta Humala, promueve proyectos de inversión en Shanghai. CFP
CH: Usted acaba de mencionar el Tratado de Libre Comercio entre China y el Perú que entró en vigencia en 2010. ¿Cómo evalúa sus resultados?
CA: No hay nada en materia de política económica que satisfaga a todos. En lo personal creo que ha sido una buena negociación. Tener la posibilidad de que el 90 % de los productos peruanos entren, de manera progresiva, con tratamiento preferencial al mercado más grande del mundo es un paso muy importante.
CH: Por otro lado, el Perú es parte de la Alianza del Pacífico junto a otros países latinoamericanos que apuestan por los Tratados de Libre Comercio. De hecho, China ya es un país observador. ¿Cómo ve esta unión?
CA: La Alianza del Pacífico es un mecanismo de integración económica cuya mayor fortaleza, probablemente, sea el consolidar una visión económica del desarrollo. Somos los cuatros países que más o menos hemos adoptado la misma línea de comportamiento económico. El solo hecho de que los cuatro logremos desarrollar mecanismos de cooperación económica es bastante interesante, sin que esto quiera decir que, necesariamente, se deba pretender desarrollar políticas comunes porque, al final de cuentas, siempre van a haber intereses particulares.
Por otro lado, este esfuerzo de cooperación económica va a llevar a una interrelación de los capitales entre las economías. Creo que habrá un mayor flujo y eso servirá para compenetrar nuestras economías. Esto es importante porque servirá para que cuando los inversionistas chinos volteen a mirar a Latinoamérica, encontrarán allí un bloque sólido.
CH: ¿Considera factible que Latinoamérica forme un bloque homogéneo tomando en cuenta las diferencias?
CA: No. Latinoamérica es grande y hay países que, por las propias características de su mercado, marchan solos.