MAS de 1700 de los mejores expertos del mundo en inteligencia artificial (AI, sigla en inglés) se reunieron en Nueva York en julio pasado durante la Conferencia Internacional Conjunta de Inteligencia Artificial (IJCAI-16, siglas en inglés), el evento más importante del sector. Entre los oradores se distinguió el rostro chino de Zhu Pinpin, fundador y presidente de la empresa Xiaoi. Compartió sus experiencias y opiniones sobre el desarrollo global de la “economía de la robótica” y el statu quo de su empresa.

Zhu y su equipo convirtieron a Xiaoi en el mayor proveedor y la mejor plataforma en chino de robots inteligentes del mundo, desarrollando soluciones orientadas a servicios inteligentes en marketing, bases de datos y robots reales. Las aplicaron con éxito en sectores como las telecomunicaciones, finanzas, aviación, automóviles, administración electrónica, comercio electrónico, casas inteligentes, entre otros.

La historia de Xiaoi

En 2004, el robot Xiaoi apareció por primera vez en MSN. “Mucha gente conversó apasionadamente con Xiaoi y de esta forma, atrajo rápidamente a muchos usuarios”, recuerda Zhu. En aquel momento, los usuarios significaban dinero.

En ese justo momento se preguntó: ¿cómo obtener valor comercial mediante la charla?

Con esa intención desarrollaron robots con funciones específicas, como la consulta del pronóstico del tiempo y la observación del mercado de acciones. En 2006 trataron de agregarles conocimientos para utilizarlos como ayudantes virtuales de los clientes.

Este tipo de robots tiene ventajas obvias. En muchas compañías existen departamentos que se encargan de contestar las llamadas de los clientes. Además de la constante subida del costo de mano de obra, la empresa también enfrentó problemas porque el trabajo es aburrido y el personal de este departamento abandonaba su puesto con frecuencia.

Zhu defiende que el 80 % del problema puede resolverse con robots. “Para contestar las llamadas de consultas o trámites, que son respuestas muy repetidas, se pueden utilizar robots. Y los trabajadores se concentran en demandas individuales”, explica.

Sin embargo, no es fácil popularizar una buena idea. Como la mayoría de las empresas grandes del país introdujeron el sistema de servicios telefónicos en 2000, no se apresuraron a bajar el costo. “La innovación no es tan simple como dicen. El proceso siempre es observado por los demás, depende de las expectativas de otros”.

Por eso, Zhu Pinpin agradece hasta hoy a la sucursal de China Mobile en Jiangsu, el primer cliente de Xiaoi. Fue la primera en aplicar robots para los servicios al cliente en su sitio web, y luego para SMS. “Gracias a la incorporación de robots bajó el costo de mano de obra en alrededor de 2 millones de yuanes, y los nuevos negocios crearon más de 2 millones de ingresos”.

Los robots Xiaoi se volvieron famosos en poco tiempo. Las compañías que tienen grandes necesidades en cuanto al servicio al cliente solicitaron la asistencia de dicha compañía. Los “hermanos” de Xiaoi han aparecido ya en la vida diaria de la gente. Por ejemplo, en la cuenta de China Merchants Bank en WeChat, en su aplicación para celulares y en sus oficinas, los robots Xiaoi cubren casi todos los servicios. Según estadísticas del Banco de Construcción de China, el uso de robots les ahorra 6000 empleados, y para el Banco de Comunicaciones, disminuyó los costos en más de 10 millones de yuanes en solo un mes de 2014.

Xiaoi ha ofrecido servicios a más de 500 millones de personas en el mundo y se ha convertido en una de las empresas de inteligencia artificial más avanzadas del mundo, una fuerza importante para impulsar la “economía de la robótica”. Xiaoi ocupa, por lo menos, el 70 % del mercado interno.

El gran futuro de la inteligencia artificial

En la IJCAI-16 de Nueva York, los expertos llegaron a un acuerdo: el tercer boom de inteligencia artificial que el mundo está experimentando no es una simple repetición de los últimos dos, sino una transformación radical. Zhu se adelantó a esa conclusión: “Primero, la aplicación de la computación en la nube y los macrodatos aumentan la capacidad de cálculo y permiten obtener mejores informes. Segundo, la puesta en práctica de varios proyectos garantiza un gran valor comercial. Tercero, a diferencia de las últimas dos veces, el sector tiene una actitud más racional”.

Para la inteligencia artificial, la actitud racional ejerce un papel muy importante. La AI fue planteada en la Conferencia de Dartmouth en 1956, cuando se consideraba que la capacidad de cálculo de la computación era mucho mejor que la del ser humano. Sin embargo, es indudable que cuando se ha intentado dejar a la máquina simular el pensamiento humano, la solución definitiva no se ha encontrado.

Para Zhu, el modo de pensar humano no es puramente una serie de razonamientos. Muchas veces se relaciona con conocimientos, sentido común y experiencias. Alrededor de 1970 perdió fuerza la inteligencia artificial porque distaba mucho de las expectativas de la gente. Gracias al surgimiento de la inteligencia artificial orientada hacia el razonamiento lógico, el fervor renació. “Japón invirtió grandes recursos en aquel entonces, pero el desarrollo de la AI una vez más no cumplió las expectativas. Cuando los estudios no se comercializan, el fervor por las inversiones disminuye”.

Volvió a estar de moda cuando AlphaGo venció a su rival humano en weiqi (ajedrez chino), lo que aumentó la confianza en los robots. La gente empieza a tener conciencia de que no se conoce bien a sí misma. “Aunque el robot puede procesar una gran cantidad de datos, su coeficiente de inteligencia no puede compararse con el humano. Como máximo podría ganar el campeonato en una disciplina”, explica Zhu.

Cuando la gente tiene conciencia de que la AI no tiene cerebro, deja de compararla con la sabiduría humana y de exigir al robot hacer todo lo que puede el ser humano. El androide se concentra en resolver todo tipo de problemas. Esa es la dirección correcta. En ese sentido, el camino de la AI se ampliará cada día más.

La próxima estación

En la sala de exposiciones de la compañía se muestran robots Xiaoi que se utilizan ampliamente en servicios a los clientes, casas inteligentes, conductores inteligentes, entre otros, así como el modelo que saludó al primer ministro Li Keqiang en la Cumbre de la Industria de Macrodatos 2016.

Este primer robot trabaja en el banco como un encargado experimentado, quien se comunica con los clientes, les ayuda a obtener el número de espera y les presenta diferentes servicios. Igualmente garantiza consultar en un segundo el saldo de su cuenta mediante el carné de identidad y el sistema de reconocimiento de rostros.

Experimentar sensaciones, moverse y pensar constituyen los tres elementos fundamentales para ser un robot. Existen un montón de problemas a resolver en términos de movimiento, por ejemplo, el auto-equilibrio de la cinemática; en términos de sensación, la capacidad de reconocer la voz, el rostro y las imágenes. Sin embargo, pensar es la parte más importante, y podría ser considerada como la inteligencia cognitiva, también el principal foco de investigación de Xiaoi.

“Lo que tenemos que hacer es añadir ‘cerebro’ en el hardware de los robots. Para explicarlo mejor, el núcleo de pensamiento es el conocimiento, que es compatible con el pensamiento y constituye la mayor diferencia entre el hombre y los animales. La humanidad es capaz de crear nuevos conocimientos y transmitirlos de generación en generación. Esto significa que nuestros descendientes no necesitarán obtener nuevos conocimientos a través de la práctica, solo con la educación. Naturalmente, gracias al aumento de los conocimientos, nuestra capacidad de pensamiento se hace más fuerte y nos volvemos más inteligentes”, destaca Zhu.

¿Se puede decir que los robots, técnicamente, ya pueden llevar a cabo todo el trabajo sencillo y repetible en la vida diaria? “Es posible que un brazo robótico haga todo el trabajo en una cadena de montaje, pero le es imposible servir la mesa de un restaurante. Aunque parece sencillo, implica el movimiento espacial y esto hace que sea más complicado que operar instrumentos precisos”, explica.

A nivel internacional, los robots se dividen en virtuales y reales. La tecnología clave de Xiaoi es la comprensión del lenguaje natural, que está motivado por el repositorio de conocimientos. Vale la pena mencionar que todas las tecnologías de Xiaoi en este aspecto son de producción propia.

Las estrategias nacionales e internacionales para la AI son las mismas. En comparación con las mejores compañías del mundo, las chinas se encuentran todavía en una primera fase de tecnologías clave. Sin embargo, en algunos campos especializados, algunas tienen un desempeño extraordinario porque están al mismo nivel que las mejores del mundo. Xiaoi, centrada en el procesamiento del lenguaje natural, y Deep Glint, dedicada a la visión por computador, son dos ejemplos de ello.

Según Zhu, quién ha apostado por esta empresa antes de graduarse en la universidad, Xiaoi ha encontrado altibajos en su largo camino y nuevos retos surgen periódicamente. Pero ha persistido hasta hoy. El año 2009 fue la etapa más difícil, cuando tuvo que pagar los salarios de los empleados con un préstamo privado.

También ese año fue un período difícil de transición con los clientes individuales y los corporativos. Zhu, un desarrollador de tecnologías se transformó en un ejecutivo que sabe tratar con sus clientes potenciales, lo que ha garantizado el desarrollo global de su compañía.

“Los inversores pensaron que eran demasiado lentos los servicios de la compañía, por lo que nuestra cadena financiera estuvo en crisis por algún tiempo”, dice Zhu. Durante ese período difícil solo 50 empleados se quedaron, pero hoy en día el número ha aumentado a 500.

“Retrospectivamente hablando, nos hemos dado cuenta de que la innovación debe ser un proyecto sistemático. No es solamente una idea o una investigación tecnológica, también influye en los servicios a los clientes y en las operaciones comerciales”, reconoce el líder de Xiaoi. Para una eficaz innovación la edad de las personas es de vital importancia. Zhu opina que está basada principalmente en los jóvenes, por lo que las personas responsables de los productos deben de tener entre 20 y 30 años de edad.

En el contexto de una globalización económica, las tecnologías de reconocimiento y comprensión semántica multilingüe se están volviendo una tendencia inevitable. La amplia difusión de los robots Xiaoi le ha permitido obtener ventajas en la comprensión semántica del chino. Zhu asegura que van a desarrollar activamente esa tecnología en varios idiomas en el futuro para sentar las bases del ingreso de sus productos en el mercado mundial.