La nueva “tarjeta de visita” del país
EL descubrimiento de la artemisinina, un regalo de China al mundo que ha salvado la vida de millones de pacientes de malaria en todo el planeta, le ha valido a la farmacóloga china Tu Youyou el Premio Nobel de Medicina y Fisiología 2015, lo que supone un reconocimiento de la comunidad internacional a la medicina tradicional china.
Actualmente, la medicina tradicional china se divulga en más de 160 países y regiones del mundo, 29 de los cuales han definido claramente su estatus legal, especialmente el de la acupuntura, mientras que 18 de ellos la han incluido en la cobertura de los seguros médicos. Después del tren de alta velocidad, la energía nuclear y las líneas de Extra Alta Tensión, es de esperar que la medicina tradicional china sea la nueva tarjeta de visita del país en el escenario internacional.
Trabajadores de una farmacia de medicina tradicional china elaboran medicamentos.
Una medicina con una larga historia
La medicina tradicional china es un tesoro nacional con más de 5000 años de historia. La eficacia de sus terapias, como la acupuntura, la ventosaterapia (tratamiento con ventosas chinas de cristal) y las infusiones, está muy arraigada en la mente de los chinos, especialmente para tratar enfermedades crónicas.
La teoría de la medicina tradicional china se originó del resumen de la práctica, a través de la cual no ha dejado de desarrollarse y enriquecerse. La obra más antigua existente de la medicina china, el Huang Di Nei Jing, salió a la luz hace más de 2000 años, y en ella se resumen las experiencias de tratamiento y las teorías médicas que ya existían entonces. También se describe de manera integral la anatomía y fisiología del cuerpo humano, además de sus patologías y los métodos de diagnóstico, tratamiento y prevención de enfermedades, asentando así la base inicial de toda la teoría de la medicina tradicional china.
“La medicina tradicional es el legado de la milenaria sabiduría de China, y no solo puede tratar enfermedades crónicas, sino que también nos aconseja un modo de vida más sano. Con el creciente porcentaje de males crónicos no transmisibles en el espectro de enfermedades, tanto en China como en el resto del mundo aumenta la importancia del papel de la prevención y del cuidado de la salud”, dijo Bernhard Schwartländer, representante de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en China.
La medicina tradicional china basa siempre sus diagnósticos en la experiencia y la intuición, y detecta y trata las enfermedades como un todo inseparable de los hábitos de vida. “Un médico occidental considera primero si se trata de una enfermedad funcional u orgánica y, mediante el examen, localiza con precisión el foco de la enfermedad y trata de averiguar de manera microscópica el patógeno. Un médico tradicional chino analiza primero el síntoma del paciente, y en relación con su experiencia de vida, determina el origen de la enfermedad, por ejemplo, en una dieta inadecuada, en la falta de armonía en los siete factores emocionales (alegría, temor, amor, indignación, melancolía, deseo y odio), en la fatiga excesiva o en un cambio de estación, y realiza la recuperación en su conjunto en el paciente”, explicó Chen Zhu, vicepresidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional y miembro de la Academia China de Ciencias.
La acupuntura fue una de las primeras terapias de la medicina china adoptadas en el extranjero.
Fiebre por la acupuntura
La acupuntura y la moxibustión, como primeras terapias de la medicina china adoptadas en el extranjero, se han convertido en un importante componente de la medicina mundial y están ganando cada vez más aceptación. Según Liu Baoyan, director del Comité de Trabajo de Estandarización de la Federación Mundial de Sociedades de Acupuntura-Moxibustión (WFAS, por sus siglas en inglés), “varias decenas de países han legalizado la acupuntura y moxibustión, y muchos han establecido sistemas de capacitación. La acupuntura y moxibustión están saliendo de las clínicas privadas y entrando en instituciones de investigación científica”. De hecho, en 2010, la acupuntura y moxibustión fueron incluidas oficialmente en la lista de patrimonio cultural inmaterial del mundo.
Gracias a su alta eficacia y bajo coste, y a la ausencia de efectos secundarios, la acupuntura y moxibustión son las terapias de la medicina tradicional china que tienen mejor acogida en Occidente. En 1972, cuando el presidente estadounidense Richard Nixon visitó China, un periodista de The New York Times que viajaba con la comitiva contrajo apendicitis. La medicina occidental lo hubiese sometido a una operación quirúrgica, pero los médicos de Beijing apostaron por una terapia conservadora con la tradicional acupuntura y el periodista se recuperó sin pasar por el quirófano. Tras regresar a EE. UU., el periodista publicó un largo reportaje en The New York Times sobre la acupuntura china, lo que despertó el interés del público y desencadenó rápidamente una fiebre por la acupuntura.
En la actualidad, 40 de los 50 estados de EE. UU. expiden licencias de acupunturista y la terapia está incluyéndose gradualmente en la cobertura del seguro de salud. Hay centenares de institutos de acupuntura que imparten cursos de capacitación de tres o cuatro años, homologados para conceder licenciaturas o maestrías.
Andre, miembro alemán de la Comisión Ejecutiva de la Federación Mundial de Sociedades de Acupuntura-Moxibustión, manifestó que, en la actualidad, lo que necesitan los países occidentales es una prueba científica de la eficacia de la acupuntura y moxibustión, y la normalización es un paso importante.
En 2014, China promulgó la norma ISO 17218: 2014 uso de agujas estériles desechables, la primera normativa internacional en el terreno de la medicina tradicional.
“Para los países occidentales, las normas recién establecidas son una garantía básica y promoverán la aplicación de la legislación, lo que supondrá un mayor desarrollo de la acupuntura. Sin garantías jurídicas es difícil tomar posición en una industria médica de competencia tan intensa”, añadió Andre.
Actualmente, según Andre, entre los 85 millones de personas en Alemania hay entre 50.000 y 60.000 acupunturistas, y algunas dolencias, como el dolor de espalda, o algunos trastornos ginecológicos se han incorporado al sistema público de salud.
El masaje es otra terapia de la medicina tradicional china.
La internacionalización
Como fuente de la medicina tradicional, China tiene más de 10.000 ingredientes para más de 4000 preparados. Sin embargo, la cuota del país en el mercado mundial es de solo el 3 %. Paradójicamente, los principales importadores de la medicina tradicional china son los países vecinos, como Japón y Singapur.
“La teoría de la medicina tradicional china es oscura, lo que afecta en gran medida a su internacionalización”, manifestó Liu Minru, profesora de la Universidad de Medicina Tradicional China de Chengdu. Sin embargo, “su protección y promoción por parte del Gobierno es la base de la internacionalización de la medicina tradicional china. Ahora, especialmente, tenemos una inmejorable ocasión”, expresó Liu.
El presidente chino, Xi Jinping, ha enfatizado en reiteradas ocasiones la importancia de la medicina china en el intercambio y cooperación cultural internacional. En 2015, el Gobierno lanzó sucesivamente la Visión y acciones sobre la construcción conjunta de la Franja Económica de la Ruta de la Seda y la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI, y la Planificación de desarrollo de los servicios de salud de la medicina tradicional china (2015-2020), y en ambas se menciona la promoción de la internacionalización de la medicina tradicional china por medio de la estrategia de “Una Franja y Una Ruta”.
Los países y regiones a lo largo de la Franja Económica de la Ruta de la Seda y la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI han venido haciendo uso históricamente de la medicina tradicional, de la que aprecian su valor en el mantenimiento de la salud, lo que constituye un importante fundamento para explotar su exportación.
Hasta finales de 2014, la Administración Estatal de la Medicina Tradicional China había firmado 83 tratados de cooperación con otros países, casi todos distribuidos a lo largo de la Franja y la Ruta. Las estadísticas demuestran que se trata de países de importancia capital para la exportación de la medicina tradicional por parte de China, ya que en 2014 adquirieron un 54 % del volumen de las exportaciones por un valor de 1940 millones de dólares.