Entrevista con el diplomático y empresario mexicano Efrén Calvo Adame
Los inversionistas extranjeros están muy interesados en conocer los sectores que se verán beneficiados por el XII Plan Quinquenal (2011-2015) que el Gobierno chino acaba de presentar. “Indudablemente, hay grandes oportunidades”, dice Efrén Calvo Adame, destacado diplomático y hombre de negocios mexicano, quien llegó a China en 2007. Bajo su punto de vista, los planes quinquenales del Gobierno chino han logrado un desarrollo sostenido durante los últimos treinta años: “Ofrecen garantías y continuidad”, afirma Calvo, quien opina que es precisamente este factor el que anima a las empresas extranjeras, como la suya, a venir a China.
Comprendiendo el carácter chino
Efrén Calvo mantiene relaciones con más de 20 empresas chinas, unas estatales, otras privadas. “Hemos venido de manera formal y seria a dialogar con los inversionistas y las empresas chinas, tanto públicas como privadas. Y hemos logrado avances”. El empresario mexicano cuenta con orgullo que su empresa es prácticamente la primera que ha invertido, con sus propios recursos, en los campos de las telecomunicaciones, minería y alimentación en China.
La familia Calvo, que componen Efrén Calvo y su esposa, Patricia Guzman, sus dos hijas, y una perrita llamada Chiquita, se estableció en China en abril de 2007. Patricia, que así se llama también la mayor de las dos hijas, llevaba ya 13 años en China, y fue ella quien trasmitió a sus padres el interés por trasladarse a Asia. La hija menor, Valeria, ya estudia en Beijing.
A la familia le gusta la capital, aunque viaja de vez en cuando. “Viajar nos permite conocer el pensamiento y la cultura de los chinos y, sobre todo, establecer vínculos de cercanía. Siempre visitamos a los empresarios chinos, para conocerlos mejor”. Tras cuatro años de tratar con hombres de negocios chinos, Calvo va comprendiendo cada vez mejor su carácter: “Lo que hemos visto es que los chinos vienen normalmente con nosotros a México, porque quieren hacer negocios directos, aunque les hayamos dicho que somos productores”. Pero no le importa; Calvo siempre establece relaciones de confianza mutua y luego los invita a México a conocer a otros socios del país azteca.
Más flexibilidad, es lo que exige Calvo en la actualidad: “Nuestra sugerencia es que el Gobierno chino identifique a empresas extranjeras serias y formales, ya sean grandes, medianas o pequeñas. En ese momento, podemos ofrecernos directamente, bajo instituciones y leyes con flexibilidad”.
Bimbo, una empresa con gran éxito en China, es un buen modelo. “Bimbo ha traído a China un equipo directivo desde México y ha importado sus marcas, su tecnología, y sus propios productos a China, y el mercado chino ya reconoce la marca. Va muy bien, y esperamos que vaya mejor”.
Descubriendo las oportunidades
Según el XII Plan Quinquenal, se van a presentar oportunidades en varios sectores de consumo, como alimentación, venta al por menor, productos farmacéuticos, electrodomésticos y otros. Al mismo tiempo, la transferencia industrial va a multiplicar las oportunidades de inversión en infraestructura, materiales de construcción, maquinaria y equipo, y transporte y comunicaciones, en distintas regiones del país. Además, van a surgir oportunidades también en diversas industrias emergentes estratégicas.
En el caso de Calvo, “por un lado, ahora estamos orientando todas nuestras energías al campo minero, para vender directo a China. Por otro lado, con la subida del consumo interno, también nos enfocamos a la carne de porcino”. En este sentido, está a la espera de la autorización final del Gobierno chino para la venta de carne mexicana. “Además, las nuevas energías son un campo en el que queremos entrar y también veo algunas buenas posibilidades en el sector del petróleo y sus derivados”. México es el quinto productor mundial de petróleo, dice Calvo, y dispone de una larga lista de productos que pueden elaborar con tecnología propia en el sector petroquímico. “La parte minera es una parte muy importante, pero hay que gestionarla con mucho cuidado, porque es muy sensible”.
Según Calvo, además del sector químico y petroquímico, México cuenta con tecnología aeronáutica avanzada y en los últimos 20 años ha comenzado a producir no sólo para las grandes empresas aeronáuticas, sino también componentes, como turbinas y cables, que pueden vender en China.
El año pasado, la empresa de Calvo fue responsable del 30% de las exportaciones mineras de México a China. “Este año, queremos duplicar el volumen, porque hay un consumo muy importante”.
Reducir los desequilibrios
Patricia, la hija de Efrén Calvo, es fotógrafa, pintora y escultora y fue la presidenta de la Asociación de Pintura Latinoamericana hace 5 años. Su punto de vista simboliza las ideas de las nuevas generaciones: “México es un país con mucho para ofrecer, incluyendo la cultura mexicana”.
“La balanza del comercio bilateral está desequilibrada, y nos esforzamos por establecer proyectos conjuntos con empresas chinas serias que se comprometen a pagar precios justos. Lo bueno es que la subida del tipo de cambio del renminbi alentará a los chinos a viajar e invertir en los países latinoamericanos”, explica la jóven.
En el XII Plan Quinquenal, por primera vez se plantea el objetivo de reforzar la influencia cultural China. En las industrias culturales, China y América Latina tienen un gran potencial de cooperación. “En México tenemos una de las mejores industrias cinematográficas, con buenos productos a nivel internacional. Además, México es el primer país del mundo en oferta de servicios turísticos”, afirma Patricia.
“La familia china está muy integrada, y la mexicana, también. Tenemos mucho en común”, concluye, optimista, Calvo.