El Oeste, nuevo motor del crecimiento económico chino
Mejora del entorno medioambiental
Cuando, en la segunda mitad de los años 90 del siglo pasado, las tormentas de arena empezaron a llegar a Beijing, se hizo evidente para gran parte de la población la gravedad de los problemas medioambientales, que afectan al desarrollo económico y a su vida cotidiana. Y en el origen, se halla el continuo deterioro ecológico del Oeste. El Gobierno chino, consciente de la urgencia de resolver estos problemas, lleva poniendo en marcha desde el año 2000 una serie de proyectos ecológico prioritarios en el Oeste, como la devolución de tierras de cultivo a los bosques y de tierras de pastoreo a los prados, la protección de los bosques naturales, el control de los focos de tormentas de arena en torno a Beijing y Tianjin, etc. Desde ese momento, quedó prohibida la tala de bosques naturales en el Oeste de China, acelerándose al mismo tiempo la forestación.
En los últimos 10 años, China ha llevado a cabo la repoblación forestal de 30,65 millones de hectáreas en las regiones occidentales, invirtiendo 217.220 millones de yuanes en proyectos de protección ecológica.
Según datos del Departamento para el Desarrollo del Oeste de la CNDR, en los últimos diez años la cobertura forestal aumentó en 6,73% y el volumen de bosque se incrementó en casi 1.300 millones de m3. Este aumento de la vegetación ha frenado las pérdidas de agua y suelo y la desertización de tierras y ha mejorado el medio ambiente y las condiciones de vida de los agricultores.
En las regiones con graves problemas de desertización, Mongolia Interior, Shaanxi, Gansu y Ningxia, se ha disminuido la superficie de desierto en 7.921 km2 respecto al año 1999. En Sichuan, gracias al proyecto de devolución de tierras de cultivo a los bosques, se ha evitado, en los últimos diez años, la erosión de 320 millones de toneladas de suelo y la pérdida de 28.800 millones de toneladas de agua y se ha rebajado significativamente la afluencia anual de sedimentos de los ríos tributarios del Yangtsé.
China va a seguir reforzando las acciones para mejorar el medio ambiente. Según la CNDR, la inversión estatal en el Oeste se asignará principalmente a la construcción de infraestructura, medio ambiente, educación y ciencia. Se prevé que en un periodo de cinco a diez años se logren avances cruciales en estos campos.
En la actualidad, la superficie que sufre la erosión de la tierra en China llega aún a los 3,56 millones de km2 y la erosión anual del terreno es de 4.500 millones de toneladas, lo que equivale a la pérdida de casi un millón de mu (15 mu=una hectárea) de tierras cultivables.
