Creatividad en los dedos
Gao Xiaolan talla un molde de goma.
Por WANG WENJIE
Cuando elogiamos un trabajo manual decimos que este es “muy vivo”, pero las plantas suculentas de arcilla polimérica, hechas a mano por la talentosa joven Gao Xiaolan, van ganando cada vez la admiración de más personas. En Internet, muchos cibernautas han escrito comentarios muy positivos sobre sus obras. “Son excelentes. No puedo creer que hayan sido hechas de arcilla polimérica”. “Son tan bonitas que no sé cómo describirlas”. “Ponlas en el jardín y nadie podrá discernir entre lo verdadero y lo falso”, son algunos de los mensajes.
Estos últimos años, ya sea en su pueblo natal de Panjin (provincia de Liaoning) como en Beijing, Gao Xiaolan no ha dejado de perseguir la creatividad. Al principio, se dedicaba al trabajo manual a tiempo parcial, pero luego decidió emprender su propio negocio. De este modo, Gao viene haciendo realidad su sueño artístico, mientras mantiene una vida autosuficiente e independiente.
Interés y talento
Mucha gente cree que Gao empezó a aprender este arte en la niñez. En realidad, nunca recibió clases. Su interés por el arte le llevó al camino de la creación. “Desde que era niña me gustaron las bellas artes y solía hacer trabajos manuales con los materiales a mi alcance. Pero mi familia no tenía los recursos económicos para enviarme a cursillos de arte. Por eso, mi formación ha sido autodidacta”, menciona con una sonrisa. “Dicen que tengo talento. Es posible. Mi padre aprendió la pintura tradicional china y yo posiblemente heredé algunos de sus genes artísticos”.
Gao ejerció dos años como profesora de educación preescolar. Decidió renunciar en 2011. “No pensaba emprender un negocio propio, sino descansar un tiempo hasta tener un plan claro”, dice con franqueza. “He sido muy afortunada al haber cogido el tren del periodismo ciudadano. Internet me ayudó a forjar mi identidad de artesana autónoma”.
“En aquel momento, Weibo (una plataforma china de microblogging) recién surgía. Así que publicaba frecuentemente mis obras en Weibo y me gustaba interactuar con mis seguidores”, recuerda Gao. “Por un tiempo me fascinó grabar sellos de goma. Luego de colocar las fotos en Internet, mucha gente me preguntó el precio o si hacía pedidos por encargo. En aquel preciso momento, mi afición empezó a generarme ciertos ingresos. No muchos, pero bastaban para deleitarme”. Gao es de las personas que buscan la perfección de la obra, sea difícil o fácil de realizar. Sus sellos de goma tienen líneas refinadas y un preciso matiz de colores, que impresionan a los internautas.
Darle alma a la obra
Antes de usar la arcilla polimérica, Gao comenzó probando la arcilla superligera (super-light clay) en sus trabajos. Después de comparar los dos materiales, le pareció que la arcilla polimérica era ideal para modelar los detalles y empezó a usarla en la elaboración de pequeños objetos. En 2013, un amigo le regaló dos plantas suculentas. Sus exquisitas hojas fueron una inspiración para ella: quiso reproducir esa translúcida textura con la arcilla polimérica. Así empezó a poner a prueba su idea.
La arcilla polimérica se parece mucho a la plastilina, desde su apariencia hasta su manera de modelar. Su inventora, una mujer alemana, vendió la fórmula a una compañía y así nació la primera marca de arcilla polimérica. Debido a su buena extensibilidad y plasticidad, este material gozó muy pronto de gran popularidad. La arcilla polimérica sigue siendo hoy el material favorito para muchos aficionados a los trabajos manuales.
Hace unos años, cuando las plantas suculentas se pusieron de moda, nadie había intentado modelarlas con arcilla polimérica. Por eso, las obras de Gao impresionaron a los cibernautas. “Al comenzar a modelar plantas suculentas, el número de mis seguidores en Weibo fue creciendo gradualmente. Más tarde traté de modelar algunas figuras de obras de animación. Por ejemplo, en una ocasión fabriqué a Toothless, un personaje de la película de animación Cómo estrenar a tu dragón (How to train your dragon). Al publicarlas, las fotos fueron muy comentadas y reenviadas por mucha gente. Así gané más seguidores. El año pasado elaboré a Baymax, de Big Hero 6, que también tuvo una muy buena acogida”.
Cuando se le pregunta a Gao Xiaolan cómo puede reproducir tan vivamente la imagen y los colores, ella revela que, además de la destreza, el “corazón” del creador es también muy importante. “Este corazón significa amor, inocencia, esmero y paciencia, que son factores imprescindibles en la creación”, explica. “El instinto del creador, así como su experiencia, su forma de ver el mundo y su actitud hacia la vida pueden verse reflejados en los detalles de su obra, todo lo cual le da un alma”.
Insistir en la innovación
En 2014, el negocio de Gao ya tenía cierta solidez. Para encontrar una plataforma mayor, Gao salió de su pueblo natal, Panjin, en el noreste de China, y llegó sola a Beijing.
En efecto, Gao se encontró con más oportunidades. “Un estudio me contactó por Weibo y me invitó a dar clases regulares de elaboración de plantas suculentas y obras de fieltro de lana. Algunas escuelas me invitaron a enseñarles a los niños cómo modelar objetos con arcilla polimérica y arcilla superligera. También recibo pedidos por encargo. El resto del tiempo lo dedico a hacer trabajos manuales”, señala. “Jamás he pensado aprovecharme de mi fama para incursionar en otras áreas. La creación me proporciona una gran satisfacción. Me siento muy afortunada de poder realizar trabajos manuales con tranquilidad”.
En cuanto a la competencia en su campo, menciona: “Además del perfeccionamiento constante de mis habilidades, insisto en la innovación, con el fin de crear más obras que les gusten a todos. Persisto también en actualizar mis conocimientos y ampliar mis horizontes, en lugar de conformarme con los logros actuales. El interés y la persistencia son importantes, pero las ideas creativas son mucho más necesarias”.
Gao va con frecuencia a otras ciudades a dictar clases. Algunas veces ella misma organiza cursillos y otras es convocada por estudios que buscan establecer lazos de cooperación. “El entusiasmo de los aficionados me conmueve mucho. El año pasado, cuando abrí un cursillo en Shanghai, me encontré con una chica que había viajado miles de kilómetros desde Guangxi. Y en el cursillo de Guangzhou de este año, ella volvió a estar presente”. Gao asegura que el tiempo que pasa con los aficionados es muy placentero. En las clases, ella enseña todo lo que sabe, sin reservas. En agosto de 2014 salió a la luz su libro de enseñanza sobre el modelado con arcilla polimérica, titulado Tao Chu Zhang Xin.
La meta final de Gao es volverse una diseñadora de prototipos de figuras de acción. “Este trabajo consiste en dividir un prototipo en partes, modificar los detalles y crear moldes de estas partes para fabricarlas en cantidad y, al final, ensamblarlas”. Ella explica: “Se trata de la producción en masa de una obra hecha a mano. Aún me falta mucho para alcanzar esta meta, porque se requiere de un aprendizaje en múltiples terrenos y muchas habilidades. Voy a seguir estudiando y esforzándome por hacer realidad este sueño”.
Figura de Toothless hecha con arcilla polimérica.
Plantas suculentas de arcilla polimérica moldeadas por Gao Xiaolan.