Xiaomi, el retador de Apple

10 de enero de 2014. Stephen Gary Wozniak (der.), cofundador de Apple, y Lei Jun, fundador de Xiaomi, en la Reunión Plenaria Anual de Xiaomi, celebrada en el Centro Nacional de Convenciones de Beijing. CFP

LEI Jun, fundador de Xiaomi, la compañía china fabricante de teléfonos inteligentes, que crece con mucha rapidez, no puede contener su admiración cuando habla de Steve Jobs.

“Cuando Steve Jobs estaba vivo, era el mejor”, dijo en una entrevista. “Nadie lo podía superar y nada podía superar al iPhone”. Sin embargo, en China no faltan los retadores de Apple ni de su desaparecido fundador.

Entre todos, Xiaomi es la más destacada. Desde el día de su fundación, estuvo destinada a ser un mirlo blanco. El 12 de julio de 2011, el equipo fundador de Xiaomi declaró que entraría en el mercado chino de telefonía móvil. Solo un mes después, el teléfono inteligente Mi-One se lanzó en el mercado y su precio de 1999 yuanes (aproximadamente unos 320 dólares) no llegaba ni a la mitad del que tenía el iPhone 4S en el mercado chino; por ello, debido a su disponibilidad y precio, Mi-One fue el celular inteligente más competitivo en el mercado.

En los siguientes meses, Mi-One se volvió la estrella más brillante en el mercado de telefonía móvil de China, e incluso del mundo. Luego de su lanzamiento oficial, a Xiaomi le tomó menos de un año vender más de un millón de celulares, una fantasía para la mayoría de fabricantes chinos de teléfonos móviles. Xiaomi ha anunciado que, en el primer semestre de 2013, vendió unos 7,03 millones de celulares inteligentes, muy cerca del volumen total de 7,19 millones de 2012.

La conferencia de presentación de Mi-Two, celebrada en agosto de 2012, nos recordó las típicas presentaciones de Apple durante la gestión de Jobs. En un club del Distrito Artístico 798 de Beijing, Lei Jun, vestido con camiseta negra, jeans y zapatos negros Converse, presentó la última generación de teléfonos Xiaomi: el Mi-Two.

Wei Wuhui, analista de industria tecnológica de la Universidad Jiao Tong de Shanghai, sostiene que la estrategia de marketing de Xiaomi ha dependido siempre de una “adoración a Apple”. “Numerosos consumidores chinos idolatran, al extremo, a la marca Apple, y Xiaomi está ofreciendo productos similares al mercado chino con un precio más bajo”.

Tanto sus seguidores como sus críticos llaman al teléfono móvil de Xiaomi, el “iPhone chino”. En una tienda de Beijing, un representante de ventas llamó a Xiaomi “el hermanito de Apple”, y los consumidores están dispuestos a aceptar tal imagen. Un estudiante universitario de Shanghai, que quería comprar un celular de Xiaomi, dijo: “Esta es una auténtica imitación”.

Apple abrió su primera tienda en China en 2008 y empezó a vender el iPhone en 2009. Según el informe de Kantar Worldpanel, publicado el 28 de noviembre pasado, en cuanto al volumen de ventas del año 2013, el mayor vendedor de teléfonos inteligentes en China es Samsung, mientras que Apple es el segundo, seguido por Xiaomi. Los tres representan el 60 % del mercado.

En los últimos 12 meses, Xiaomi casi ha duplicado su cuota de mercado, y la del tercer trimestre de 2013 subió del 6,6 %, registrado en el mismo periodo de 2012, al 12,7 %. El informe indica: “Xiaomi está luchando por el segundo lugar porque la cuota de mercado del tercer trimestre de Apple cayó del 24,7 % al 13,8 %”.

El papel de Lei Jun no pasa inadvertido en la relevancia adquirida por Xiaomi. Lei Jun fundó Kingsoft, la compañía de software más conocida de China, con más de 20 años de historia, y sigue siendo presidente de la junta directiva de dicha empresa. Ha sido también un inversionista exitoso en varias empresas innovadoras chinas. El sitio web de Joyo, en el que invirtió, fue durante algún tiempo el mayor minorista en línea de libros, música y películas, y fue vendido a Amazon en 75 millones de dólares, en 2004.

Lei Jun se declara un obsesionado de la telefonía móvil y tiene más de 60 celulares, incluyendo la primera versión de Motorola. En el año 2004, usó un celular Nokia y dio más de 1500 consejos sobre cómo mejorar las funciones de este teléfono a un amigo suyo que trabajaba para esta compañía. Sin embargo, al final, Nokia no hizo nada. Esta anécdota y la conciencia de que “el teléfono inteligente tiene el potencial de reemplazar a la computadora”, lo motivaron a fundar Xiaomi.

En cierto sentido, el rápido crecimiento en el volumen de ventas de los teléfonos Xiaomi se debe a su comprensión exacta de las necesidades de los usuarios, y no tanto al amplio mercado interno. Al respecto, otro de los fundadores de Xiaomi, Li Wanqiang, explicó: “El teléfono móvil de Xiaomi está ‘vivo’”. Su sistema operativo se actualiza una vez a la semana, e invita a la participación de los usuarios. A las 17:00 de cada viernes, Xiaomi presenta a los usuarios de todo el mundo la más reciente versión de su software. En pocas horas, miles de fans escriben en el foro de Xiaomi los bugs que encuentran y sus opiniones sobre la nueva versión. “Una empresa puede establecer un equipo de desarrollo de 300 personas como máximo, pero si lo extendemos a Internet, miles de personas nos ayudarán a desarrollar el producto. Creo que es una gran innovación de Xiaomi”, mencionó Li.

Por eso, mantener a los consumidores lo más cerca posible y hacer ajustes del producto según su feedback podrían ser las razones principales del crecimiento rápido de Xiaomi.

Xiong Xiaoge, socio fundador de IDG Capital Partners, manifestó en una entrevista: “Xiaomi va más allá de nuestra expectativas. Creo que otros inversores tienen la misma opinión. Basta ver los datos para sacar esta conclusión”.

La era de los teléfonos inteligentes ha derribado el concepto de desarrollo dependiente de las variaciones en los costos en el sector de la telefonía móvil. Solo los productos que satisfagan las demandas de los consumidores podrán ser valorados por el mercado, lo que se demuestra con el éxito de Xiaomi. Como en una carrera de larga distancia, la participación de Xiaomi recién se ha iniciado.