La singularidad del más reciente discurso global del presidente Xi Jinping, “Construir juntos la comunidad de vida entre los seres humanos y la naturaleza”, es su trasfondo basado en la demografía y geografía del país de mayor crecimiento económico en la historia humana, anclado en la civilización más antigua que ininterrumpidamente llega hasta hoy y en contacto continuado con la naturaleza.