El embajador de Chile en China, Luis Schmidt, junto a la réplica de un moái, una estatua monolítica de la Isla de Pascua. Wang Bowen
El embajador de Chile en China, Luis Schmidt Montes, destacó el objetivo del país asiático de alcanzar un desarrollo de calidad, en especial en lo concerniente a una preservación del medio ambiente y a una mejora de su estructura industrial y matriz energética.
Al analizar el Informe sobre la Labor del Gobierno, presentado el 5 de marzo por el primer ministro Li Keqiang ante la Asamblea Popular Nacional, Schmidt valoró positivamente que se haya hecho mención a los esfuerzos concretos que hará China para alcanzar su pico de emisiones de carbono en 2030 y la neutralidad de carbono en 2060.
“No es un objetivo fácil porque si bien China es el mayor fabricante de tecnología limpia y de tecnología fotovoltaica y eólica, alrededor de un 60% de su matriz energética sigue siendo carbón”, sostuvo Schmidt en diálogo con “China Hoy”. “Sin embargo, China ha seguido en el Acuerdo de París y es un gran partícipe en que el desarrollo no debe ser a toda costa, sino que se requiere un desarrollo equilibrado, en el que se satisfagan las necesidades de la población, pero con respeto a las normas medioambientales”.
Para el embajador Schmidt, esta es la octava ocasión en la que participa de las llamadas “Dos Sesiones” en China, es decir, las sesiones de la Asamblea Popular Nacional (APN) y del Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh).
En su opinión, otro punto sustancial del Informe sobre la Labor del Gobierno fue la preocupación que muestra China por la inversión en investigación y desarrollo (I+D). De hecho, en el informe ofrecido por el primer ministro Li se señaló que el gasto en I+D del país crecerá en más de un 7% anual durante el periodo del XIV Plan Quinquenal (2021-2025).
“China considera que debe ser independiente en los temas de alta tecnología. Se habla incluso del 5G como un factor de reactivación de la economía china”, expresó el embajador chileno. “Estados Unidos habla mucho del 5G, pero Apple todavía no ha logrado llegar a la tecnología requerida para tener el 5G”.
Por el contrario, Schmidt señaló que en China uno puede comprar un teléfono celular y tener ya conexión 5G. “Baidu ya tiene taxis sin conductores, a los que puede hacer andar solo con el sistema 5G. Según las últimas estadísticas, el año pasado había en China casi 150 millones de celulares incorporados con la tecnología 5G y se espera que en los próximos dos o tres años haya alrededor de 1500 millones de teléfonos con esta tecnología”, puntualizó.
Asimismo, Schmidt consideró muy importante que dentro del XIV Plan Quinquenal se hable de la “circulación dual”, el nuevo patrón que seguirá la economía china. “Mucha gente en Occidente entiende que la ‘circulación dual’ consiste en que China se cerrará porque tiene un gran mercado de consumidores y no es así. China ha sido muy claro en eso”, declaró. Schmidt recordó que en China se habla de una circulación interna y una externa que están interconectadas y se impulsan mutualmente.
“En la circulación externa, China está modificando la ley de protección de la propiedad intelectual, está modificando también la ley de protección a la inversión extranjera, está aumentando las zonas de libre comercio en todo el país para dar mayores posibilidades precisamente a la circulación externa y al trabajo con los países del mundo”, aseveró Schmidt, quien indicó que China busca también hacer que su economía sea más resistente a los vaivenes internacionales, en un mundo todavía muy golpeado por la pandemia de COVID-19.
Del mismo modo, Schmidt resaltó los anuncios económicos hechos por el primer ministro Li Keqiang, como la meta de que el PIB crezca al menos un 6% este 2021, así como que la tasa de desempleo calculada mediante encuestas en las áreas urbanas del país se mantenga por debajo del 5,5%, que la inflación esté bajo el 3% y que China planee reducir la relación entre su déficit y el PIB a alrededor del 3,2% para este año.