Una combinación perfecta
En la antigua China, las jerarquías eran estrictas. La vida cotidiana, el habla, el comportamiento, las costumbres y la cultura de las personas estaban profundamente marcados por aquel orden jerárquico. Al ser partes esenciales de la vida diaria, los muebles chinos no solo estaban profundamente influenciados por la sociedad feudal, sino que reflejaban también las características culturales de cada individuo.
Los muebles clásicos chinos representativos de las dinastías Ming y Qing se fabricaban de madera dura como el palo rosa, que la hacían resistente a la corrosión y presentar diversas texturas, por lo que los muebles eran hermosos y duraderos. Este material es ahora extraño y caro, así que la gente opta por otro tipo de maderas como el pino, el olmo y el haya, aunque la calidad es muy diferente.
Los muebles clásicos eran fabricados a mano. Sin embargo, con la llegada de las herramientas eléctricas y la mejora de la tecnología, algunos procesos simples comenzaron a ser finalizados con máquinas, aunque no llegan a alcanzar el nivel del trabajo manual. Por ejemplo, la sensación suave de la superficie requiere que el trabajador use un cuchillo afilado y ancho para raspar la superficie de la madera después de que la máquina la haya aplanado por primera vez. Además, debe usar la mano para sentir el cambio de suavidad después de cada rascado. El tallado de los muebles es inseparable de la operación manual. Las formas talladas por una máquina siguen un orden, pero las líneas son rígidas y carecen de vitalidad. Solo un tallado manual permite que estas sean más refinadas, creativas y dinámicas.
El aspecto más exquisito de los muebles clásicos chinos es su estructura: espiga y caja.
El aspecto más exquisito de los muebles clásicos chinos es su estructura: espiga y caja. La combinación de piezas, utilizando nada más que la madera en sí misma, es parte del oficio tradicional del carpintero. Se refiere al uso de empalme cóncavo-convexo entre dos componentes. La parte saliente se llama “espiga” y la parte rebajada, “caja”. Cuando se combinan, encajan perfectamente. Este método no requiere clavos y rara vez utiliza pegamento. Solo se basa en la conexión de la espiga y la caja.
La estructura de caja y espiga es la cristalización de la sabiduría de los trabajadores chinos y ejemplifica plenamente la creatividad y el arte del ser humano. Esta estructura en la madera fue descubierta en Hemudu, el lugar donde los antiguos chinos vivían hace más de 7000 años. Fue ampliamente utilizado en los periodos de Primavera y Otoño y de los Reinos Combatientes, maduró durante la dinastía Song y alcanzó su apogeo en las dinastías Ming y Qing. Su mayor ventaja es que evita los daños generados por los clavos en la madera, y es muy estable y firme. La técnica es una habilidad esencial de todo carpintero. Debido a la combinación detallada y sutil de los muebles de madera dura, los carpinteros requieren una técnica precisa y compacta, por lo que toma años el dominarla.
Los muebles chinos también están relacionados con la antigua filosofía china. Por ejemplo, el taoísmo enfatiza el equilibrio entre el yin y el yang, mientras que en la fabricación de los muebles, la caja es el yang y la espiga es el yin, los cuales están integrados y son complementarios. Esto hace que, independientemente del tamaño del mueble, no se necesite un clavo ni una gota de pegamento para que pueda permanecer firme durante siglos, a pesar de la temperatura y los cambios climáticos. El confucianismo, que enfatiza la delicadeza y la moderación, también ha sido incorporado al mobiliario chino tradicional. Por lo tanto, independientemente del estilo o del diseño, los muebles chinos son en su mayoría simétricos. El tipo, la forma y el material son los mismos o similares. Guardan un sentido de unidad, armonía y seriedad, lo que transmite equilibrio y estabilidad.
En la ciudad de Zaozhuang, provincia de Shandong, una trabajadora hace la estructura de espiga y caja.
El estilo Ming: conciso y suave
La técnica de fabricación de los muebles chinos alcanzó un auge durante las dinastías Ming y Qing, cada uno con un estilo particular. La distinción entre ambos radica principalmente en el estilo y la forma del mueble.
La provincia de Jiangsu, especialmente en los alrededores de la ciudad de Suzhou, es conocida por la técnica de fabricación de muebles de estilo Ming. Por lo tanto, son conocidos también como muebles de “estilo Suzhou”.
La dinastía Ming fue una época dorada para el desarrollo del mobiliario clásico chino. Perfectos en su forma y elegantes en su estilo, no tienen punto de comparación con los muebles de otras épocas. Su estructura adopta empalmes de estructura pequeña. Este estilo enfatiza la racionalidad y la diversidad de funciones. Por su elegancia y utilidad, es una hermosa combinación de arte y practicidad.
Los diseñadores de la dinastía Ming eran refinados eruditos. A menudo combinaban sus creativas ideas con el diseño, haciéndolas simples pero atractivas. La estructura de los muebles enfatiza la consistencia de la función y la estética, lo cual guarda relación con la búsqueda de la cultura. A primera vista parece insignificante, pero después de una inspección más profunda, el mueble muestra un encanto único que vale la pena apreciar.
La característica más destacada es el uso de líneas. Bajo la premisa de cumplir diversas funciones, las líneas aerodinámicas forman el cuerpo. Pero no se trata de un solo tipo de línea, pues los muebles de estilo Ming son una adecuada combinación de líneas curvas y rectas que logran transmitir tanto la idea del cambio como la de la unidad. Sus efectos visuales hacen que las personas perciban una elegancia natural y un diseño simple, lo cual es totalmente acorde con el estilo minimalista.
El uso de las líneas se ve reflejado, por ejemplo, en el respaldo de una silla que adopta principalmente una curva en forma de S, la cual se ajusta a la curva natural del cuerpo humano; es decir, es ergonómica. En términos generales, las líneas del mueble son como sus huesos. Suaves y hermosas, las líneas guardan proporción con la figura del ser humano. Una muestra de que con una buena base y adecuadas modificaciones, la belleza puede ser eterna.
En 2006, la técnica de fabricación de los muebles de estilo Ming fue incluida en el primer grupo del patrimonio cultural inmaterial de China.
El estilo Guangzhou presenta grandes áreas de tallado y una decoración escultórica.
El estilo Guangzhou: mezcla de culturas
A mediados de la dinastía Qing, la consolidación y el fortalecimiento de China se manifestó claramente en su cultura, por lo que el arte del mobiliario continuó desarrollándose en base a los grandes logros alcanzados durante la dinastía Ming. Por un lado, el interés de las clases dominantes motivó una serie de innovaciones y, por el otro, la llegada de numerosos misioneros de Occidente fortaleció el intercambio cultural. Por esta razón, muchos elementos occidentales fueron integrados a los muebles chinos, lo que enriqueció enormemente su fisonomía y función.
En aquel entonces, la ciudad de Guangzhou era una importante puerta para el comercio exterior y los intercambios culturales entre China y Occidente. La arquitectura de algunas instituciones comerciales locales comenzó a imitar los diversos estilos occidentales, lo que estableció una tendencia que no tenía precedentes. Como resultado de esto, los muebles de estilo Guangzhou presentan un cuerpo grande y pesado, mientras que las tallas sofisticadas se volvieron populares. Una amplia gama de estilos se centró en una meticulosa decoración escultórica. Además de presentar una gran área de tallado, se incrustaban diferentes materiales, como jade, mármol, cerámica y joyas.
Guangzhou, en el sur de China, es rica en madera. Después de convertirse en un puerto comercial, la llegada de la cultura occidental atrajo muchos estilos artísticos y arquitectónicos –barroco, rococó, entre otros–, los que tenían en cuenta la belleza tradicional del diseño y las artes del área de Lingnan.
La mayoría de muebles de estilo Guangzhou eran fabricados con maderas preciosas, y se caracterizaban por su material voluminoso y su modelado estable. Las técnicas buscaban generar un impacto estético. Por ejemplo, los componentes principales de los muebles, como las patas y los pilares, sin importar qué tan grandes fueran sus curvaturas, no solían usar métodos de empalme. En su lugar, estaban hechos de una sola madera. Toda la pieza del mobiliario utilizaba el mismo tipo de madera. Además, los muebles de estilo Guangzhou prestaban atención a la decoración. Salvo la parte posterior y los paneles de mesas y taburetes, todos los demás componentes estaban tallados con diseños sofisticados.
En 2008, la técnica de fabricación de los muebles de estilo Guangzhou fue incluida en la lista del patrimonio cultural inmaterial de China.
Cama hecha de caoba al estilo Ming.
El estilo Beijing: magníficos muebles
Los muebles de estilo Beijing se refieren principalmente a aquellos producidos en la capital y utilizados por la corte imperial.
El estilo nació durante la dinastía Qing. El emperador reclutó a artesanos calificados de las ciudades de Suzhou y Guangzhou para que formaran parte del taller imperial. Con el fin de satisfacer el gusto estético de los gobernantes, los muebles debían tener un gran estilo y postura. Gracias a suficientes recursos financieros y materiales, se estableció un estilo elegante, aristocrático, solemne y agraciado. El efecto estético no solo conservaba la belleza de las líneas de Suzhou, sino que también se basaba en las características del estilo Guangzhou. Más aún, los literatos e incluso los propios emperadores participaban personalmente en el diseño de los muebles, cuyo estilo elegante y lujoso reflejaba también la riqueza cultural.
La dinastía Qing coincidió con un periodo de prosperidad, por lo que tanto la corte imperial como los funcionarios de alto rango buscaban el lujo en todos los aspectos de la vida. En ese sentido, las especificaciones para los muebles eran más exquisitas que las del estilo Ming, el material era más audaz y el tallado era más estable, lujoso y hermoso. La superficie era decorada con oro, plata, jade, esmalte, placas de oro y cobre, platos de porcelana azul y blanca, entre otros elementos especiales.
Sin embargo, debido al exceso de lujo y decoración, la funcionalidad de los muebles era reducida. La fabricación bajo el estilo Beijing disminuyó después de la caída de la dinastía Qing.
En 2008, la técnica de fabricación de los muebles de estilo Beijing fue incluida en la lista del patrimonio cultural inmaterial de China.