Las escuelas primarias y secundarias de China han introducido la prohibición del uso de teléfonos móviles en las aulas, como parte de los amplios esfuerzos que se están haciendo para proteger a los alumnos de la adicción a internet y los videojuegos.
Los estudiantes de los niveles primario y secundario no deben llevar teléfonos móviles a las aulas, según una circular del Ministerio de Educación sobre los teléfonos dentro del campus.
Si los alumnos necesitan tener un teléfono móvil en la escuela, se debe presentar una solicitud especial a las autoridades escolares junto con el consentimiento por escrito de sus tutores, explicó el ministerio.
Una vez aprobada la solicitud, al llegar a la escuela, los estudiantes deben entregar sus teléfonos móviles a las autoridades escolares pertinentes. Los teléfonos se mantendrán juntos y de ninguna manera se permitirá que ingresen a las aulas, según la circular.
Las escuelas implementarán más medidas para poder cumplir mejor con las necesidades de los estudiantes de comunicarse con sus padres por teléfono mientras están en el campus.