Gerardo Yong

Por GERARDO YONG*

Hace apenas un par de días, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó con imponer aranceles a productos provenientes de China por 34.000 millones de dólares. Este domingo cumplió su palabra y con ello desató la guerra comercial más grande en la historia de la economía mundial.

El magnate inmobiliario aplicó aranceles por 25 % a más de 800 productos chinos, entre los cuales se encuentran dispositivos médicos y biomédicos, maquinaria industrial y refacciones automotrices. China respondió con una medida espejo, con la que gravó una cantidad semejante a bienes provenientes de Estados Unidos. La medida entró en vigor el mismo viernes en que la Casa Blanca dejó saber su intención.

Según el mandatario estadounidense, China ha sido responsable de un déficit comercial que asciende a más de 500.000 millones de dólares, sobre todo en productos de tecnología y derechos de propiedad intelectual, en los cuales el gobierno de Beijing ha presionado a firmas estadounidenses a entregar tecnología valiosa a cambio de permanecer en su descomunal mercado.

Este domingo, el Ministerio de Comercio chino afirmó que la medida ocasionará una fuerte crisis mundial, de la que no es responsable en ninguna manera, y acusó a Washington de aplicar una medida que considera como un “abuso comercial típico”.

“China se ve obligada a devolver el golpe para salvaguardar los principales intereses nacionales y los intereses de su pueblo”, dijo la instancia gubernamental.

Por su parte, expertos en Estados Unidos advirtieron también de una situación grave en el ambiente comercial bilateral que podría afectar otros mercados.

“El aumento de las tensiones en la relación económica entre Estados Unidos y China tendrá un impacto negativo en las operaciones en China”, dijo William Zarit, presidente de la Cámara de Comercio Estadounidense en China.

Se prevé que los aranceles aplicados por Trump afectarán a más de 500 productos provenientes del mercado estadounidense, sobre todo del sector automotriz y agrícola como la soya y la carne, los cuales gozaban de una preferencia especial.

Esta no es la única movida que hará Washington en materia arancelaria. Se espera que en los próximos días aplique el 25 % a otros bienes por 16.000 millones de dólares en exportaciones chinas.

* Gerardo Yong, director de la sección Internacional de Embajadas TV.