(Foto de la izq.): 17 de marzo de 2017. Wang Jinlong, un estudiante de posgrado de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Beijing, compra artículos con fines benéficos a través de la aplicación de pago móvil Alipay. (Foto de la der.): 19 de marzo de 2017. Nie Yusheng planta arbustos de saxaúl en su campo de la liga de Alxa, en la región autónoma de Mongolia Interior. Xinhua

Durante la última década, Liang Haiguang, fundador del Centro de Desarrollo Juvenil Estrellas (STARS), una organización sin fines de lucro, y sus colegas han estado trabajando arduamente para fomentar la alfabetización en niños pequeños en las zonas rurales remotas de China.

“Estos niños suelen tener relativamente pocos recursos para la lectura y, por consiguiente, también un bajo nivel lector”, explica Liang al semanario Beijing Review. En ese sentido, señala que el establecimiento de bibliotecas es uno de los proyectos clave de STARS, el cual coopera con diversas escuelas y ayuda a organizar actividades para fomentar el interés de los estudiantes por la lectura.

En la primera fase de STARS, las personas solo podían inscribirse en el proyecto de manera presencial directamente en las bibliotecas. “Nunca estábamos seguros de que una biblioteca estuviera funcionando como debía tras su establecimiento porque no podíamos hacer un seguimiento preciso”, recuerda Liang. Ahora, en cambio, STARS ha podido crear su propia base de datos impulsada por la tecnología digital.

Según Liang, hoy en día saben qué uso se le está dando a una determinada biblioteca a través de la computación en la nube, en lugar de tener que viajar hasta el lugar para averiguarlo. “Las aplicaciones digitales nos han ayudado a monitorear el funcionamiento de cada biblioteca en tiempo real”, destaca.

“La tecnología digital puede capacitar a las empresas benéficas y mejorar la eficiencia”, manifiesta Liu Jichen, fundador y CEO de Clear Plate.

El equipo de Clear Plate aborda el problema del desperdicio de alimentos en China. Después de una comida, los usuarios toman fotos de sus platos limpios, las publican en el miniprograma Clear Plate, una subaplicación de WeChat, y luego pueden obtener puntos una vez que la imagen es verificada mediante inteligencia artificial. Los puntos acumulados pueden ser intercambiados por regalos o transformados en donaciones a organizaciones de caridad.

Participación social

Estos son dos ejemplos de filantropía digital o de buenas prácticas a través de la tecnología digital. En los últimos años, tanto a través de Clear Plate como de Ant Forest, una iniciativa verde que se encuentra en la aplicación Alipay del gigante del comercio electrónico Alibaba, las personas pueden participar en actividades benéficas con apenas un clic a través de sus teléfonos móviles.

Lanzada por Ant Financial Services Group, Ant Forest promueve un estilo de vida más ecológico al alentar a los usuarios a reducir sus emisiones de carbono en su vida diaria. Estos pueden registrar su huella de carbono a través de acciones cotidianas, como tomar el transporte público o pagar sus facturas de servicios públicos en línea. Por cada acción reciben “puntos de energía verde”. Después de acumular una cierta cantidad de puntos, se planta un árbol, cuyo crecimiento puede ser visto y monitoreado por el usuario a través de imágenes captadas vía satélite mediante su teléfono inteligente.

“Tenemos una forma similar de recolección de puntos para promover la lectura”, indica Liang. El equipo de STARS desarrolló el miniprograma READATHON (una combinación de las palabras “lectura” y “maratón” en inglés).

Cuando los niños en zonas urbanas o rurales leen un libro, pueden enviar el código ISBN del texto al miniprograma y luego registrar su tiempo de lectura y qué les pareció la obra. Pueden donar su tiempo de lectura, y las empresas y fundaciones asociadas de STARS igualarán sus acciones para hacer donaciones reales, con el fin de ayudar a más niños necesitados. Se les denomina “donaciones de contrapartida”, o fondos dirigidos a una determinada causa benéfica en proporción a la cantidad donada por un usuario del miniprograma.

Según se pudo observar en la página principal de READATHON, hasta el 8 de febrero, las donaciones igualadas de varias empresas y fundaciones ascendían a 284.198 yuanes (41.843 dólares), equivalentes a la cantidad de donaciones reales a niños necesitados generadas por el tiempo de lectura donado por los usuarios.

“Se trata de una forma de animar a más niños y a sus padres a participar en obras de caridad de una manera fácil y divertida”, apunta Liang.

A través del miniprograma Clear Plate, los usuarios pueden canjear sus puntos por tazas, jabones, libros o dinero en efectivo para hacer donaciones a las organizaciones benéficas, con el fin de ayudar a las personas necesitadas, por ejemplo, a los niños cuyos padres trabajan en las ciudades y quienes han sido dejados en el campo, o a los adultos mayores que viven solos en áreas rurales. Como explica Liu, estos obsequios provienen de los socios comerciales de Clear Plate. Las empresas pueden donar su excedente de inventario, contribuyendo a la sociedad y ganando el aprecio de los consumidores, lo que sin duda es una acción de ganancia compartida.

“Al hacer esto, las empresas también pueden optar a deducciones fiscales”, agrega Liu. En China, las corporaciones y los individuos particulares pueden solicitar reducciones fiscales por donaciones hechas a cualquier organización benéfica sin fines de lucro que esté autorizada. Lanzado en 2018, Clear Plate cuenta actualmente con casi 10 millones de usuarios.

Efecto expansivo de la plataforma

STARS también recauda fondos en la plataforma filantrópica del gigante tecnológico chino Tencent –el creador de WeChat–, la cual viene siendo utilizada por unas 20.000 organizaciones benéficas. “Podemos presentar nuestros proyectos en la plataforma y conectarnos con una gran cantidad de internautas para que nos apoyen”, manifiesta Liang. Antes, las organizaciones sin fines de lucro tenían muy pocas fuentes y vías para recaudar fondos.

Así, la aparición de diferentes plataformas benéficas en línea ofrece a los ciudadanos chinos nuevos y más canales para hacer contribuciones.

“Además, la tecnología digital garantiza que nuestras acciones sean 100 % transparentes”, puntualiza Liang. En el sitio web de STARS, los visitantes pueden consultar información relacionada, como el estado financiero y el impacto del proyecto. “El público puede supervisar nuestras operaciones a través de nuestra plataforma digital”, expresa Liang, quien considera que esto genera más confianza y apoyo hacia la organización.

“Construimos un puente para conectarnos con las personas a través de la tecnología digital e inspirarlas a participar en nuestra iniciativa contra el desperdicio de alimentos”, resalta Liu. La filantropía digital no solo ayuda a resolver problemas sociales, sino que también transmite amor entre las personas.

“Las posibilidades en pos de iniciativas filantrópicas cada vez más específicas y dirigidas son infinitas gracias a la tecnología digital”, concluye Liu.