Una panda gigante se da un gran banquete con un pastel de manzana, que es su fruta favorita, en el Zoológico de Chapultepec.

La de los pandas en México es una historia de amor a primera vista que ha perdurado durante los últimos 47 años. Actualmente, en el Zoológico de Chapultepec de la Ciudad de México vive solo una hembra de panda gigante, Xin Xin, de 32 años. Su tía, la panda Shuan Shuan, falleció a los 35 años el pasado 7 de julio.

Xin Xin y Shuan Shuan son la descendencia de una larga y exitosa historia de cría de pandas en México. La primera pareja de pandas gigantes llegó a México el 10 de septiembre de 1975, el macho Pe Pe y la hembra Ying Ying, como un regalo de buena voluntad por parte del Gobierno de la República Popular China.

A diferencia de los acuerdos actuales, en los que los pandas se van en calidad de préstamo por 10 años a zoológicos de otros países, Pe Pe y Ying Ying fueron obsequiados, de manera que pertenecían por completo a México.

Para 1980, Pe Pe y Ying Ying tuvieron a su primera cría, un macho que recibió el nombre de Xen Li (shengli, que significa “victoria”), quien desafortunadamente murió a los ocho días. Para 1981 nació una nueva cría, y esa vez los expertos del zoológico de Chapultepec mantuvieron una estrecha vigilancia del recién nacido para evitar accidentes (Xen Li había muerto aplastado por su mamá accidentalmente).

Tohui, la pandita del amor

Cuando se tuvo la certeza de que la nueva cría sobreviviría, se llevó a cabo un concurso a nivel nacional para ponerle nombre, algo completamente único, pues, por lo general, los pandas reciben sus nombres en chino y desde China, pero este no fue el caso del segundo hijo de Pe Pe y Ying Ying.

Se recibieron miles de propuestas de nombres y el ganador fue Tohui, una palabra en lengua tarahumara que significa “niño”. Cabe destacar que, en aquel momento, aún no se sabía que la cría no sería un macho, sino una hembra (la palabra para “niña” en tarahumara es “tehuete”).

Así fue como se nombró oficialmente a la panda Tohui y para 1982, una popular cantante mexicana de nombre Yuri grabó una canción dedicada al pequeño animal, con lo que su popularidad creció tremendamente.

Cada fin de semana, el número de visitantes al Zoológico de Chapultepec rebasaba el millón de personas, todos con la esperanza de por lo menos atisbar a lo lejos a la famosa Tohui.

Exitosa reproducción en cautiverio

Pero Tohui tuvo más hermanos: el 22 de junio de 1983 nació el macho Liang Liang, quien sobrevivió hasta 1999; en 1985 nacieron unos gemelos, de los cuales solo uno sobrevivió, una hembra de nombre Xiu Hua, quien murió en 2013, a los 27 años; y en 1987, nuevamente de un parto gemelar nacieron dos crías, de las cuales solo una sobrevivió, Shuan Shuan, quien falleció este año, a la edad de 35 años. En todos estos casos, la reproducción se dio de manera natural.

De manera que entre 1987 y 1988, en el Zoológico de Chapultepec vivieron ¡seis pandas gigantes! Un hecho sin precedentes en el mundo. En 1988 falleció Pe Pe y para el año siguiente murió Ying Ying, pero ambos dejaron una amplia descendencia que, además, seguiría creciendo.

En 1988 llegó a México el panda macho Chia Chia, procedente del Zoológico de Londres, con la tarea de reproducirse con Tohui. De esa unión, el 1 de julio de 1990 nació Xin Xin.

En 2001, las autoridades del Zoológico de Chapultepec consideraron que ya era tiempo de que Shuan Shuan se reprodujera, y para ello se llegó a un acuerdo con el Zoológico de Ueno, en Japón, para que prestara al panda Ling Ling, quien visitó a Shuan Shuan en tres ocasiones, en 2001, 2002 y 2003.

Desafortunadamente, todos estos fueron intentos fallidos, y para diciembre de 2003 se decidió que Shuan Shuan viajara a Japón para intentar la reproducción allá. Después de 22 meses, en septiembre de 2005, Shuan Shuan regresó a México sin haber logrado reproducirse.

Unidos por la conservación

El Programa de Reproducción del Panda Gigante en el Zoológico de Chapultepec de la CDMX (Ciudad de México) ha sido el más exitoso a nivel mundial fuera de China. Durante varios años, los investigadores de este recinto han obtenido importante información científica por parte de especialistas chinos que ha permitido conocer mejor a estos mamíferos.

De acuerdo con Fernando Gual Sill, director general de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre de la Ciudad de México, la colaboración y el intercambio de experiencias con China han sido fundamentales para la conservación del panda gigante en México.

De acuerdo con Gual Sill, varios médicos veterinarios mexicanos han viajado a China a recibir capacitación por parte de especialistas chinos en diferentes ámbitos como medicina, atención a animales geriátricos, y atención a la reproducción y a las crías.

En 2017, el Centro de Conservación e Investigación del Panda Gigante de China otorgó a México un premio por su contribución a la conservación de esta especie.

26 de marzo de 2018. Dos criadores mexicanos hacen un examen médico a la panda Xin Xin en el Zoológico de Chapultepec en la Ciudad de México. Fotos de Xinhua