Primera página>Sociedad

Testigo y promotor de la amistad China-África

2021-08-04 11:26:00 Source:China Hoy Author:A WEN
【Cerrar】 【Imprimir】 GrandeMedianoPequeño
Los intercambios entre China y África tienen una larga historia, que se remonta a la dinastía Han (206 a. C.-220 d. C.). Según los registros históricos, en ese momento la seda y otros artículos de China habían sido ya introducidos en Egipto. Con el desarrollo de la antigua Ruta de la Seda y la Ruta Marítima de la Seda, China y África han venido aumentando sus intercambios y estrechando los vínculos.

 

La recién fundada República Popular China dio su apoyo al proceso de independencia de los países africanos, y estos también respaldaron a China en la restitución de su legítimo lugar en la ONU. China ha ofrecido su ayuda a los países africanos en la construcción de ferrocarriles para impulsar su desarrollo económico, y últimamente ha cooperado con el continente en la lucha contra la pandemia de COVID-19. La amistad bilateral se vuelve aún más firme a medida que pasa el tiempo. Eso implica los esfuerzos de muchas personas, entre ellas Liu Guijin.

Liu Guijin ganó la Medalla 1 de Julio por sus contribuciones a las relaciones de amistad entre China y África.

 

Arraigado en África

 

Liu Guijin nació en la ciudad de Heze, provincia de Shandong, en agosto de 1945. Después de graduarse de la universidad, comenzó a hacer realidad su sueño de trabajar en el Ministerio de Relaciones Exteriores de China. Liu Guijin inició en 1981 su carrera de diplomático acreditado en el extranjero. A principios de la década de 1980 trabajó como agregado y secretario en las embajadas chinas en el exterior, a principios de la década de 1990 se desempeñó como consejero, a mediados de esa misma década fue embajador extraordinario y plenipotenciario, y en 2007 fue el primer representante especial para asuntos africanos del Gobierno chino.

 

“He estado en todos los 54 países africanos, excepto los dos que no habían establecido relaciones diplomáticas con China en ese momento”, dijo alguna vez con orgullo. Su larga estancia en África le ha permitido tener un vínculo especial con esta tierra.

 

Liu ha dicho con franqueza que las relaciones amistosas entre China y África no se lograron de la noche a la mañana. Un ejemplo es el caso de Sudáfrica: en la década de 1970, debido a la poca influencia internacional de China, cuando los chinos caminaban por la calle vestidos con traje y corbata, los sudafricanos les llamaban “japoneses”.

 

Más tarde, con la consolidación del poderío nacional, el aumento de los intercambios entre los pueblos de China y Sudáfrica, y los esfuerzos de Liu y sus colegas, la situación fue cambiando poco a poco. Durante el período de Liu como embajador extraordinario y plenipotenciario en Sudáfrica, las atracciones turísticas y los letreros de las calles del país pasaron de estar en japonés e inglés a estar en chino e inglés. El embajador japonés en Sudáfrica solía decirle a Liu que cuando los turistas japoneses visitaban el país, los sudafricanos creían erróneamente que eran chinos.

 

En la década de 1980 y principios de la de 1990, el departamento consular de la Embajada de China en Sudáfrica constaba de uno o dos trabajadores y emitía varios cientos de visas al año. Durante el ejercicio del cargo de Liu en Sudáfrica, además de un departamento consular compuesto por cuatro o cinco personas en la embajada en Pretoria, había tres consulados generales en Johannesburgo, Ciudad del Cabo y Durban, cada uno de los cuales tenía una plantilla de 10 personas. Al año emitían una gran cantidad de visas de negocios, visita y turismo.

 

A principios del siglo XXI, los países occidentales tenían todavía un mayor derecho a hablar en África. La difamación de China por parte de los países occidentales dificultó el trabajo de Liu Guijin. “En aquel momento, en Sudáfrica y otros países africanos, la mayoría de los medios de comunicación eran privados. Sus puntos de vista se veían muy influenciados por los medios occidentales, como en el tema de China, y básicamente eran puntos de vista negativos hacia el país. Pero se dio un fenómeno muy interesante. Por un lado, veíamos que las relaciones políticas entre China y África iban cada vez mejorando y la cooperación se intensificaba. Por otro lado, nos encontrábamos en un entorno lleno de informaciones negativas sobre China”, recordó. Durante su periodo de embajador extraordinario y plenipotenciario en Sudáfrica, cómo tratar con los medios de comunicación locales y cambiar su visión malentendida sobre China fue una tarea importante para él.

 

El método que adoptó Liu Guijin fue ser muy activo con los medios. “No se les negó ninguna entrevista y se respondieron todas sus solicitudes”. Liu podía participar en un mismo día en dos o tres seminarios celebrados en diferentes lugares, tratando de explicar personalmente las verdaderas políticas de China hacia África y sus puntos de vista sobre algunos temas. Nunca evitó las preguntas agudas, sino que se comunicó con los medios de una manera franca y realista. Este método también dio buenos resultados y los medios de comunicación locales dejaron de divulgar parcialmente informaciones negativas sobre China.

 

La responsabilidad por la paz

 

En 2007, los medios y los políticos occidentales desacreditaron a China en la cuestión de Darfur, en Sudán. Ante las enormes dudas internacionales, China nombró un representante especial para asuntos africanos, medida que atrajo una amplia atención internacional. Después de dimitir como embajador en Sudáfrica, Liu Guijin asumió esta ardua tarea. Dadas las circunstancias de aquel momento, el representante especial tenía dos misiones: promover la paz en Sudán a través de un proceso de mediación y dar a conocer la posición de China.

 

Liu Guijin comenzó en mayo de 2007 su trabajo ininterrumpido como primer representante especial del Gobierno chino para asuntos africanos. Hizo tres visitas a África en tres meses (dos visitas al turbulento Darfur). Después de que Sudán acordó desplegar una operación híbrida de la Unión Africana y las Naciones Unidas en Darfur, los más de un millón de refugiados en esta región estaban un paso más cerca de regresar a sus hogares. La oposición comenzó a sentarse y negociar con el Gobierno, y las dos partes comenzaron a moverse hacia la paz y la estabilidad. La comunidad internacional calificó este progreso de “sin precedentes” y muchos líderes agradecieron a China por su papel constructivo.

 

Durante este proceso, la política exterior de China fue ampliamente reconocida por los países africanos. “Esto se debe a que China no está buscando intereses geopolíticos como otros países. El establecimiento de un representante especial muestra más claramente la actitud de China de no intervenir en los asuntos internos de otros países, apoyar los esfuerzos de mediación de la Unión Africana y las Naciones Unidas, y promover la resolución pacífica del problema de Darfur”, dijo.

 

Liu Guijin recordó su primera visita a Sudán después de asumir el cargo. Cuando el ministro de Relaciones Exteriores de Sudán supo que Liu iba a marcharse sin haber visto al presidente, arregló enseguida un encuentro entre ambos y la visita de Liu a Darfur. El presidente sudanés envió su avión presidencial para recibirle y organizó a miles de personas en Darfur para darle la bienvenida al representante especial de China. La escena impresionó mucho a Liu Guijin.

 

Contribución a la educación

 

Liu percibió la falta de investigación sobre África en la educación china. Después de jubilarse, Liu pasó del campo político al académico. Gracias a su amplia experiencia en los asuntos africanos, ha participado en el trabajo de cultivar a la próxima generación de promotores de las relaciones China-África. En noviembre de 2010 fue contratado como director de la Escuela de Negocios Internacionales China-África de la Universidad Normal de Zhejiang; mientras que en septiembre de 2016, fue designado director honorario de la Escuela de Negocios Internacionales China-África de la Universidad Normal de Zhejiang y experto en jefe del Desarrollo Económico y Comercial China-África. Liu Guijin se dedica activamente a la internacionalización de la Escuela de Negocios Internacionales China-África.

 

El 29 de junio pasado, con motivo del centenario de la fundación del Partido Comunista de China, se llevó a cabo la ceremonia de entrega de la Medalla 1 de Julio en el Gran Palacio del Pueblo en Beijing. Xi Jinping, secretario general del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) y presidente de China, entregó personalmente la Medalla 1 de Julio, que representa el más alto honor en el Partido, a 29 miembros del PCCh, quienes han realizado contribuciones significativas en diferentes campos. Liu Guijin figuró entre ellos.

 

Liu Guijin se mostró muy emocionado por recibir la medalla otorgada personalmente por el presidente Xi Jinping, y cree que se trata de un honor compartido con todos los trabajadores en la diplomacia, pues él es solo un representante de ellos.

 

Compartir con:
Editor: Wu Wen Da-->

Copyright © 1998 - 2016

今日中国杂志版权所有 | 京ICP备10041721号-4

京ICP备10041721号-4