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El monte Taishan: símbolo de la civilización china

2023-04-03 14:58:00 Source:China Hoy Author:MENG JIAXIN
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Turistas contemplan el amanecer en la cima del monte Taishan.
El monte Taishan está ubicado en la parte central de la provincia de Shandong, en el este de China, y se extiende más de 200 kilómetros de este a oeste y 50 kilómetros de norte a sur, con un área total de aproximadamente 426 kilómetros cuadrados y una altitud máxima de 1545 metros. En la antigüedad, la gente creía que el cielo y la tierra estaban sostenidos por cinco montañas que eran profundamente veneradas. Elevándose sobre la vasta tierra en el este, el Taishan es la primera de las cinco montañas en dar la bienvenida al sol naciente. Los chinos de la antigüedad creían que aquí era donde comenzaba la vida, por lo que es venerado como el monte supremo entre las cinco montañas sagradas, así como un símbolo espiritual de la nación china.

Todos los gobernantes chinos –entre ellos, los emperadores Yao, Shun y Yu de la antigüedad, Qin Shi Huang (el primer emperador de China), el ambicioso emperador Wudi de la dinastía Han (206 a. C.-220 d. C.), Wu Zetian (la primera y única emperatriz de China) y los emperadores Kangxi y Qianlong de la dinastía Qing (1644-1911)– visitaron el monte Taishan. Su larga historia y su magnífico paisaje natural le permitieron ser incluido por la Unesco como el primer sitio del Patrimonio Mundial Cultural y Natural de China, y es también un geoparque mundial, un parque forestal nacional y una zona turística de categoría 5A.

Templo Daimiao

Situado a los pies del monte Taishan, el templo Daimiao está dedicado al dios del monte Taishan y era el principal lugar donde los antiguos emperadores chinos rendían culto a los dioses de la montaña. Todo el templo es rectangular, con una superficie de 96.000 metros cuadrados. Según los registros escritos, el templo fue construido durante la dinastía Qin (221-206 a. C.) y refaccionado en la dinastía Han. Tras un largo proceso de reestructuración de más de mil años, se fue convirtiendo en un complejo de edificaciones a gran escala. En la actualidad, el templo cuenta con 186 edificios antiguos, 184 lápidas de piedra, 48 retratos de piedra de la dinastía Han, 212 cipreses antiguos y tuyas orientales, así como 292 especies de plantas ornamentales.

La disposición del templo Daimiao se basa principalmente en tres ejes paralelos –oeste, centro y este–, los cuales forman una estructura simétrica que se expande vertical y horizontalmente. La majestuosa grandeza de esta configuración confiere al complejo un auténtico aspecto de palacio imperial. El templo Daimiao tiene también un hermoso jardín clásico compuesto por antiguas tuyas orientales, frondosos ginkgos, exquisitos bonsáis y una gran variedad de flores que añaden un encanto natural a los edificios clásicos.

Ruta imperial

Como el camino utilizado por los emperadores durante cientos de años, el Sendero de la Puerta Roja ha sido por mucho tiempo la ruta principal hacia la cima, y también el eje central del monte Taishan. Con una serie de inscripciones en piedra a lo largo del camino, los visitantes pueden apreciar más de mil años de la historia china. La subida de 8,9 kilómetros, con un total de 6366 escalones, pasa por la puerta Roja, la puerta Zhongtian, la puerta Nantian y el pico Yuhuang. A lo largo del recorrido hasta la cima –que dura entre cuatro y cinco horas– hay ocho templos antiguos, más de 200 piedras con inscripciones y 300 tallas en acantilados.

El templo Guandi, que mira al sur, se encuentra al comienzo de la subida. Los cuatro caracteres inscritos en la pared de la puerta del templo fueron escritos por el emperador Qianlong (1711-1799) de la dinastía Qing durante su viaje a Taishan. El recinto se encuentra salpicado de árboles centenarios y en el patio trasero de su sala principal hay un viejo ciprés con una peculiar forma. El tronco mide apenas 0,8 metros de alto, mientras que su diámetro es de 1,1 metros, lo que le da el aspecto de un dragón enroscado. Ha sido inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial.

Subiendo la colina desde el templo Guandi, se alza una puerta de piedra en la que están inscritos unos caracteres que significan “el lugar donde estuvo Confucio”, al haber sido el sitio desde el cual el gran maestro habría comenzado de joven su ascenso por la montaña.

Siguiendo por el mismo camino, se llega a la puerta Zhongtian, la cual fue construida originalmente en la dinastía Qing. Adyacente a esta se encuentra el famoso pino Wangren, uno de los puntos más emblemáticos del monte Taishan. Situado en lo alto del acantilado, el pino mide ocho metros de altura y tiene un enorme dosel con una larga rama colgante.

La subida a la cima del monte Taishan es toda una aventura. Las Dieciocho Curvas es el tramo más peligroso, con una extensión de 800 metros, 1800 escalones de piedra y una altura vertical de más de 400 metros. Desde la dinastía Han existe un camino que conduce a la cima a partir de la puerta Nantian. De acuerdo con registros históricos, los escalones de piedra fueron construidos en la dinastía Tang (618-907). Durante miles de años, los emperadores chinos ascendieron al monte Taishan por este camino.

La puerta Nantian, conocida también como la puerta Santian, está a 1460 msnm y fue construida a principios de la dinastía Yuan (1206-1368). Cuando la niebla cubre la montaña, la puerta Nantian parece flotar en el cielo y el tramo de las Dieciocho Curvas se asemeja a una escalera colgante.

Al final de la subida está el templo Yuhuang, encaramado en el punto más alto del monte Taishan, a 1545 msnm, y un lugar de visita obligada. Además, es el pico más alto de toda la provincia de Shandong, y un lugar donde los pinos, peñascos y nubes se entretejen en la esplendorosa vista del imponente monte Taishan.

Una vista al amanecer

Contemplar el amanecer es una de las actividades imperdibles de cualquier visita al monte Taishan. En el lado este del pico Yuhuang hay un peñasco de granito de 6,5 metros de largo llamado piedra Gongbei. Con forma de hoja afilada, la piedra está inclinada hacia el norte en un ángulo de 30 grados desde el suelo, y también se la conoce como piedra Tanhai (“Explorar el mar”, en chino), ya que se asemeja a una persona que se levanta para explorar el mar. En lo alto del escarpado acantilado emana la gran fuerza y grandeza del majestuoso monte Taishan. Al mirar hacia abajo desde la cima, los visitantes pueden disfrutar de una vista panorámica de la montaña cuando el cielo está despejado y un mar de nubes cuando está nublado, gracias a lo cual se ha convertido en un punto ideal para contemplar el amanecer.

La magnífica vista del amanecer en el monte Taishan ha quedado inmortalizada en el corazón de los chinos a través de los tiempos. Por ello, pese a que la plataforma de observación desde la cual se puede ver el amanecer es reducida, las multitudes se congregan allí durante todo el año.

Otra popular atracción del monte Taishan es el Puente de la Inmortalidad. Al borde del acantilado, tres piedras gigantescas se sostienen sutilmente entre sí y forman un puente que pareciera estar a punto de caerse, pero que en realidad es muy firme. Debajo de la piedra del medio hay otro peñasco que sostiene las piedras gigantescas, el cual sirve como soporte del puente. Los antepasados creían que esta extraña escena había sido creada por seres inmortales, por lo que llamaron a este lugar el Puente de la Inmortalidad. Sin embargo, según la geología actual, esto responde a un fenómeno común de “colapso y depósito”.

Tallas rupestres

Además del paisaje rocoso natural, los literatos chinos han dejado muchas inscripciones poéticas en las rocas a lo largo de los tiempos, lo que les confiere un carácter único. Estas inscripciones en piedra no solo muestran el exquisito arte de la caligrafía, sino que también son un registro del sentir de los intelectuales chinos de distintas épocas cuando contemplaban el monte Taishan.

El valle Jingshi es famoso por ser el lugar con la mayor cantidad de tallas de sutras budistas que aún se conservan en un acantilado en China. En una vasta ladera de piedra de unos 2000 metros cuadrados, están grabadas más de 1000 palabras del Sutra del diamante, y cada carácter inscrito mide unos 50 centímetros. El valle Jingshi, el cual significa “Valle de piedra del sutra”, debe su nombre precisamente a dichas inscripciones. En la actualidad, quedan apenas 41 líneas de escrituras, tras más de 1000 años de erosión por el viento y la lluvia.

El acantilado Tang, en la pared del acantilado Daguanfeng, en la cima del monte Taishan, es el lugar que tiene la mayor concentración de inscripciones. La inscripción más famosa fue escrita por el emperador Xuanzong (685-762) de la dinastía Tang durante su ascensión al monte Taishan en el año 725. La inscripción mide 1320 cm de alto y 530 cm de ancho. La inscripción conservada tiene 1008 caracteres y 25 cm de diámetro. Escritas en letra clerical, su caligrafía es austera y gruesa, con un espectacular sistema de tallado.

El monte Taishan es un símbolo de la nación china, que integra de manera perfecta la cultura humana y el paisaje natural. Así, quienes asciendan por el sendero imperial sentirán cómo se sumergen por un corredor del tiempo, que guarda un exquisito legado de miles de años de civilización china.

Transporte:

Para llegar al monte Taishan desde el Aeropuerto Internacional Yaoqiang de Jinan, se puede tomar un autobús de enlace directo a la ciudad de Tai’an por 7o yuanes (10 dólares) y bajarse en la parada del Hotel Mingzuosantai, para luego tomar un taxi al monte Taishan.

Clima:

La temperatura desciende bruscamente a medida que aumenta la altitud, por lo que el clima es templado cálido al pie de la montaña y templado medio en la cima.

Alojamiento:

Hay hospedajes disponibles al pie, en la mitad y en la cima del monte.

Las Dieciocho Curvas de la puerta Nantian.


Talla rupestre en el monte Taishan. Fotos de VCG

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Editor: Wu Wen Da-->

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