3 de julio de 2023. Taller de montaje de vehículos de nueva energía del Centro de Fabricación Inteligente n.º 1 de Guangzhou Automobile Aian, que ha fabricado 20 millones de vehículos eléctricos hasta la fecha. Xinhua
EN los últimos años, la industria automotriz ha sido testigo de un aumento significativo en la producción y adopción de vehículos de nueva energía (VNE). A medida que el mundo avanza hacia un futuro más verde, los VNE han ganado prominencia debido a su menor huella de carbono y mayor eficiencia energética.
Las ventas de VNE fueron sólidas a nivel internacional en 2022, a pesar de la sombría tendencia general que presentó el mercado automotriz. Este año, se espera que representen el 18 % de las ventas totales de vehículos en el mundo. El crecimiento de la cuota de mercado se ha ralentizado ligeramente en comparación con 2021, pero los VNE comprenderán casi un tercio del mercado mundial en 2027 a medida que se desarrollen y produzcan más modelos y los controles de emisiones se vuelvan más estrictos.
En China, el término VNE se usa para designar automóviles que funcionan total o predominantemente con energía eléctrica, incluidos vehículos enchufables, vehículos eléctricos de batería, vehículos eléctricos híbridos enchufables y vehículos eléctricos de pila de combustible.
China ha emergido como líder en la fabricación y uso de VNE. Según una publicación de MIT Technology Review del 21 de febrero pasado, “solo en los últimos dos años, la cantidad de vehículos eléctricos vendidos anualmente en China creció de 1,3 millones a 6,8 millones, lo que convierte el 2022 en el octavo año consecutivo en el que China fue el mercado más grande del mundo para vehículos eléctricos. En comparación, Estados Unidos solo vendió aproximadamente 800.000 vehículos eléctricos en 2022”.
Surgimiento del mercado
En China, los VNE no solo están creciendo en popularidad, sino que también ha habido un aumento en la satisfacción del cliente y el rendimiento. Un estudio reciente de J.D. Power and Associates, una agencia global de investigación del consumidor, muestra que China se ha convertido en una potencia mundial en la industria.
El estudio, realizado entre enero y marzo de este año, encuestó a 7209 propietarios de VNE que habían comprado sus vehículos entre julio de 2022 y enero de 2023. La pesquisa incluyó 76 modelos de 36 marcas diferentes, en un total de 81 ciudades chinas. Se pidió a los participantes que indicaran su apego emocional y entusiasmo con respecto a 45 atributos de sus VNE, con el fin de cotejar los resultados en una escala de 0 a 1000 en satisfacción general.
China Daily hizo una síntesis de los resultados y reveló que las marcas internacionales tuvieron un buen desempeño, con un puntaje promedio que aumentó 40 puntos con relación al año pasado, alcanzando los 784 puntos y superando a las nuevas empresas (start-ups) chinas que obtuvieron un promedio de 781 puntos. Las start-ups chinas, incluidas NIO y XPENG, habían obtenido una puntuación más alta en los dos años anteriores, mientras que marcas nacionales más consolidadas, como Geely, registraron un incremento de 42 puntos en relación con 2022, llegando a una puntuación de 773.
Sin embargo, a pesar de que las marcas internacionales registraron una puntuación media más alta, fueron los modelos de marcas chinas los que encabezaron la lista en la encuesta, desde el Geometry E de Geely en el segmento de vehículos eléctricos pequeños hasta el Han EV de BYD en el segmento de sedán compacto y el NIO ET7 en el segmento de los vehículos prémium.
Estos hallazgos son importantes porque China desea aumentar su influencia en el mercado global de VNE, compitiendo con los fabricantes de automóviles de Estados Unidos y Europa.
China vs. Estados Unidos
¿Cómo se ubica China en la carrera global por la supremacía de los VNE? Las comparaciones entre los VNE estadounidenses y chinos en términos de calidad muestran que los fabricantes de automóviles de ambos países han realizado inversiones sustanciales en investigación y desarrollo para mejorar el rendimiento de sus productos. Los fabricantes estadounidenses como Tesla han sido pioneros en tecnologías de vanguardia para vehículos eléctricos, con capacidades de largo alcance e infraestructura de carga rápida. En tanto, las empresas chinas se han centrado en la fabricación de vehículos asequibles con tecnologías de batería avanzadas y un alcance mejorado.
Los VNE estadounidenses a menudo se asocian con su fabricación de alta calidad, interiores lujosos y diseños elegantes. Tesla, por ejemplo, se ha ganado una reputación por sus vehículos eléctricos prémium que ofrecen una combinación perfecta de rendimiento y estilo. Los VNE chinos, si bien han logrado avances significativos en los últimos años, tienen una calidad de fabricación comparativamente más baja. De todas formas, como muestra el estudio de J.D. Power and Associates, los fabricantes chinos han ido mejorando rápidamente el diseño de sus vehículos e incorporando características innovadoras para competir a escala global.
La competencia entre los VNE estadounidenses y chinos se extiende más allá de la cuota de mercado. Los factores geopolíticos, como las disputas comerciales, han creado desafíos e incertidumbres para los fabricantes de automóviles en ambos países.
Para superar estos desafíos y obtener una ventaja competitiva, los fabricantes de automóviles estadounidenses y chinos han buscado colaboraciones y asociaciones. Las empresas estadounidenses han buscado alianzas con fabricantes de baterías chinos para asegurar un suministro constante de baterías rentables, mientras que los fabricantes de automóviles chinos han buscado asociaciones tecnológicas con empresas estadounidenses establecidas para mejorar su oferta de productos. Estas colaboraciones tienen como objetivo aprovechar las fortalezas de cada lado y acelerar la innovación.
Un gran potencial
Los VNE juegan un papel crucial en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y la mitigación del cambio climático. Dado que el sector del transporte contribuye significativamente a las emisiones globales de carbono, la transición a los VNE es esencial para combatir el cambio climático y mejorar la calidad del aire en las ciudades.
Asimismo, representan una oportunidad para que los países reduzcan su dependencia de los combustibles fósiles y logren una mayor independencia energética. A medida que las fuentes de energía renovable se vuelven más frecuentes, la industria ha estimulado la innovación tecnológica, creado nuevas oportunidades de trabajo y fomentado el crecimiento económico. Al invertir en la investigación de VNE, el desarrollo y la fabricación, los países pueden posicionarse como líderes en el rubro automotriz en evolución, impulsando avances tecnológicos y creando empleos altamente calificados.
China ha hecho una gran apuesta para expandir sus ventas tanto en el mercado doméstico como internacional, así como para posicionarse como un centro clave en la cadena de suministro para la industria global y para la mejora del medio ambiente. La comparación entre los VNE estadounidenses y chinos destaca los diversos enfoques y fortalezas de cada país. Los VNE estadounidenses sobresalen en tecnologías de vanguardia, diseño prémium y avances en baterías, mientras que las empresas chinas se están poniendo al día rápidamente, sin dejar de centrarse en la asequibilidad, la producción en masa y la expansión de la cuota de mercado.
A medida que se intensifica la competencia global, las colaboraciones y asociaciones entre empresas estadounidenses y chinas se vuelven cada vez más importantes. El futuro de la industria automotriz radica en el desarrollo y la adopción continuos de VNE, y los fabricantes de automóviles estadounidenses y chinos desempeñan un papel importante en la configuración de este proceso.
*Michael Zakkour es fundador y director ejecutivo de las firmas de consultoría 5 New Digital y China BrightStar con sede en Estados Unidos.