20 de marzo de 2023. Un técnico monitorea el funcionamiento de los equipos en la sala de control central del Centro de Cómputo de Inteligencia Artificial de Tianjin. Xinhua
“Como modelo de lenguaje de inteligencia artificial (IA), mi propósito es ayudar y fomentar las capacidades humanas en lugar de reemplazarlas. Si bien soy capaz de procesar y generar un lenguaje similar al humano, mis habilidades aún son limitadas y están guiadas por los datos que obtengo por medio de entrenamiento”, respondió ChatGPT cuando se le preguntó si superará o reemplazará al ser humano. “Es poco probable que ChatGPT o cualquier otro modelo de lenguaje de IA supere o reemplace al ser humano”.
Sin embargo, las preocupaciones, o incluso los miedos, han sido difíciles de sofocar. En marzo, casi cuatro meses después de que ChatGPT –el chatbot basado en IA desarrollado por la startup OpenAI con sede en San Francisco– acaparara el foco de atención, la organización sin fines de lucro Future of Life Institute publicó una carta abierta en la que pedía una pausa de seis meses en el entrenamiento de modelos más potentes que GPT-4, el último prototipo de lenguaje lanzado por OpenAI, con el fin de desarrollar nuevos protocolos de seguridad para el diseño de IA.
La misión del instituto, según su sitio web, es “conducir las tecnologías transformadoras lejos de los riesgos extremos a gran escala y hacia el beneficio de la vida”. Hasta el momento, la carta ha obtenido más de 30.000 firmas, incluidas las de los magnates Elon Musk y Steve Wozniak, y de investigadores de Meta, Google y universidades, así como de ejecutivos de empresas que desarrollan sus propios sistemas de IA.
“Los últimos meses han visto una carrera fuera de control de los laboratorios de IA para desarrollar y desplegar mentes digitales cada vez más poderosas, que nadie –ni siquiera sus creadores– puede entender, predecir o controlar de manera confiable”, dice la carta.
Sin duda, los últimos desarrollos de la IA han suscitado una amplia discusión y reflexión, no solo sobre la tecnología, sino también sobre la civilización y el desarrollo humano. La humanidad parece estar enfrentando un sentimiento mixto de emoción, desconcierto, esperanza, incertidumbre, pánico y mucho más.
¿El “momento iPhone”?
Desde que GPT3.5 fue lanzado por primera vez en noviembre de 2022, muchas empresas se han apresurado a presentar sus propias herramientas de IA, lo que contradice la opinión de los pesimistas de que “el campo de la IA se ha convertido en una burbuja”. Gigantes tecnológicos como Google, Microsoft y Amazon han lanzado sus propias herramientas de IA generativa (IAG). En marzo, el motor de búsqueda en línea más grande de China, Baidu, lanzó ERNIE Bot, al que algunos se refieren como la contraparte de ChatGPT en China. En abril, Wang Xiaochuan, fundador y exdirector ejecutivo de Sogou Inc., uno de los principales proveedores de servicios y productos de Internet de China, dio a conocer su nueva empresa Baichuan Intelligence, que aspira a convertirse en la OpenAI de China.
La IAG es una categoría amplia que se usa para describir cualquier tipo de IA capaz de crear por sí sola textos, imágenes, videos, audios, códigos de computadora o datos sintéticos nuevos, a la que pertenece ChatGPT.
“Estamos en el momento iPhone de la IA”, declaró Jensen Huang, fundador y director ejecutivo de Nvidia, una empresa líder en computación y semiconductores de IA con sede en California, tras la presentación de dos nuevos chips para grandes modelos de lenguaje como ChatGPT en una conferencia de desarrolladores de IA de Nvidia en marzo.
Sin embargo, Li Di, director ejecutivo de la empresa Xiaobing, también conocida como Xiaoice, que se separó de Microsoft en julio de 2020, se siente más tranquilo respecto a los grandes modelos de IA. El nuevo progreso tecnológico, afirmó, ha eliminado varios obstáculos en la tecnología de procesamiento del lenguaje natural, como el hecho de que las máquinas no pudieran comprender las intenciones de las personas. Según dijo en una entrevista con la revista China Newsweek, exagerar la importancia y el alcance de la inteligencia artificial “tiene que ver más bien con el desarrollo de sus respectivos negocios o carreras”.
Liu Wei, director del Laboratorio de Interacción Ser Humano-Máquina e Ingeniería Cognitiva de la Universidad de Correos y Telecomunicaciones de Beijing, sostuvo que a pesar de las ventajas de la IA, como la gran capacidad de almacenamiento de información y el procesamiento de alta velocidad, sus fallas son obvias.
“La IA es solo una parte programable de la inteligencia humana y esta última es el producto de la interacción entre seres humanos, máquinas y sistemas ambientales”, explicó Liu al semanario Beijing Review.
29 de mayo de 2023. Visitantes en el stand de IA en la sala de tecnología de punta e industria futura, en una exposición en el marco del Foro Zhongguancun 2023, en Beijing. Wei Yao
¿Eliminará puestos de trabajo?
Un informe publicado por el banco de inversión Goldman Sachs en marzo predijo que 300 millones de empleos podrían verse afectados por la IAG. “Si la IAG cumple con las capacidades prometidas, el mercado laboral podría enfrentar un trastorno significativo”, advierte el informe.
Según este, una cuarta parte de todas las tareas realizadas en Estados Unidos y Europa podrían ser automatizadas por IA. En Estados Unidos, los puestos de apoyo administrativo y de oficina corren el mayor riesgo de ser reemplazados (46 %), seguidos por los puestos legales (44 %) y los de arquitectura e ingeniería (37 %).
ResumeBuilder.com, una plataforma para plantillas de currículums y consejos profesionales, llevó a cabo una encuesta a 1000 líderes empresariales de Estados Unidos para determinar cuántas empresas usan o planean usar ChatGPT. El resultado, publicado en febrero, indicó que casi la mitad de las empresas encuestadas están usando ChatGPT y el 93 % de ellas planea expandir su uso del chatbot, con el fin de facilitar la contratación, escribir códigos, redactar y producir contenido, atender a clientes y crear resúmenes de reuniones o documentos. Según el resultado, el 48 % de las empresas ha reemplazado a los trabajadores con ChatGPT desde su lanzamiento en noviembre pasado.
El desarrollo de la IA conducirá inevitablemente a la extinción de algunos puestos y al surgimiento de otros. Mo Yu, quien está a cargo del departamento de IA en Liepin.com, una empresa china de contratación en línea, dijo que ChatGPT y las tecnologías de procesamiento de lenguaje natural relacionadas mejorarán aún más la capacidad de las computadoras para escuchar, hablar, leer y escribir. Como resultado, profesiones en los rubros de atención al cliente, televenta, traducción, edición primaria, servicios de correo y seguridad podrían verse seriamente afectadas.
Sin embargo, Mo cree que la IA no es apta para entornos complejos, trabajos importantes de toma de decisiones (como el de los jueces), trabajos que requieren de comunicación interpersonal (como el cuidado de niños y personas mayores) y trabajos innovadores (como aquellos relacionados con la ciencia), los cuales no pueden ser reemplazados fácilmente.
Deng Yaxi, una escritora técnica en Shanghai, ha estado utilizando ChatGPT durante algunos meses. En entrevista con Beijing Review, señaló que ChatGPT puede ser un muy buen maestro y consultor. “Las preguntas que antes necesitaba hacer a mis colegas de trabajo que son programadores ahora pueden resolverse con ChatGPT, lo que permite ahorrar mucho tiempo”, indicó. “Sin embargo, por ahora dudo que pueda reemplazar el puesto que ocupo. Las respuestas que entrega no son perfectas y debo procesarlas para que sean útiles, aunque de todas maneras resulta una buena ayuda para la redacción”.
Ge Jianqiao, profesora de neurociencia de la Academia de Estudios Interdisciplinarios Avanzados de la Universidad de Beijing, manifestó que el miedo a que la IA reemplace a los seres humanos es “muy parecido a las preocupaciones que tenían las personas sobre las máquinas que reemplazaron la mano de obra durante la Revolución Industrial y es innecesario”.
Ge ha estado investigando el cerebro y la inteligencia en sus diferentes variantes. Según cree, la IA puede liberar a las personas del trabajo repetitivo para que puedan tener más tiempo para crear, experimentar y percibir, y dedicarse a otras cosas que tienen probabilidades de ser más significativas para la humanidad. “Nos es más una oportunidad que un desafío”, puntualizó.
Tomando como ejemplo la industria de los videojuegos, la IAG ha generado nuevas oportunidades para un importante número de empresas nuevas en China al ayudarlas a ahorrar tiempo y mejorar la calidad de las ilustraciones, como los personajes y los fondos que aparecen en sus juegos. Liu Jun, director ejecutivo y guionista de animaciones, señaló que considera la asistencia de la IA como “un atajo para que los creadores de contenido se den cuenta de lo que tienen en mente”, lo cual conducirá a un auge en la producción de contenido.
Prevención de riesgos
Además del reemplazo de puestos de trabajo, ChatGPT ha suscitado preocupaciones más profundas. La carta abierta publicada por Future of Life Institute representa las opiniones de quienes se preocupan por los posibles impactos negativos fuera de control de los nuevos avances de la IA. La carta plantea varias preguntas que pueden resultar preocupantes: ¿Deberíamos dejar que las máquinas inunden nuestros canales de información con propaganda y mentiras? ¿Deberíamos automatizar todos los trabajos, incluidos los que los empleados encuentran satisfactorios? ¿Deberíamos desarrollar mentes no humanas que finalmente podrían superarnos en número e inteligencia y reemplazarnos? ¿Deberíamos arriesgarnos a perder el control de nuestra civilización?
Frente a ello, varios países y empresas han tomado cautela y adoptado algunas medidas. Por ejemplo, el Gobierno italiano y algunas organizaciones y empresas de Estados Unidos, Alemania y Japón ya han impuesto prohibiciones o restricciones en el uso de ChatGPT.
A principios de mayo, el gigante tecnológico Samsung prohibió a sus empleados el uso de ChatGPT y otras herramientas de IAG en el lugar de trabajo, luego de una grave filtración de datos ultrasecretos a través de esta.
El 11 de abril, la Administración del Ciberespacio de China, el principal regulador del ciberespacio del país, emitió un borrador sobre la gestión de los servicios de IAG para solicitar comentarios del público. El objetivo final es que esta tecnología se desarrolle de manera saludable en beneficio de la sociedad. Se espera que la versión final del documento se publique formalmente a finales de este año.
OpenAI establece en su estatuto que cooperará activamente con otras instituciones de investigación y políticas, y “buscará crear una comunidad global que trabaje en conjunto para abordar los desafíos globales de la inteligencia artificial general”.
Según el gigante tecnológico estadounidense IBM, la IAG describe un tipo de inteligencia artificial que podría rivalizar con la inteligencia humana y tendría una autoconciencia capaz de resolver problemas, así como aprender y planificar para el futuro. Se cree que el término fue acuñado por primera vez por el físico estadounidense Mark Gubrud en 1997 y que podría devenir en problemas éticos más serios y otros riesgos.
Respecto al rumbo que los desarrolladores de IA deberían emprender, Liu Wei cree que el enfoque no debería estar en desarrollar la fuerza general de la IA, sino en desarrollar su capacidad para interactuar con los humanos y los sistemas que facilitan esa interacción. “Deberíamos centrarnos en cómo las máquinas y los humanos pueden realizar sus propias funciones y apoyarse mutuamente. Además, ‘la mejor’ máquina dependerá de quién la esté usando”, concluyó Liu.
