7 de noviembre de 2022. Una conferencia de prensa del Mecanismo Conjunto de Prevención y Control del Consejo de Estado se lleva a cabo en Beijing, capital de China. Xinhua
El 7 de diciembre pasado, el Gobierno chino publicó un aviso sobre optimización adicional de la respuesta al COVID-19, incluidas 10 medidas de prevención y control.
Según el aviso emitido por el mecanismo conjunto de prevención y control contra el COVID-19 del Consejo de Estado, dichas medidas se introdujeron en función de la más reciente situación epidémica y mutación del virus para contener la pandemia de una manera más científica y dirigida.
Por ende, se requiere que los departamentos pertinentes de las localidades rectifiquen los enfoques excesivamente simplificados o genéricos y las medidas políticas excesivas, se opongan y reduzcan las formalidades y el burocratismo sin sentido, y apliquen fielmente medidas de prevención y control para maximizar la protección de la vida y la salud de las personas y minimizar de esta manera el impacto de la pandemia en el desarrollo económico y social.
Asimismo, el citado aviso prohíbe la expansión arbitraria de áreas de alto riesgo y pide que se delimiten las áreas de riesgo de COVID-19 de manera específica y basada en la ciencia. Agrega que dichas áreas deben ser designadas por edificios, unidades, pisos y familias, en lugar de conjuntos residenciales, comunidades y subdistritos (poblados y municipios).
Como parte de los esfuerzos para optimizar las pruebas de ácido nucleico, las personas no estarán sujetas a pruebas masivas según las regiones administrativas, y el alcance y la frecuencia de las pruebas se reducirán aún más, señala el aviso.
Aparte de los asilos de ancianos, las instituciones médicas, las escuelas primarias y secundarias, las guarderías infantiles y otros lugares especiales, ya no se requerirá que las personas proporcionen resultados negativos en las pruebas de ácido nucleico y se sometan a controles de códigos de salud para acceder a lugares públicos o viajar a otras regiones.
Por otra parte, los contagiados deben ser tratados científicamente de acuerdo con la naturaleza de la infección y la gravedad de la enfermedad, añade el aviso.
En un aspecto más personal, si las condiciones de su hogar lo permiten, los portadores asintomáticos y aquellos con síntomas leves pueden someterse a cuarentena domiciliaria, mientras que los contactos cercanos deben someterse a cinco días de cuarentena domiciliaria.
En consecuencia, las medidas de cuarentena impuestas en áreas de alto riesgo deben levantarse si no se reportan nuevas infecciones durante cinco días consecutivos.
De igual forma, se deben garantizar las necesidades básicas de las personas para comprar medicamentos, por lo que las farmacias deben operar normalmente y los cierres intencionales están prohibidos, indica el aviso.
El documento recalca además la importancia de intensificar los esfuerzos de vacunación entre las personas de tercera edad, con un enfoque en mejorar la tasa de vacunación entre las personas de 60 a 79 años. También se debe acelerar la tasa de vacunación entre las personas de 80 años o más. Los servicios de vacunación se optimizarán mediante la creación de canales especiales y sitios de vacunación temporales, y el despliegue de vehículos móviles de vacunación, según el aviso.
Según el aviso, se estipula que las instituciones médicas de nivel primario y los médicos de familia deben brindar servicios específicos a grupos clave en función del estado de salud de las personas mayores en cuestión.
Pese al efecto de la pandemia -establece el documento- el funcionamiento normal de la sociedad y los servicios médicos básicos deben continuar, y agrega que las áreas que no son de alto riesgo no impondrán restricciones de viaje ni suspenderán negocios locales.
También hace énfasis en la necesidad de brindar atención especial y servicios de asesoramiento psicológico a las personas en cuarentena, los pacientes y los trabajadores de primera línea.
En el ámbito pedagógico, las escuelas que no reporten casos de COVID-19 deben funcionar normalmente, y las afectadas por la pandemia deben designar con precisión las áreas de riesgo y garantizar el funcionamiento normal en las áreas no afectadas, agrega.
Según Liang Wannian, jefe del panel de expertos en respuesta al COVID-19 de la Comisión Nacional de Salud de China, el nuevo ajuste es una optimización activa de la prevención y el control de la pandemia.
Liang añadió que -a su entender- China ha estado monitoreando de cerca los cambios en el virus y la enfermedad, optimizando continuamente la política y las medidas de prevención y control con base en la situación y buscando el mejor plan para contrarrestarlo.
Las medidas optimizadas harán un uso más eficiente de los recursos de prevención y control, y coordinarán de forma más efectiva la prevención y el control de epidemias con el desarrollo económico y social, concluyó Liang.