7 de junio de 2024. El embajador de Honduras en China, Salvador Moncada, en la conferencia titulada “La energía y el poder del jade: Una comparación entre las antiguas culturas maya y china”. Zhang Xinyang

8 de junio de 2023. Las piezas de jade encontradas por el equipo de arqueólogos chinos y hondureños en las ruinas de Copán, Honduras. Xinhua

EL 6 de junio tuvo lugar en Beijing una destacada conferencia titulada “La energía y el poder del jade: Una comparación entre las antiguas culturas maya y china”. Organizada por la Embajada de Honduras en China, la conferencia expuso las profundas conexiones y similitudes en el uso del jade en las antiguas civilizaciones maya y china.

El evento contó con la presencia de destacados oradores, entre ellos, el embajador de Honduras en China, Salvador Moncada; el embajador de Honduras en Corea del Sur, Rodolfo Pastor Fasquelle; y el director de la Oficina de Investigación de Teoría Arqueológica del Instituto de Arqueología de la Academia China de Ciencias Sociales, Li Xinwei.

Un símbolo perfecto

En su discurso inaugural, el embajador Moncada destacó la importancia de este tipo de eventos para fortalecer los lazos culturales y académicos entre naciones. “Este encuentro no solo resalta las similitudes en nuestras antiguas civilizaciones, sino que también abre puertas para un mayor entendimiento y colaboración entre nuestros países. El jade, con su profunda conexión espiritual y cultural, es un símbolo perfecto de este vínculo”, afirmó Moncada.

Por su parte, el embajador Rodolfo Pastor Fasquelle, quien fue también ministro de Cultura de Honduras, tuvo palabras esclarecedoras. “Esta conferencia resalta la necesidad de continuar explorando y profundizando nuestros conocimientos sobre las conexiones entre las culturas de Siberia y Asia del Este con las culturas mesoamericanas. Es a través de estos estudios comparativos que podemos comprender mejor nuestras raíces comunes y enriquecer nuestro patrimonio cultural global”, puntualizó.

Ubicadas en el noroeste de Honduras, las ruinas de Copán, uno de los sitios arqueológicos más antiguos y grandes de la civilización maya, fueron catalogadas como Patrimonio Mundial por la Unesco en 1980.

Li Xinwei, responsable del proyecto “Arqueología del Sitio Maya de Copán e Investigación de la Civilización Mesoamericana”, estuvo a la cabeza de un equipo integrado por arqueólogos de China y Honduras, encargado además de investigar el sitio 8N-11 de las ruinas de Copán.

Importancia ritual

El profesor Li Xinwei ofreció una perspectiva detallada sobre el jade en la antigua China, al explicar su papel central desde hace más de 8000 años. “La cultura Liangzhu, que floreció entre 3300 y 2300 a. C. en el curso inferior del río Yangtsé, desarrolló un complejo sistema ritual donde el jade era esencial para materializar el poder ideológico de la élite. Esta tradición se mantuvo hasta los primeros tiempos históricos, lo que hizo del jade el símbolo más importante de la civilización china”, explicó.

La conferencia subrayó cómo el jade ha sido venerado como un material sagrado, lleno de energía y poder, tanto en China como en Mesoamérica, a pesar de la distancia geográfica. Este notable paralelismo puede estar profundamente arraigado en la ideología chamánica que surgió en la mente de los ancestros paleolíticos tardíos en el noreste de Asia, quienes consideraban al jade como un material vivo y poderoso.

El evento concluyó con la promesa de futuras investigaciones y colaboraciones para seguir explorando estas fascinantes conexiones culturales y su impacto en las civilizaciones contemporáneas.