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Wang Xinyu: La nueva estrella del tenis chino | |
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12 de enero de 2025. La tenista china Wang Xinyu devuelve un golpe durante su partido de primera ronda individual femenino del Abierto de Australia 2025 en Melbourne, donde perdió 0-2 ante la española Paula Badosa.
12 de octubre de 2024. La tenista china Wang Xinyu sirve durante su partido de semifinal individual femenino del Abierto de Wuhan de la WTA 2024. Fotos de Xinhua EL 22 de junio, la final del torneo WTA 500 de Berlín enfrentó a la tenista china Wang Xinyu contra la excampeona de Wimbledon, la checa Markéta Vondroušová. Tras un intenso partido de tres sets, Wang cayó derrotada con un marcador global de 1-2, obteniendo así el subcampeonato en individuales. Aunque se quedó a un paso del título, Wang Xinyu logró en esta edición de Berlín superar continuamente sus mejores resultados previos en torneos sobre hierba. Consiguió victorias consecutivas ante cuatro jugadoras clasificadas entre las 20 mejores del mundo, incluida la reciente campeona de Roland Garros, la estadounidense Coco Gauff. Mientras sigue superando sus propios límites, esta nueva y muy popular estrella del tenis chino ha visto cómo su ranking mundial en tiempo real en individuales ascendía al puesto número 32. Una temprana formación Wang Xinyu, de 24 años, tomó una raqueta por primera vez a los cuatro años y comenzó a entrenar tenis formalmente a los seis. Bajo la estricta guía de su padre y primer entrenador, Wang Peng (exfutbolista profesional), inició desde muy temprano un camino de entrenamiento sistemático. “Como la mayoría de niños, cuando ella empezó a jugar al tenis, no entendía por qué lo hacía ni sentía una gran atracción hacia el deporte. Simplemente sabía que su padre quería que jugara, que parecía tener un poco de talento, que aprendía rápido y que era un poco mejor que otros niños, por lo que no se negó a pisar la cancha, pero nada más”, señaló Wang Peng. “Poco a poco, se fue adentrando en el tenis, ganó confianza en las competiciones y aprendió a conocer el mundo a través de este deporte. Fue entonces cuando realmente decidió que quería jugar al tenis y seguir el camino profesional”, enfatizó. El 11 de junio de 2023, el dúo formado por Wang Xinyu y Hsieh Su-wei se proclamó campeón de dobles femeninos en Roland Garros. Wang se convirtió así en la segunda tenista de la parte continental de China en ganar el título de dobles femeninos en Roland Garros y la quinta en obtener un Grand Slam de dobles femeninos, grabando su nombre para siempre en el panteón de los máximos honores del tenis mundial. En los Juegos Olímpicos de París 2024, Wang Xinyu formó una pareja de última hora con Zhang Zhizhen y juntas avanzaron hasta la final de dobles mixtos, donde finalmente cayeron por un estrecho margen, obteniendo la medalla de plata. Al ser entrevistada, Wang Xinyu declaró: “Siempre he creído que mientras confíe en mí misma y siga mi propio ritmo, alcanzaré sin duda la meta a la que quiero llegar. Confío en mí y sé que me esperan sorpresas más adelante”. Una nueva generación Con una altura de 1,82 metros, Wang Xinyu se afianza en el competitivo circuito profesional con una sólida técnica: diestra, con revés a dos manos. Su servicio, potente y preciso, suele ser un arma letal que le otorga puntos directos o prepara el terreno para ataques posteriores, convirtiéndose en una herramienta clave para acumular ventajas. En los intercambios desde el fondo de la pista, su potente y profundo golpe de derecha desborda con facilidad a la rival, mientras que su revés a dos manos, estable y sólido, es la base confiable para sus transiciones entre ataque y defensa, demostrando una notable resistencia bajo presión, especialmente al enfrentarse a golpes potentes de la oponente. Wang es muy consciente de la importancia crucial de la técnica en el más alto nivel. La intensidad del juego en los torneos profesionales es completamente diferente; cada golpe debe ser más preciso y estable. Su progreso en los últimos años es evidente. Ya no depende únicamente de su potencia para imponerse, sino que presta más atención a la combinación de ángulos y a los cambios de ritmo, mejorando significativamente su planteamiento táctico. Su coronación en dobles en Roland Garros es una prueba evidente del perfeccionamiento de su volea, remate y otras técnicas, así como de su creciente entendimiento con su compañera. El surgimiento de Wang Xinyu coincide con una época dorada para el tenis femenino chino, marcada por una abundancia de talentos y una transición generacional. Ella y la joven generación, representada por jugadoras como Zheng Qinwen, forman una nueva fuerza china que brilla en el circuito internacional, cargando con la responsabilidad de continuar el legado de éxito y abrir nuevos horizontes. La gloria del título de dobles en Roland Garros, junto con los avances constantes en individuales en el Abierto de Australia y en Wimbledon, no son solo hitos personales, sino también una poderosa prueba de los logros del desarrollo del tenis chino, que ha encendido la pasión de los aficionados nacionales. “Creo que la razón por la que he mejorado tanto estos dos años es, en realidad, porque el tenis se ha vuelto cada vez más divertido para mí. Cada vez que aprendo algo nuevo es porque me interesa, porque lo encuentro desafiante y divertido, no solo porque piense en usarlo en un partido”, apuntó Wang. “Nosotros [los tenistas profesionales] pasamos la mayor parte del tiempo viajando. Participamos en un nuevo torneo casi todas las semanas y enfrentamos la intensa prueba psicológica que supone ganar y perder. Creo que, independientemente de ganar o perder, no debemos dejar que eso defina nuestro valor personal”. Ella tiene una clara conciencia de que el camino por delante es largo, y de que necesita seguir aprendiendo, volverse más fuerte en todos los aspectos y prepararse para desafíos aún mayores. Precisamente esta ambición es la que le da la confianza para escalar las cumbres más altas del tenis mundial. Wang Xinyu, esta nueva estrella china que empuña la raqueta con mirada firme, avanza paso a paso. Con una técnica cada vez más depurada y una mentalidad serena y resiliente, se encamina hacia el objetivo de alcanzar mayores logros y ganar más honores para el tenis chino. Su futuro está lleno de posibilidades infinitas. |
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