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Con una mirada puesta en la ciencia | |
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Luciana Santos, ministra de Ciencia, Tecnología e Innovación de Brasil. Foto cortesía de la autora
31 de agosto de 2022. Trabajadores en una línea de producción de la CoronaVac, una vacuna contra el COVID-19 desarrollada por la farmacéutica china Sinovac, en el Instituto Butantan en Sao Paulo, Brasil. Xinhua LA soberanía de las naciones está directamente relacionada con el dominio tecnológico. Por lo tanto, la elaboración de estrategias de desarrollo es fundamental para un país como Brasil, que cuenta con abundantes recursos naturales, capacidad instalada y un fuerte capital humano en inteligencia. De hecho, lo que se necesita es hacer las inversiones correctas, sobre todo invertir en asociaciones y cooperaciones internacionales que sean ventajosas para Brasil. En el marco de las asociaciones y cooperaciones internacionales de Brasil y del plan “Nueva Industria Brasil”, China ha surgido como un socio estratégico. Ambos países comparten una serie de intereses comunes y también tienen grandes ejemplos de lo efectiva y beneficiosa que la cooperación puede ser, tal como lo atestigua el Programa de Satélites de Recursos Terrestres China-Brasil (CBERS, por sus siglas en inglés). Una de las más exitosas Se trata de una de las cooperaciones Sur-Sur más exitosas del país, tanto por sus resultados individuales como por el fortalecimiento de la relación entre Brasil y China. Hasta la fecha, se han desarrollado seis satélites y los dos países ya están trabajando juntos en el séptimo, el CBERS-6, con una inversión cercana a los 250 millones de reales (casi 46 millones de dólares). El objetivo es avanzar rápidamente en el octavo satélite sino-brasileño, el CBERS-5, que será un satélite meteorológico geoestacionario, así como un gran avance tecnológico para Brasil. Es importante destacar que en el ámbito espacial, en particular, la cooperación internacional es fundamental. Explorar la frontera del conocimiento del mundo que nos rodea y más allá requiere una fuerte relación de confianza mutua y el intercambio de experiencias, información y buenas prácticas, tal como ocurre en la relación sino-brasileña en este sector estratégico desde hace casi 40 años. El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (MCTI), a través del Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico, ha aumentado la inversión en infraestructuras de investigación y un ejemplo de ello es el Radiotelescopio BINGO. Se trata de otra gran infraestructura de investigación bilateral, la cual será el único radiotelescopio del mundo que tendrá como misión cartografiar el hidrógeno atómico trazado por la línea de 21 centímetros a grandes escalas angulares. Los objetivos del proyecto son comprender el sector oscuro del universo y desarrollar tecnología instrumental para la cosmología observacional y la astrofísica. La estructura del radiotelescopio está siendo fabricada en China y se espera finalizar su montaje este año. A finales de julio, el MCTI lanzó el Plan Brasileño de Inteligencia Artificial que busca, entre otras cosas, promover el papel global de Brasil en inteligencia artificial (IA) a través del desarrollo tecnológico nacional y de acciones estratégicas de colaboración internacional. En este contexto, el MCTI ya cuenta con un plan común y tiene previsto iniciar acciones conjuntas en IA con el Ministerio de Industria y Tecnología Informática de China. También está previsto avanzar en un nuevo frente de desarrollo de IA con el Ministerio de Ciencia y Tecnología de China. En el ámbito de la transformación digital, el MCTI y el Ministerio de Industria y Tecnología Informática de China han establecido un plan de trabajo conjunto que incluye, además de la IA, computación de alto rendimiento, semiconductores, tecnologías cuánticas y otras tecnologías que representan áreas estratégicas para el desarrollo de ambos países. La intención es reanudar el Diálogo de Innovación Brasil-China en 2025, cuyo objetivo es promover el intercambio de políticas y conocer el ecosistema de innovación en China, así como fomentar el intercambio entre investigadores de empresas de base tecnológica, el intercambio de start-ups y parques tecnológicos y buenas prácticas. Asimismo, es vital reanudar el Centro de Innovación en Nanotecnología China-Brasil, que había logrado avanzar considerablemente y obtener buenos resultados en investigación y desarrollo hasta 2018, año en que fue cerrado. Esta cooperación tiene un fuerte enfoque en innovaciones en un área que es estratégica para ambos países porque incluye materiales avanzados. Transición energética Las actuales estrategias de desarrollo en todo el mundo, incluida la de Brasil, tienen a la transición energética como un denominador común. En este punto, el MCTI pretende trabajar con el Ministerio de Industria y Tecnología Informática de China en investigación y desarrollo para la industria fotovoltaica. Brasil, que es un país con abundantes recursos solares (que además representan una fuente energética gratuita), necesita capitalizar esta riqueza en beneficio de su industria. En esa línea, China también se puede convertir en un gran socio de cara al desarrollo de innovaciones para la industria fotovoltaica. Cabe también mencionar la importante alianza entre la Universidad Federal de Río de Janeiro y la Universidad Tsinghua, que crearon en 2010 el Centro China-Brasil para el Cambio Climático y las Tecnologías Energéticas Innovadoras. Desde su creación, el centro ha contado con el apoyo del MCTI y actualmente se encuentra en fase de expansión, con proyectos en las áreas de desarrollo sostenible e iniciativas en temas como control de la contaminación, cambio climático, energías renovables, biocombustibles, recursos hídricos, eficiencia energética, energía nuclear, tecnologías de aguas profundas para la exploración de petróleo y gas, bioeconomía, bosques y clima, planificación energética, ciudades inteligentes, movilidad, ingeniería petrolera, seguridad industrial, transferencia tecnológica, innovación y emprendimiento, programas de formación, entre otros. En los próximos meses se creará el Centro Sino-Brasileño de Innovación en Iluminación de Estado Sólido, que funcionará en el Centro de Tecnología de la Información (CTI) Renato Archer, una unidad de investigación del MCTI. Se trata de un proyecto de cooperación en investigación aplicada en el campo de la fotónica y la energía, incluyendo iluminación inteligente, iluminación agrícola, entre otros. Este proyecto es de gran importancia para Brasil gracias a la diversa aplicación de la fotónica en áreas como las telecomunicaciones, la agroindustria y la salud. Además, el MCTI y sus unidades de investigación cooperarán con la Academia China de Ciencias, que también tiene una estructura con unidades de investigación. Se pretende establecer una amplia cooperación en 15 áreas de conocimiento. La cooperación chino-brasileña en el CTI tiene una historia inspiradora y un enorme potencial de colaboración, por lo que puede parecer casi imposible explotar todas las capacidades de estos dos grandes países. Por el momento, seguimos empeñados en diversas acciones conjuntas a favor del desarrollo de ambas naciones, a fin de que en un futuro próximo podamos cosechar los buenos frutos que las ciencias brasileña y china tienen para ofrecer al mundo. Las perspectivas para los próximos 50 años son de mucho desarrollo conjunto de tecnologías estratégicas que llevarán a Brasil y China a ser protagonistas globales. *Luciana Santos es ingeniera eléctrica, política y ministra de Ciencia, Tecnología e Innovación de Brasil. |
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