Como resultado importante de la cooperación entre el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO) y el Instituto de Estudios de la China Contemporánea de la Academia China de Ciencias Sociales (CASS, por sus siglas en inglés), se publicó la versión en español de Breve historia de la República Popular China (1949-2019), un libro que tiene como objetivo brindar a los lectores de los países hispanohablantes una comprensión precisa y concisa sobre la historia de la Nueva China. La versión electrónica del libro puede ser descargada de forma gratuita en el sitio web oficial de CLACSO. De hecho, a más de un año de su salida a la luz, el libro ocupa el primer lugar en descargas en dicha plataforma. Muchas figuras políticas y académicos de España y América Latina han expresado que la historia de la República Popular China es de gran importancia para una comprensión profunda de China en la era actual.
Gustavo NG, escritor y periodista argentino, cofundador de la revista DangDai y ganador del Special Book Award of China:
“La historia de la humanidad ha tomado un camino propio y distinto en China. El desarrollo de la civilización milenaria china ha procedido manteniendo una sólida identidad, que ha incorporado pequeños y constantes cambios y también formidables transformaciones sin perder la lealtad a un fundamento milenario.
Desde América Latina observamos cómo, habiendo partido de un sometimiento colonial similar al de nuestros países, China consiguió liberarse. Desde entonces, los latinoamericanos vimos cumplirse en China lo que anunciaban nuestros propios revolucionarios, es decir, las condiciones de vida del pueblo han ido mejorando y en 2020 se consiguió ese hito en la larguísima historia de toda la humanidad que fue acabar con la pobreza extrema. Este desarrollo histórico beneficia al pueblo chino y ofrece esperanzas a los países que continuamos siendo explotados por potencias extranjeras. Por un lado, nos dice que la liberación nacional es posible y abre las posibilidades de una mejoría de toda la sociedad a través de una mejor distribución de la riqueza. Por el otro, China no solo se conforma con el beneficio de su pueblo, sino que propone a otras sociedades un modelo internacional más democrático y pacífico”.