Me atrevo a afirmar que México está destinado a convertirse en el socio comercial y estratégico más importante de China en este continente por cuatro razones principales.  

En primer lugar, se integra con América Latina a través de su idioma, raíces históricas y cultura. En segundo lugar, cuenta con ventajas significativas para invertir, su red de tratados comerciales, su gran base poblacional, sus riquezas naturales, así como la dimensión de su economía y de su mercado. En tercer lugar, es la economía que más productos industriales exporta de toda América Latina y se ha convertido en una potencia en el comercio internacional, al colocarse como el mayor socio comercial de la primera economía del mundo. Al mismo tiempo, más de las tres cuartas partes del PIB de México descansan en el comercio exterior. Y en cuarto lugar, por su ubicación geográfica, México es el puente natural entre el norte y el sur del continente y, al mismo tiempo, entre los dos grandes océanos. 

El intercambio económico bilateral ha experimentado un crecimiento explosivo en los últimos 15 años. Entre 2009 y 2023, el total de los intercambios creció más del 260 % al pasar de 34.000 millones de dólares a 124.000 millones de dólares, mientras que el déficit comercial alcanzó los 104.000 millones de dólares en 2023.  Es decir, de cada peso que se comercia hoy, 90 centavos representan las importaciones y 10 centavos las exportaciones. 

Sin embargo, en el caso de las exportaciones de México a China pasamos de 2200 millones de dólares en 2009 a 10.000 millones de dólares en 2023. Es decir, se registró un crecimiento del 354 %. Hoy los principales productos de exportación a China son el mineral de cobre desde Sonora, las autopartes desde Puebla y Jalisco, y las partes eléctricas y electrónicas desde Chihuahua, Jalisco, Nuevo León y Estado de México, principalmente. 

Inversión de China en México 

Después de la pandemia, el impulso del propio mercado se ha acelerado y las empresas chinas se están relocalizando en México. Su objetivo es no perder su participación en el mercado de Norteamérica. Para ello, buscan evitar o minimizar la carga arancelaria impuesta por Estados Unidos a sus exportaciones, estar cerca de su cliente final para evitar los efectos del paro de los transportes y logística y, al mismo tiempo, permanecer en una posición competitiva tanto en precio, tiempos de entrega y calidad. 

Entre enero de 1999 y marzo de 2024, según datos de la Secretaría de Economía, México recibió un total de 2244 millones de dólares en inversión extranjera directa proveniente de China, distribuida en nuevas inversiones (1659 millones de dólares), cuentas entre compañías (379 millones de dólares) y reinversión de utilidades (206 millones de dólares). Durante el mismo periodo, México también recibió un total de 1519 millones de dólares en inversión extranjera directa proveniente de Hong Kong.  

La presencia de empresas chinas es cada vez más notable y su contribución al desarrollo local y nacional es innegable. 

1. Hutchison Ports (Hong Kong): Este 2024 cumple 27 años en México y ha invertido en la modernización y equipamiento de los puertos de Veracruz, Ensenada, Manzanillo, Lázaro Cárdenas y Tula. A través de Tula, hace más de una década, logró conectar los dos océanos y las rutas ferroviarias para una mayor eficiencia. 

2. Huawei: Se estableció en México hace más de dos décadas, aunque propiamente es una empresa de servicios que ha creado miles de empleos, tanto directos como indirectos. Huawei ha invertido en la capacitación de talento local, a fin de introducir más eficientemente su tecnología. 

3. Johnson Electric (Hong Kong): Minimotores, actuadores y sistemas de automatización para automóviles son sus principales productos en Zacatecas desde 2012. Destaca su amplio programa de entrenamiento y retención de talento, incluyendo programas de vivienda y formación juvenil. 

4. Lenovo: Inició sus operaciones de manufactura en México en 2008 con su planta en Apodaca, Nuevo León, y hoy es uno de los principales fabricantes de computadoras en la región. Sin duda, es un modelo de negocio altamente competitivo. 

5. Hisense: Inició operaciones en México en 2011 en Rosarito, Baja California, y después se expandió a Nuevo León. Fabrica televisores, aire acondicionado y línea blanca. Hoy es el número uno en la exportación de refrigeradores. 

6. JAC Motors: Es un fabricante de automóviles que estableció una planta de ensamblaje en Ciudad Sahagún en 2012 y hoy fabrica 17 modelos de autos en cinco plataformas diferentes. Ha creado un centro de investigación y calibración de tecnología para vehículos eléctricos y colabora con los centros de investigación y universidades de todo el país. 

7. Autopartes: La inversión china en esta industria –en la que destacan ocho empresas de capital privado– representa el 80 % de la inversión de este origen y el 70 % del empleo generado. Entre ellas, las principales son JAC Motors, AMI PPM de México y Minth. 

8. Hofusan Industrial Park: Localizado cerca de Monterrey, inició operaciones en 2017. Es un parque industrial con inversión sino-mexicana que ha traído varias empresas, desde las dedicadas a la fabricación de muebles hasta las de productos electrónicos. 

9. State Power Investment Corp.: Inició operaciones en 2020, tras la adquisición de Zuma. Hoy opera parques solares y eólicos en Sonora, Chihuahua, Jalisco, Tamaulipas y Oaxaca. 

10. Ningbo Xusheng: Establecida en 2023 en Coahuila, se dedica a la fabricación de motores y partes de aluminio y sus aleaciones, especialmente para los vehículos eléctricos. 

11. JL Mag: Llegó a Nuevo León en 2023 con una planta avanzada para la producción de imanes para vehículos eléctricos. 

12. Empresas constructora y petroleras: Se han enfocado en su contratación para distintas obras, como la reconstrucción y mantenimiento de la Línea 1 del Metro de la Ciudad de México, la construcción del Tren Maya, la construcción y mantenimiento de puertos, etc. Entre ellas destacan CCCC, CEEC y CRRC Zhuzhou Locomotive. En el ámbito petrolero, entre las empresas que en asociación con mexicanas o directamente operan proyectos de exploración y producción destacan COSL México –filial de CNOOC– y Sinopec. 

13. BYD: Llegó con sus autos eléctricos desarrollados a partir de tecnología de punta en baterías. Este año ha anunciado su interés de invertir en una planta armadora. 

14. Vehículos eléctricos: Sin duda, el mayor foco de atención está en esta industria, en la que se espera una inversión en México del orden de 20.000 millones de dólares en la siguiente administración. El número de marcas de vehículos a gasolina, híbridos y eléctricos que están llegando a México ya supera las 20. 

15. Servicios: Importante también mencionar a las empresas de servicios como DiDi, Bank of China, ICBC, Kerry Logistics, COSCO, entre las más relevantes. 

Existen varios retos que deben ser abordados para que ambos países reciban los mayores beneficios. Uno de los desafíos más significativos es lograr que la derrama económica no se concentre en enclaves, sino que llegue a todas las regiones de México (según su vocación), y que el intercambio tecnológico y la innovación se realicen en un esquema de colaboración con empresas locales. 

Aumentar la prosperidad compartida entre México y China depende de la capacidad de ambos países para trabajar juntos, superar obstáculos y aprovechar las oportunidades que esta relación ofrece. Con una estrategia adecuada y una cooperación continua, la inversión de China podrá convertirse en un motor clave para el crecimiento económico y el desarrollo de México. 

*Amapola Grijalva es socia de WTI Group, experta del mecanismo de solución de controversias del Tribunal Popular Supremo de China, presidenta de la Junta de Gobierno de la Cámara de Comercio México-China y representante del Consejo de Desarrollo Comercial de Hong Kong en México.