BIENVENIDOS a “Sabiduría sin fronteras”. En esta serie, les explicaremos el motivo, el momento y la ocasión de las citas clásicas extranjeras utilizadas por el presidente chino, Xi Jinping.

En este episodio explicaremos la frase: “No debe servir a la guerra ni a la aniquilación, sino a la paz y a la reconciliación”. Es parte de un dicho del escritor y Premio Nobel alemán-suizo Hermann Hesse (1877-1962).

El 18 de enero de 2017, Xi citó esta frase en un discurso de apertura titulado “Trabajar juntos para construir una comunidad de destino de la humanidad” en la Oficina de las Naciones Unidas en Ginebra, en el que llamó a la comunidad internacional a construir un mundo de paz duradera y seguridad común.

“¿Qué quisieras ser cuando crezcas?”.

“Los niños en Palestina no crecemos”.

Este fragmento proviene de una conversación entre un periodista y un niño palestino devastado por la guerra.

Incluso, hasta el día de hoy, los dolores de la guerra siguen atormentando a innumerables inocentes en sus pesadillas. Desde la Guerra del Peloponeso en el siglo V a. C. hasta las dos guerras mundiales en la primera mitad del siglo XX, y la Guerra Fría que duró unos 40 años, las cicatrices de la guerra son profundas. Si bien aún permanece en el aire el humo de las batallas pasadas, el mundo vuelve hoy a tambalearse al borde de nuevos conflictos.

Actualmente, las cuestiones candentes regionales se suceden una tras otra. Los conflictos locales estallan con frecuencia. El unilateralismo y el proteccionismo están en aumento. Las amenazas a la seguridad tradicionales y no tradicionales están profundamente entrelazadas.

En resumen, la humanidad se enfrenta a un desafío global sin precedentes. Según un informe del Instituto para la Economía y la Paz, en 2022, el número de muertos por los conflictos armados en el mundo alcanzó el nivel más alto en casi 30 años.

¿Qué le pasa a nuestro mundo? ¿Y qué podemos o debemos hacer? En respuesta a estas preguntas apremiantes, el 21 de abril de 2022, en la ceremonia inaugural de la Conferencia Anual del Foro de Boao para Asia 2022, Xi propuso por primera vez la Iniciativa para la Seguridad Global (ISG). La ISG busca dar respuestas claras a preguntas como cuál concepto de seguridad necesita el mundo y cómo los países pueden proteger la seguridad común.

En este sentido, ofrece soluciones y conocimientos chinos para abordar los desafíos en la seguridad global. Las promesas de China son más que palabras, son evidentes en sus acciones.

Durante los últimos dos años, la ISG ha echado raíces y ha dado frutos. En marzo de 2023, Arabia Saudita e Irán llegaron a un acuerdo mediado por China, también conocido como el Acuerdo de Beijing, a través del cual resolvieron reanudar las relaciones diplomáticas. Este acercamiento histórico ha alentado al Medio Oriente a abordar y resolver sus numerosos conflictos regionales.

En cuanto a la crisis de Ucrania, China publicó el documento “Posición de China sobre la solución política de la crisis de Ucrania” en febrero de 2023, en el que se destaca la postura objetiva e imparcial de China sobre el tema, así como su compromiso de facilitar el diálogo y la negociación para resolver la crisis.

En cuanto al conflicto palestino-israelí, China ha pedido la implementación de la solución de dos Estados y una conferencia internacional de paz más amplia, más autorizada y más influyente.

El país aporta más tropas a las operaciones de mantenimiento de la paz que cualquier otro miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU.

Estos esfuerzos demuestran plenamente el compromiso de China con la salvaguardia de la paz global. Todavía nos queda un largo camino por recorrer antes de que la humanidad logre una paz duradera y todos los países deben aunar esfuerzos para lograr este objetivo común.

Todos debemos recordar la frase: “No debe servir a la guerra ni a la aniquilación, sino a la paz y a la reconciliación”.

La certeza que ofrece el desarrollo de China seguirá siendo un ancla poderosa para la paz y el desarrollo del mundo.