BEIJING, 9 ago (Xinhua) -- El índice de precios al consumidor (IPC) de China, uno de los principales barómetros de la inflación, creció un 2,7 por ciento interanual en julio y se mantuvo sin cambios frente a la cifra registrada en junio, informó hoy viernes el Buró Nacional de Estadísticas (BNE).

La cifra fue inferior a las estimaciones del mercado de un aumento del 2,8 por ciento, y también se mantuvo por debajo de la meta anual del 3,5 por ciento establecida por el gobierno.

El BNE atribuyó el crecimiento de la inflación a la subida interanual de los precios de los alimentos, que se encarecieron un 5 por ciento en julio. Dichos precios suponen un tercio en los cálculos del IPC.

Yu Qiumei, experta en estadística del BNE, dijo que los precios al consumidor de China se han mantenido relativamente estables. "En términos mensuales, el IPC creció un 0,1 por ciento respecto a junio y los precios de los alimentos en julio se mantuvieron estables en comparación con el mes anterior", dijo Yu.

Los datos también muestran que el índice de precios al productor (IPP), indicador que refleja la inflación en el comercio al por mayor, cayó un 2,3 por ciento interanual en julio. La cifra, un 0,3 por ciento inferior a la de junio, supuso el decimoséptimo mes consecutivo de descenso.

La economía de China está atascada en una recuperación larga y penosa, desacelerándose a un ritmo de crecimiento del 7,5 por ciento durante la segunda mitad del año respecto al 7,7 por ciento registrado durante los primeros tres meses y el 7,9 por ciento del último trimestre de 2012.