Una joven observa las prendas de la marca de moda uruguaya Tach. Michael Zárate

Más allá de la exquisita calidad de su carne bovina, productos lácteos y soja, la lana uruguaya ha jugado también un papel preponderante en el desarrollo de sus relaciones con China, como fue remarcado el 1 de noviembre en el seminario “Uruguay en clave de lana: Importancia del sector en las relaciones con la República Popular China”, organizado por la embajada del país sudamericano en Beijing.

“El sector lanero se encuentra en los propios cimientos de los lazos bilaterales entre Uruguay y la República Popular China, como no ocurre con ningún otro sector en nuestro histórico relacionamiento”, manifestó el embajador uruguayo Fernando Lugris. “Es un área que, además, hace a la esencia propia de los uruguayos, a nuestra identidad y al lugar que ocupamos desde hace décadas en el dinámico universo de la producción textil mundial”.

Ante representantes del diseño y de la industria textil de China, Lugris recordó que a partir de 1859 se dio en Uruguay lo que se denominó como la “Revolución del Lanar”, cuando el país vivió un notable incremento en la producción de lanas de exportación al mundo.

“Pero hace unos 40 años, la segunda ‘Revolución del Lanar’ se dio en nuestro país, y no por un cambio tecnológico, sino por la aparición de un nuevo gran amigo para el Uruguay, y ese fue la República Popular China”, valoró el embajador Lugris, quien manifestó que la lana uruguaya ha sido fundamental para la construcción de una potente industria textil de China para el mundo.

Durante el seminario, el embajador Lugris resaltó la labor de la diseñadora uruguaya Gabriela Hearst, cuyo trabajo es conocido en China. “Lo que Gabriela Hearst produce son prendas sustentables donde busca poner énfasis en la protección del medio ambiente”, dijo.

El seminario “Uruguay en clave de lana” permitió que el público invitado pudiera conocer el recorrido que hace la lana uruguaya: desde la cría y el desarrollo del ganado ovino, la esquila, los diversos tratamientos e hilados, hasta la producción de prendas de alta calidad, muchas de las cuales pueden ser apreciadas actualmente en marcas presentes en el mercado chino.

Por su parte, Matías Benitez, encargado del Departamento Económico-Comercial de la Embajada de Uruguay en China, hizo hincapié en la importancia que ha tenido la lana especialmente al comienzo de las relaciones oficiales entre los dos países.

En ese sentido, recordó que según Tang Mingxin, embajador chino en Uruguay entre 1996 y 1999, los diplomáticos chinos enviados desde el inicio al país sudamericano eran denominados por su Gobierno como los “embajadores de la lana”, ya que el comercio de este producto dominaba sus agendas de trabajo en ese entonces.

“La lana y sus derivados sostuvieron una participación expresiva en la canasta exportadora uruguaya con destino hacia China desde el establecimiento de las relaciones diplomáticas hasta el año 2005, cuando la soja pasó a ocupar el primer plano y, unos años más tarde y hasta ahora, la carne bovina”, explicó Benitez. “De todos modos, la lana nunca dejó de ser una insignia que define la esencia de nuestros vínculos bilaterales”.

Benitez resaltó la trayectoria en el mercado chino de empresas uruguayas como Lanas Trinidad –que llegó con sus productos a China en 1982, antes del establecimiento de relaciones diplomáticas en 1988–, así como de entidades sin ánimo de lucro en el sector lanero como Manos del Uruguay, que apoya en dar trabajo a las mujeres de las zonas rurales del país sudamericano.

Asimismo, se aprovechó la ocasión para presentar al público chino productos de la marca de moda uruguaya Tach, y destacar que en la próxima Copa del Mundo de Fútbol de Catar, los integrantes de la selección uruguaya vestirán también trajes confeccionados con lana fina uruguaya Merino.

El seminario “Uruguay en clave de lana” se dio en el marco del Plan Estratégico Nacional del Rubro Ovino, desarrollado bajo la submarca país “Uruguay Wools”, que es parte integral de la marca país “Uruguay Natural”.

China es actualmente el principal socio comercial de Uruguay. Según cifras uruguayas, el 26 % de sus productos vendidos al mundo llegaron a China en 2021, por un valor total de unos 3650 millones de dólares.

El embajador Fernando Lugris (centro) muestra un producto elaborado por Manos del Uruguay, acompañado del diplomático Matías Benitez (der.) Michael Zárate

“Nuan Nuan”, la mascota del seminario, en medio de la lana uruguaya. Embajada de Uruguay

Productos elaborados a base de lana uruguaya mostrados en el seminario. Embajada de Uruguay

El embajador Fernando Lugris (izq.) junto a los ganadores de una rifa realizada en el seminario. Michael Zárate