Primera página>En Portada

El milagro rural

Source: Author:CHEN YIJIAO*
【Cerrar】 【Imprimir】 GrandeMedianoPequeño
En la Conferencia Central de Trabajo Rural, que se realizó el 28 de diciembre de 2018, se enfatizó que para la revitalización rural se deben desplegar bien el papel de los campesinos, ayudarles a sentirse más beneficiados, felices y seguros, y dar nuevos pasos hacia la modernización de la agricultura y las áreas rurales. Hay que desarrollar vigorosamente la agroindustria y promover la empleabilidad de los agricultores o que estos creen empresas en sus pueblos natales o alrededores. El Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) otorga una gran importancia al emprendimiento de los agricultores y una fiebre empresarial ha comenzado en esta tierra vibrante.

 

Cientos de millones de campesinos participan activamente en la batalla para alcanzar la revitalización rural. Con los pies arraigados en su tierra, pavimentan un camino próspero con características propias.
Una cosecha de manzanas en Luoyang, provincia de Henan.

 

Li Juntian y los cultivos

 

Un día de 1989, Li Juntian y su esposa, Feng Sumei, cosecharon berenjenas en su campo de cultivo del distrito de Gu’an, en la provincia de Hebei. Sin embargo, no estaban nada felices. El precio al por mayor había bajado hasta un yuan por cada 15 kilos. Si rehusaban tal cotización, lo perderían todo, pero si la aceptaban, no alcanzarían a cubrir sus costes. Así que Li buscó un triciclo y transportó sus berenjenas hasta el mercado de verduras de Fangzhuang, en Beijing, donde el kilo se cotizaba a 80 centavos de yuan. “Estábamos muy satisfechos”, recuerda Feng Sumei. En ese momento, esta pareja de esposos decidió fundar el Parque de Agricultura Moderna Grupo Xinglu, cuyos productos se venden hoy en todo tipo de tiendas y restaurantes de Beijing.

 

Hasta comienzos de la década de 1990, los beijineses todavía tenían la costumbre de almacenar coles en invierno. Por aquel entonces, los mercados de más alta categoría no colocaban en sus productos agrícolas etiquetas como “libre de contaminación”, “alimento verde” o “producto orgánico”, ni tampoco indicaban su lugar de procedencia. Sin embargo, este matrimonio de Gu’an, gracias a su larga experiencia en la venta de verduras en Beijing, optó desde un inicio por indicar que sus productos eran orgánicos. “Nuestros puerros y pimientos son cultivados con fertilizantes orgánicos hechos con estiércol de oveja”, asegura Feng Sumei. La alta calidad de sus verduras les hizo lograr contratos con varias empresas importantes de la capital china. En 2001, el secretario del comité del PCCh de su aldea recomendó a Li Juntian alquilar 214 hectáreas más de tierras de cultivo. Luego, la pareja estableció una serie de empresas como Xinglu Green Vegetable Planting Co., Ltd., Gu’an Green Vegetable Planting Professional Cooperative y Tianlü Food Co., Ltd., todas ellas dedicadas a la producción de alimentos verdes.

 

“La especial ubicación geográfica del distrito de Gu’an ha hecho que sus agricultores sean conscientes de la calidad de sus productos. Hacia ello van nuestros esfuerzos a largo plazo. Nosotros garantizamos la calidad de los productos agrícolas mediante el fortalecimiento de la gestión de las empresas certificadas y la mejora en el uso de los insumos agrícolas y los registros productivos. Hemos construido el Parque de Agricultura Moderna de Gu’an como una base de suministro de productos agrícolas ecológicos”, indica Zhang Weijian, subdirector de la Administración de Productos Agrícolas del Distrito de Gu’an.

 

Hoy en día, el Parque de Agricultura Moderna Grupo Xinglu integra la plantación y comercialización de verduras, y puede vender hasta 6000 toneladas al año. No solo cuenta con 22 certificados ecológicos, 4 indicadores geográficos y 2 certificados de productos agrícolas orgánicos, sino que mantiene también una clientela de más de 300 compañías y tiendas de conveniencia, entre ellos Beijing Capital Agribusiness Group, AMPM, Lawson y Seven-Eleven Japan. En 2015, el Grupo Xinglu estableció la Unión de Cooperativas Juntian de Plantación de Cereales de Gu’an. “Los agricultores ingresan con la condición de entregar los derechos de administración de la tierra, a fin de que la unión administre la tierra en su totalidad, lo que brinda una serie de servicios para toda la cadena industrial. La escala empresarial se ha vuelto más grande, pero jamás sacrificamos la calidad de los productos”, asegura Li Juntian.

 

Jiang Guowang y las plántulas

 

En la década de 1990, los campesinos de la aldea de Songtun, en la provincia de Henan, comenzaron a plantar cedros, lo que les fue proporcionando una vida holgada. Después de más de 20 años de desarrollo, la plantación y el comercio de plántulas de cedro y de otras más de 60 especies, como la magnolia común, la Photinia y la sakura, se han vuelto la industria pilar en la localidad. El área de cultivo de cedros comprende ya 40.000 mu (2667 hectáreas). Si consideramos el precio del mercado, la inversión inicial de la plantación de cedros suele ser de entre 6000 y 7000 yuanes por mu (0,067 hectáreas), pero al cabo de tres años, las plántulas comenzarán a crecer un metro por año. Al alcanzar una altura de 6 metros, podrán ser vendidas a 700 yuanes cada una.

 

Hace unos años, Jiang Guowang se sintió motivado al ver que sus paisanos ganaban dinero con las plántulas. En 2015 empezó a trabajar en la cooperativa de Deng Baofu, uno de los primeros plantadores de la aldea. “Al principio no tenía fondos para comprar plantones. Entonces, traté de conseguir algunos brotes y aprendí a cuidarlos”. Tras meses de esmerada labor, Jiang cultivó brotes de cedro en toda su tierra. A finales de 2017 vendió sus plantones y fue enseguida al comité de aldeanos de Songtun para solicitar su retiro de la lista de “familias registradas”, aquellas que reciben periódicamente subsidios del Gobierno. Gracias al comercio de plántulas, Jiang salió de la pobreza y dejó atrás esas épocas en las que no podía ni pagar los gastos escolares de su hijo.

 

Jiang Guowang no es el único que dejó de ser considerado pobre en el distrito de Runan. Gracias a las políticas del Gobierno, los proyectos industriales han llegado a la puerta de los agricultores y han permitido que 13.578 personas de 3329 familias se liberasen de la miseria en 2017. Asimismo, han promovido que los ingresos disponibles per cápita de los habitantes rurales subieran un 9,3 % hasta los 10.984 yuanes.

 

Zhu Sichen y los hongos comestibles

 

Antes de iniciar su propio negocio, Zhu Sichen, un campesino del distrito de Fuyu, en la provincia de Heilongjiang, trabajaba como empleado de una empresa estatal de cereales. No sabía nada de hongos comestibles. A pesar de ello, al cabo de un año llegó a convertirse en un reconocido experto del sector. Su experiencia puede considerarse un milagro.

 

“Me enteré por casualidad que una mujer de la aldea que padecía cáncer había mejorado mucho con el consumo del polvo de esporas de ganoderma lucidum (un hongo de clima templado), lo que me motivó a cultivarlo”, recuerda Zhu. A comienzos de 2017, junto con otros paisanos, recaudó fondos y registró la Compañía Limitada Agrícola Kunjian.

 

Con la finalidad de conocer más sobre el cultivo de esporas de ganoderma lucidum, decidió conformar un equipo y recorrer diversos lugares del país. Visitaron casi todas las empresas y bases del sector que habían podido encontrar en Internet. “Solíamos ingresar en lo profundo de las montañas a las 8 de la mañana. Las condiciones eran muy malas, los celulares no tenían señal a menudo y nuestras manos estaban casi congeladas”, explica Zhu Sichen. “A veces, con tal de aprender algo, ayudábamos a los técnicos con la labor pesada y lo hacíamos gratuitamente”.

 

De esta manera, Zhu y su equipo recorrieron 60.000 km en tres meses, lo que les permitió conocer el mercado nacional y las técnicas clave en el cultivo de los hongos. Todo ello fue una sólida base para iniciar su empresa.

 

Sin embargo, en el verano de 2017 hubo siete días consecutivos en los que la temperatura superó los 35 °C, algo rara vez visto. La temperatura en los invernaderos subió hasta los 50 °C, lo que empezó a matar algunos hongos. “Trabajamos día y noche, y por suerte llegamos a bajar la temperatura y ‘domesticar’ una especie de espora de ganoderma lucidum resistente al calor. Evitamos pérdidas más graves. La perseverancia hizo que nos convirtiéramos en reconocidos expertos del sector”, dice Zhu.

 

Sus técnicas de cultivo mejoraron y la compañía empezó un notable desarrollo. Aparte de alimentos y productos para el cuidado de la salud, producían también mascarillas y otros productos de belleza. “El sector de la espora de ganoderma lucidum tiene mucha potencialidad”, asegura Zhu. Su empresa Kunjian ha establecido cuatro bases más en el distrito con un total de 271 invernaderos. Ha logrado conformar una cadena industrial completa que incluye seis eslabones: cultivo, plantación, procesamiento, investigación científica, almacenamiento y transporte, y ventas.

 

El milagro no ha sido producto de la casualidad. Con el fin de apoyar a campesinos como Zhu Sichen, el gobierno provincial de Heilongjiang ha organizado la Asociación de Promoción Empresarial de Agricultores, que tiene ya más de 800 miembros. Además de políticas preferenciales, les ofrece fondos e invita a expertos a darles asesorías. Como dice Zhu, “nuestro negocio nace y crece con la práctica. Una buena plataforma ayuda a crear milagros”.

 

 
 
*Chen Yijiao es periodista de Farmer’s Daily.

 

Compartir con:
Editor: Wu Wen Da-->

Copyright © 1998 - 2016

今日中国杂志版权所有 | 京ICP备10041721号-4

京ICP备10041721号-4