18 de febrero de 2018. Celebración de la Fiesta de la Primavera en Madrid, España.
45 años son un periodo muy corto dentro de la larga historia que une a China y España. A través de la antigua Ruta Marítima de la Seda, estas dos civilizaciones iniciaron el intercambio de productos en un espléndido precedente de lo que hoy son la globalización y el libre comercio.
Sin embargo, en estos últimos 45 años, la relación ha cobrado un dinamismo que se ve reflejado no solo en el incremento del volumen del comercio bilateral y de las inversiones, sino también en sectores como los de turismo, cultura, deporte, educación, entre otros. Hoy no es extraño encontrar a jóvenes chinos que dominan el idioma español, y viceversa, lo que da una garantía para que en el futuro se sigan tendiendo puentes entre ambos países.
Dentro de esa antigua y fecunda amistad, China y España decidieron en 1973 –con el establecimiento de vínculos diplomáticos– abrir un capítulo que ha traído prosperidad para los dos pueblos. Gracias a la sólida base de la relación sino-española, el camino hacia la celebración de los 50 años luce promisorio.